Eres Mía - Imagina con Jimin

Part. 18

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A la mañana siguiente cuando desperté lo primero que hice fue revisar mi celular y al ver que eran las 9 de la mañana, me sentí feliz ya que aún podía aprovechar el día.

Me levanté de la cama y me dirigí al baño para lavarme la cara, me cepillé el cabello y me puse un poco de labial.

Cuando bajé vi a Jimin tomando un café mientras leía unos papeles, creo que ni se percató que estaba ahí ya que no despegaba la vista de lo que sea que estuviera leyendo.

- Buenos días -saludé por educación y el fijo su atención en mí

- buenos días T/n, por favor toma asiento, la señora Isabel, traerá tu desayuno

- ¿qué pasó con Lucia? - pregunté mientras me sentaba y es que me iba a sentir muy mal si me enteraba que la había despedido

- está apoyando a mi madre

- ¿cómo?

- como te dije, ya no trabaja más para mí, ahora esta apoyando a mi madre en su negocio – dijo mientras tomaba otro papel para comenzar a leerlo, lo cual me sentí más tranquila ya que al menos no la despidió

- ah... entiendo

- ¿hoy no irás a trabajar? – preguntó mientras una señora llegaba con mi desayuno

- que lo disfrute – mencionó para luego retirarse

- muchas gracias... eh... no, no trabajo los martes y jueves, bueno, ¡si trabajo! solo que no estoy obligada a ir a la oficina y puedo trabajar desde casa, ya sabes.

- cierto, los de diseño tienen esa ventaja, si vieras como trabajan los de administración, no te daría ganas de ir nunca - dijo con una risita

- créeme que sí sé, eh pasado por esa área muchas veces y no sé, es muy sombría – comenté siguiéndole el juego, aquel rio con mi comentario y mientras iba comiendo seguía con esos papeles, lo cual mi curiosidad ganó y no pude evitar preguntar - ¿qué lees?

- me pongo al día con los últimos contratos de Imperia, como se mencionó en el aniversario van a ver muchos cambios y se han hecho convenios con varias empresas, quiero saber cuáles son

- ¿viste alguno en el área de diseño? -pregunté con intensión de saber sobre las dichosas tabletas que prometió el coordinador de mi área

- sí, por lo que vi hay un convenio con Wacom y XP-Pen

- ¿en serio? ¿significa que tendremos tabletas de ambas marcas? – pregunté sorprendida

- m... algo así

- ¿cómo que algo así? -pregunté confundida

- ¿sabías que eras muy preguntona? -dijo con una risita

- ay, perdón, mi curiosidad me ganó -respondí algo apenada

- no pasa nada, se supone que no debería decite esto, pero ya que estamos

- ¿qué cosa?

- con respecto a las tabletas, primero se hará una prueba para definir qué marca predominará en la empresa y luego se hará un contrato de exclusividad con dicha marca

- y ¿cómo harán la prueba?

- eso es lo que no te puedo decir

- ay por favor dime – suplique ya que mi curiosidad estaba por lo cielos

- bueno, pero no se lo digas a nadie ¿ok?

- ok, lo prometo

- cada marca nos brindará 3 tabletas con pantalla y se escogerá a 6 personas de todas las áreas de diseño para que las usen en un lapso de 1 mes cada una, para que así lleguen a la mejor opción.

- oh... ya veo, entonces no va ser pronto

- tendrás que esperar un poco más, pero ten por seguro que vas tener una en tus manos

- sí, eso haría que no quisiera salir de la oficina nunca

- es una forma de incentivarlos para que pasen más tiempo en la empresa -dijo con una risita y luego continuó leyendo sus papeles mientras yo terminaba de desayunar

- bueno, gracias y provecho voy a ir a cambiarme para empezar a trabajar -dije mientras me levantaba rumbo a la habitación

- de hecho... -habló repentinamente haciendo que me quedara

- ¿sí?

- quería saber si quieres ir a comprar algunas plantas

- ah... no sé nada de plantas

- yo tampoco, pero mamá quiere que redecore el jardín y me pidió que escogiera plantas bonitas, tú opinión me serviría mucho

- m... bueno, ayer avance más de lo planeado, pero...-

- además no quiero ir solo... - lo dijo un poco apenado haciéndome entender que realmente quería que lo acompañara

- está bien, me cambio y salimos

- perfecto, te estaré esperando

Al llegar a la habitación rapidamente escogí que me iba poner, unos jeans negros y un poco blanco con zapatillas blancas, era cómodo y apropiado para la ocasión ya que no ibamos a ir a ningún lugar elegante.

Pero mientras iba escogiendo, vi un vestido de flores de tela vaporosa y fue donde conocí el amor a primera vista. Era simplemente divino, esto con unas zapatillas blancas era la definición de un buen outfit para ir a comprar flores.

Al estar lista bajé lo más rápido posible ya que no quería que Jimin se cansara de esperar.

- ya estoy lista -dije asiendo notar mi presencia obteniendo toda su atención

- acercate -lo dijo tan de repente haciendo que me sorprendiera, pero de igual forma le hice caso y cuando estaba cerca de él, tomo una de mis manos e hizo que diera una vuelta - te queda muy lindo ese vestido -dicho eso me reí, tanto drama para eso

- gracias... tú tambien te ves muy bien... -dije con vergüenza, aquel andaba con una camisa blanca con las mangas hasta los codos y pantalones negros de vestir, lo cual hacía que se viera elegante y atractivo

- gracias -dijo con una risita - es hora de irnos - sin más, salimos de la casa y pude reconocer mi camioneta estacionada al costado de la suya

- ah... ¿qué hace mi camioneta aquí?

- ayer que fuí a tu departamento, tomé tus llaves y aproveché en traerla, pensé que la necesitarías para ir al trabajo

- gracias, fue muy lindo de tu parte

- de nada, también llené el tanque, no vas a tener problemas de gasolina

- Jimin no...-

- no era necesario, lo sé, pero es que ya solo quedaba poco y no quería que pierdas tiempo yendo a recargarla -eso me enterneció muchisimo, realmente podia notar que se preocupaba por mí y por mi tiempo, así que solo acepté

- esta bien y muchas gracias -en eso tuve una idea -dejame compensártelo

- ¿qué? No, no es... -

- solo déjame manejar esta vez, tu podrás ir cómodo en el asiento del copiloto

- es un poco lejos

- ¿y? Yo puedo manejar perfectamente rutas largas -el solo sonrió para luego asentír con la cabeza

- esta bien, pero vamos con mi camioneta

No refuté el comentario ya que moría de ganas de provarla, no todos los días se tiene la oportunidad de manejar un Mercedes. Al entrar,  rápidamente le pedí la dirección

- ¿dondé es?

- pásame tu celular para poner el GPS -dicho eso le hice caso y desbloquee mi teléfono para que pudiera usarlo - es ahí, llegaremos en 40 minutos -dijo mientras acomodaba el celular

- perfecto -dije mientras me acomodaba el cinturón de seguridad, cosa que él imitó

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