𝑪𝒖𝒂𝒓𝒆𝒏𝒕𝒂 𝒚 𝒔𝒆𝒊𝒔

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Dos semanas han pasado desde el accidente y Eddie sigue en el mismo estado, conectado a una máquina que le ayuda a poder respirar de manera artificial y conectado a una infinidad de cables que no se para que sirven; cuando le vi la primera vez así juro que casi me muero, daría lo que sea por estar en ese lugar y que él esté bien, no se merece lo que le está pasando.

No ha sido fácil para mí tampoco, me ha costado muchas noches de pesadillas ya que la escena del accidente no paraba de repetirse en mi cabeza pero gracias a que Steve no se ha separado de mi ni un segundo he podido sobrellevarlo de la mejor manera, además si a eso le sumamos que he tenido que ingeniármelas para poder faltar lo menos posible a clase.

Honestamente en lo que más he pensado estos días es en el tema del embarazo, ni si quiera sé si Eddie va a salir de esta y no sé qué haría sola con un bebé a mis diecisiete años; ni si quiera he tenido fuerzas para acudir al ginecólogo para saber si todo estaba bien a pesar de pasarme las horas metida en el hospital; he tenido algunas molestias incluso manchado de vez en cuando así que Steve me obligó a ir al médico y este me dijo que era algo normal pero que aún así debía cuidarme, no tener estrés y especialmente guardar reposo, cosa que obviamente no he seguido ya que la situación que tengo en este momento no me lo permite.

—Hola—murmuro con una media sonrisa nada más entrar a la habitación en donde se encuentra el tío de Eddie—¿Cómo está?

—Sigue igual, los médicos no saben cuándo despertara—suspira cansado levantándose del pequeño sillon—Deberias descansar, Alice, yo puedo quedarme y cambiar el turno de la planta.

—No, quiero estar aquí si despierta...—cierro la puerta detrás de mí acercándome hasta la camilla.

Ver a Eddie en esta situación es una de las cosas más dolorosas que he experimentado nunca, está lleno de cables asistido por una respiración artificial y su pecho sube y baja con calma, algunos de sus rizos se extienden por su rostro haciéndole lucir mucho más calmado.

Wayne se despide de mi para ir a descansar y tomo su lugar al lado de la camilla; agarro la mano de Eddie entrelazandola con la mía a la par que sale un pequeño suspiro de mis labios; simplemente me quedo mirándole mientras mis dedos dejan suaves caricias  sobre el dorso de su mano.

Estas dos semanas me han servido para reflexionar y especialmente para darme cuenta de lo mucho que he podido llegar a querer a Eddie en unos meses, se ha convertido en una de las personas más especiales que la vida ha puesto en mi camino y justo en el peor momento para mí; él me ha salvado de la oscuridad en la que estaba sumida a pesar de los momentos complicados por eso creo firmemente que el destino será lo suficientemente sabio para hacer que despierte y continuemos nuestra vida juntos.

No me asusta para nada decir que Eddie es el amor de mi vida, a pesar de ser jóvenes se que quiero estar toda la vida a su lado, formar una familia y poder ser feliz de una vez por todas pero se nos están presentando demasiadas trabas que estoy segura que podemos superar.

Sin darme cuenta mis ojos comienzan a humedecerse y las lágrimas comienzan a recorrer mi rostro, apoyo mi frente en su mano dejando que las gotas saladas salgan libremente de mis ojos dejando salir toda la tristeza que tengo en estos momentos.

—Eddie...por favor tienes que despertar, tienes que hacerlo por todos nosotros pero sobre todo por nuestra relación...me niego a perderte a estas alturas. No sé qué haría sin ti sí te vas, quiero vivir la vida junto a ti, poder graduarnos juntos, viajar por todo el mundo y verte triunfar en la música—murmuro con la voz entrecortada levantando mi cabeza para mirarle—Se que me estás escuchando mi amor...tienes que ser fuerte, este bebé tiene que conocer al padre tan maravilloso que tiene...—sorbo mi nariz soltando un pequeño suspiro.

Las lágrimas me impiden seguir hablando, simplemente dejo que caigan a su antojo liberando la presión que se ha instalado en mi pecho hace tan solo unos minutos; quizás sea una locura seguir adelante con el embarazo pero yo quiero formar una familia con el a pesar de ser jóvenes.

