El regreso de la golondrina [Parte 2]

361: Evitar exponerse

Después del análisis, sus corazones eran como espejos.

Li Qitian le había dado órdenes secretas a su hermana para instigar a la señora Lu, con el fin de crear la circunstancia actual. De esta forma, el emperador también podía observar qué lado era más fuerte.

—Una vez que los Qin se peleen con los Lu, no solo se moverán las aguas de la corte, sino que si exhibimos una fuerza de batalla lo suficientemente impresionante como para reprimir a una familia aristocrática, su majestad se beneficiará de eso sin necesidad de habernos enviado carbón en medio de una fuerte nevada.

Los ojos de Qin Yining brillaron ante ese punto de vista, aumentando su admiración por ese noble señor en lo alto.

—Si realmente formamos una enemistad mortal con el clan Lu, necesitaremos un gran patrocinador. El emperador sería la primera opción sin duda. De esa manera, volverá a alcanzar su objetivo. Su majestad posee ingenio y astucia en igual medida, ¡es digno de admiración!

Qin Huaiyuan miró a su hija con profunda aprobación.

—Sabía que serías capaz de diseccionar todo limpiamente tan pronto como te dijera algunos detalles. Sabía que elegirías el mejor curso de acción también.

La chica se sonrojó por los cumplidos y rápidamente agitó sus manos para negarlos.

—Por lo tanto, padre, nuestro curso de acción más ideal es no ofender al clan Lu y castigar a la señora Lu.

—Así es, no podemos permitir que una mujer nos perjudique de esta manera. Seremos menospreciados por todos los demás si esto persiste. Al mismo tiempo, necesitamos tener suficiente moderación para no ofender a los Lu. Creo que el asunto se agudizará en los próximos días, pero no te preocupes, tengo mis maneras de controlarlo.

Cuando Qin Yining escuchó eso, su expresión se oscureció.

—Padre, las cosas están tan desordenadas en la corte y aún no estamos sobre una base firme. Lo que está por venir seguramente será mucho más complicado que esto. ¿Seremos capaces de manejarlo todo?

El ministro sonrió al ver a su hija en un raro momento de preocupación infantil.

—Niña tonta, los peces no pueden sobrevivir en aguas cristalinas. Cuanto más desordenadas estén las cosas, mejor.

Se levantó y se sacudió las arrugas de las mangas y los dobladillos.

—Regresaré y te asignaré algunas máscaras de plata leales y confiables para tu seguridad personal. Los hombres de Cao-shi son talentosos y bastante discretos. Serán tan infaliblemente leales como lo fueron con el antiguo emperador, siempre y cuando se les pague adecuadamente. —El patriarca Qin se rió entre dientes—. En cuanto a la paga, no me molestaré con eso en absoluto. Mi hija es ahora una gran terrateniente y es mucho más rica que su anciano padre.

Qin Yining se rió.

—¡Padre es una persona tan poderosa, un poco de dinero no debería importarte en absoluto!

Qin Huaiyuan agitó una mano y reanudó la seriedad.

—Al contrario, compraste la mansión y yo no soy más que un funcionario limpio y honesto. Mi salario es muy limitado. ¡Ay! Pagar a las Máscaras de Plata en estos días casi me ha vaciado, así que darte esta tarea es simplemente perfecto.

—¡Padre, eres demasiado astuto!

Qin Huaiyuan se rió junto con su hija, pero cuando el rabillo del ojo recorrió la puerta del baño, la sombra alta y grande en el suelo fue toda una sorpresa. Una sonrisa comprensiva se extendió por su rostro momentos después.