Part. 52

1.2K 124 6
                                    

☆♤☆♡☆♤☆♡☆

Ya no tenía lágrimas para seguir llorando, poco a poco me iba calmando y muy despacio me fui levantando del piso para dirigirme a la cocina.

Al abrir el refri vi el six pack que había comprado en la mañana, haciendo que cerrara el refrigerador rápidamente, maldita sea, mi subconsciente se negaba a romper esa estúpida promesa.

Solo suspiré para intentar calmarme, nadie valía tanto la pena como para dañarme a mí misma, así que con disgusto me serví algo de agua ya que el llanto había hecho que me deshidratara.

Luego de eso me dirigí al baño para lavar mi cara, odiaba la sensación que me dejaba el llorar a mares.

Me dirigí a mi cuarto donde me recosté en la cama para prender la televisión, aún seguía con las inmensas ganas de llorar, pero intentaba a toda costa no hacerlo, estoy harta de este sentimiento así que tomé mi celular para perderme en alguna red social.

Mientras navegaba en Instagram vi la imagen de un Totoro en pintura digital, así que ¿por qué no?... pintar siempre me relaja, pero ahora es demasiado tarde y no quiero hacer tanta bulla por los vecinos, además que me daba pereza sacar las cosas.

Poco a poco me iba desanimando hasta que recordé que podría tener un posible acompañante en esta ocasión.

Con algo de inseguridad fui a mi lista de contactos donde después de tanto buscar di con su número, estaba muy indecisa de llamarlo, no nos conocemos casi nada y podría pensar que tengo segundas intenciones, pero él no se ve como aquellos chicos.

Muy tímidamente presioné el botón de marcar, el celular iba sonando hasta que en el tercer pitido se escuchó su voz.

- ¿aló? ¿T/n? - habló confuso ante mi repentina llamada cosa que con nerviosismo respondí

- Hola Nam... perdóname por llamarte a esta hora, en serio lo siento si estoy interrumpiendo algo personal - hablé con mucha pena

- no, tranquila, estaba revisando algo en mi laptop, pero nada importante, ¿estás bien? Te escucho algo extraña - dicho eso recordé que mi voz reflejaba mi llanto y la resaca, pero solo me quedó negarlo

- ¡sí!, sí, todo está fantástico - contesté con una risa falsa, pero que no pude mantener mucho tiempo ya que mis lágrimas no esperaron en salir

- ¿segura? se te escucha como si estuvieras llorando - habló algo preocupado

- Nam... no... no estoy bien - dije con la voz semi quebrada, qué más da, de todas formas, él ya se había dado cuenta

- ¿qué pasó? ¿por qué lloras?

- hoy no fue un gran día que digamos...

- lamento escuchar eso ¿hay algo que pueda hacer por ti?

- bueno... justamente para eso te llamaba, no quiero que pienses que te estoy utilizando solo que no tengo a nadie más... y.... yo solo quería saber si querías venir a casa a pintar algo, entendió que es una propuesta muy repentina y lo más probable es que ya tengas planes, pero... créeme que no te lo pediría si no lo necesitara

- entiendo... tranquila, la verdad que no tenía planes para mañana y si se trata de ayudar a una amiga, no tengo ningún problema en hacerlo, ¿te parece mañana a las 10 a.m.?

- sí, estaría perfecto, en serio muchas gracias y perdón si te parece algo muy confianzudo de mi parte...-

- no te preocupes, pásame tu dirección y mañana estaré ahí

- sí, es Vernon avenue 448

- perfecto me queda cerca, por favor descansa y sueña cosas lindas, no sé por lo que estás pasando, pero no creo que valga la pena para que llores de esa manera, tómate una manzanilla te ayudará a conciliar el sueño - habló de una manera dulce haciendo que sonriera por su amabilidad

- gracias, en serio no sabes cuanto agradezco tus palabras...

- de nada, será mejor que descanses, sino mañana te quedarás dormida y no me abrirás la puerta - dijo a manera de broma haciendo que riera por su tono burlón

- no, nunca le haría eso a alguien

- eso espero, voy a llegar con helado y será tu culpa si se derrite - añadió haciendo que me riera más

- está bien, ya me iré a dormir, nos vemos mañana y gracias, necesitaba estaba platica

- descansa, para eso están los amigos

- bye..  buenas noches - contesté de manera amable

- igualmente, hasta mañana

Sin decir más colgué el teléfono, sin duda esta pequeña plática me había subido los ánimos.

Me levanté de la cama y me dirigí a la cocina para preparar una infusión de manzanilla siguiendo su consejo.

Iba tomando poco a poco y con cada sorbo intentaba respirar profundamente para calmarme.

Cuando acabé dejé mi taza en el fregadero para luego regresar a mi cama, donde poco a poco fui conciliando el sueño, solo tenía la esperanza de que mañana sería un nuevo día....


*******

Capitulo de transición, vamos por un nuevo arco 👀🧡

Eres Mía - Imagina con JiminWhere stories live. Discover now