—Eres la persona que más he querido nunca, Eddie, que no se te olvide jamás—murmuro entre lágrimas dejando un pequeño beso en su frente levantándome del sillón.

Necesito tomar un poco de aire, solo cinco minutos, por suerte una enfermera entra en la habitación para hacer los chequeos rutinarios así que aprovecho para salir de la habitación pero antes me dirijo hacia uno de los baños para hacer mis necesidades y lavar mi rostro un poco para despejarme.

Al entrar al baño me apoyo en el lavamanos observando mi rostro, mis ojeras llegan prácticamente hasta la mitad de mi cara y el cansancio en ellos es notable, abro el grifo y mojo mi cara repetidas veces al igual que mi cuello sintiendo como el agua fría consigue espabilarme un poco.

Me adentro a uno de los cubículos pero un dolor en mi vientre me hace tener que sentarme rápidamente en la taza del inodoro, este viene seguido de unos cuantos más haciendo que de mis labios se escape un pequeño quejido de dolor, al bajar mi vista puedo percatarme de mi pantalón ligeramente manchado de sangre.

Mi cuerpo ha entrado en un estado de angustia en el que no se qué hacer y cómo puedo salgo del baño en busca de alguna enfermera que pueda ayudarme; para mí buena suerte una chica rubia se percata de mi situación y rápidamente llama la atención de una de las enfermeras que se acerca inmediatamente a mi.

—Tranquila, respira hondo, te vamos a ayudar—me dice la enfermera en un intento de tranquilizarme pero no es necesario, extrañamente no estoy nerviosa, solo asustada.

Con la ayuda de la enfermera me siento en la silla de ruedas e inmediatamente me llevan hacia la consulta de ginecología de urgencias; yo me limito a hacerle caso a la chica, respirar hondo con los ojos cerrados.

A penas dos minutos después me encuentro tumbada en una camilla con un líquido frío sobre mi vientre mientras el médico acerca a mi tripa el aparato que me hace removerme un poco en mi sitio; mis ojos continúan cerrados mientras muerdo mi labio en un intento de controlar mis lágrimas.

En este momento se me pasan mil cosas por la cabeza, por una parte me asusta el hecho de que algo haya podido pasarle al bebé por mi culpa y por no haber hecho caso a las recomendaciones que tenía que haber seguido, pero por otra me siento muy mal por tener una sensación de alivio de que esto haya podido ser un aborto, tal vez el destino no quiera que sea madre en este momento y haya hecho lo que yo no era capaz de hacer por mi propio pie.

—Lamento decirte que has tenido un aborto, no hay latido y el sangrado ha sido muy fuerte. ¿Te había ocurrido antes o estás sometida a situaciones extremas de estrés?—pregunta el médico con una voz dulce dándome un trozo de papel para limpiar el gel.

—Si, me había pasado antes...debía haber guardado reposo, además estoy viviendo una situación un tanto complicada—respondo con un tono neutro, no es necesario entrar en tantos detalles.

—Entiendo...en chicas jóvenes como tú es frecuente tener abortos espontáneos—suspira acercándose hacia su mesa—Te recetaré unos medicamentos para evitar el sangrado posterior, es necesario que guardes reposo y descanses—añade tendiéndome el papel.

Yo simplemente asiento sin decir nada más y salgo de la consulta por mi propio pie a pesar de que la enfermera ha vuelto a ofrecerme la silla; guardo el papel en uno de mis bolsillos y suelto todo el aire que tenía contenido en mis pulmones, realmente no sé si tengo una sensación de tristeza, culpa, conmoción o alivio.

Siendo sinceros nadie estaba ilusionado con la llegada de este bebé ya que es demasiado pronto, ni yo misma estaba ilusionada así que supongo que quizás esto haya sido lo mejor.

Me siento mal por pensar así, pero es la realidad.

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HOLAAAAAA.

Siento no haber subido capítulo estos días, pero estoy liadísima preparando cosas para mí Erasmus además he estado enferma. No quedan muchos capítulos para que Hell termine pero os aseguro que vais a disfrutar. 😭

Por cierto...¡SOMOS CASI 29K! En serio mil gracias por apoyar la historia. 🥺

Espero que os haya gustado el capítulo a pesar del drama, jeje.

Gracias por leer. 💘

𝑯𝒆𝒍𝒍 | 𝑬𝒅𝒅𝒊𝒆 𝑴𝒖𝒏𝒔𝒐𝒏Where stories live. Discover now