Part. 42

1.4K 122 12
                                    

☆♤☆♡☆♤☆♡☆

Con pesades me dirigí a la oficina de mi jefa y aunque no quería llegar lo terminé haciendo, toque la puerta y de inmediato me dijo que pasara.

- cierra la puerta - habló seria, cosa que hice caso, intenté hablar, pero ella habló primero

- señorita Diana déjeme ex...-

- ya te dije que no quiero escuchar tus explicaciones - interrumpió - te dije perfectamente que no quería otra escenita como esta y ¿qué pasó?

-...

- hiciste exactamente lo que te pedí que no hicieras y para colmo ¡frente al joven Jimin!

- lo sien...

- ¡no quiero ir que lo sientes! - gritó molesta - T/n ¿qué está pasando contigo? De todas las personas que trabajan aquí eres la última en quien pienso para estos escándalos, lo puedo esperar de Pamela, Lucia hasta del mismo Alonso, pero ¿de ti? Eres mi mano derecha, aposté por ti, doy la cara por ti y ¿es así cómo me lo pagas?

-...

- en la reunión de hoy no sabes cuanto insistí para que seas una de las personas que van a hacer uso de esas tabletas ¿sabes por qué? Porque de todas las personas que trabajan en esta empresa realmente creo que eres la más competente y buena en el trabajo, pero eso no significa que yo voy a estar protegiéndote todo el tiempo, así que será mejor que le agradezcas al joven Jimin quien me convenció de no despedirte porque ya te había advertido de esto

- si señorita...

- "si señorita" no quiero volver a saber ¡nada! ¡NADA! Referente a este tema, esta es tu última oportunidad, una escena más y te vas, no me importa si el joven Jimin dice que eres indispensable para la empresa ¡¿me entendiste?!

- sí, le prometo que no volverá a pasar...

- realmente lo espero T/n, realmente lo espero, ahora retírate porque a diferencia de ti yo tengo mucho trabajo que hacer y no te quiero ver más

- está bien... que tenga linda noche

Sin decir algo más me retiré de su oficina para dirigirme a la mía donde ni bien entré me desmoroné para hacerme bolita y comenzar a llorar, estaba avergonzada, triste y decepcionada, no puedo creer lo tanto que me esforcé para llegar a donde estoy, todo para que esté a punto de perderlo por una estupidez.

Pasaron los minutos en los que me iba calmando, limpié mis lágrimas y me paré para dirigirme a mi escritorio y buscar las toallas húmedas que tenía en el cajón.

En lo que iba limpiando mi rostro, revisé mi teléfono donde tenía un mensaje de Jimin quien me decía que lo llamara terminando mi "charla" con Diana, lo pensé un poco e intenté de una vez por todas tranquilizarme para por fin marcarle a lo cual él respondió inmediatamente.

- ¿aló? Pequeña ¿estás bien? – preguntó preocupado

- sí, estoy bien, no te preocupes – respondí de la manera más calmada posible

- te gritó ¿verdad?

- sí, pero por favor no hagas nada, el regaño era necesario

- entiendo, pero de igual forma no te lo merecías

- tal vez y sí Jimin, pero bueno, como te dije no te preocupes, terminaré de trabajar y en la salida no vemos ¿sí?

- está bien, no veo la hora de irnos a bailar para que olvides este mal rato

- yo tampoco...

- te estaré esperando en tu camioneta, ¿te parece?

- sí, claro, ahí te veo

- ¡T/n! – exclamó de repente antes de que colgara

- ¿sí?...

- Te quiero... - dijo haciendo que mi corazón se acelerara

- yo... yo también te quiero... - correspondí algo nerviosa lo cual escuché una pequeña risa de su parte

- nos vemos

- adiós...

Dicho colgué y una pequeña sonrisa escapó de mis labios, a pesar de todo me sentía feliz estar viviendo este momento, así con algo más de ánimo comencé a redactar mi reporte diario y terminar de revisar algunos documentos para por fin poder salir del trabajo.

Pasaron las horas y siendo las 6:30 exacto, apagué la computadora y tomé mis cosas para retirarme, salí de la oficina colocándole llave para después esconderla en el masetero de siempre y dirigirme al ascensor rumbo al sótano donde se encontraba mi camioneta.

Al llegar me dirigí al lugar donde había estacionado y al mirar con más detalle vi que alguien estaba parado por un momento pensé que se trataba de Jimin, pero mi sonrisa se borró al darme cuenta que se trataba de Jungkook, quien al verme no dudo en acercarse y hablar rápidamente para fingir un abrazo.

- sé que me odias, pero mi padre está aquí, así que solo finge que me amas – susurró en mi oído haciendo que mi cuerpo se tensara y comenzara a temblar, lo había dicho tan seriamente que no hice nada para negarme y correspondí su abrazo – amor me alegra mucho verte – dijo con sonrisa mientras se alejaba de mí y su padre se acercaba a nosotros

- T/n un placer volver a verte – dijo entregándome la mano algo que con temor correspondí

- el... el gusto es todo mío señor Jeon – hablé intentando tragarme los nervios y con una de las sonrisas más forzadas de la historia

- amor, como te comenté ayer mi padre quiere organizar una reunión, pero antes quiere que vayamos a cenar, tú sabes algo más intimo

- sí, sí no tengo ningún problema – respondí aun siguiendo con una sonrisa en el rostro

- perfecto, entonces ustedes vayan juntos y yo manejo la camioneta– habló su padre un tanto serio

- está bien, tú síguenos – respondió Jungkook para darle las llaves a su padre y este se vaya a su camioneta – abre la camioneta por favor – ordenó lo cual obedecí y le entregue mis llaves para luego entrar al vehículo

Ya adentro y viendo que su padre no estaba más empecé a reclamar

- ¡no puedo creer que uses a tu padre para obligarme a estar contigo! – exclamé con enojo

- ¡no lo estoy usando! ¡él quiso venir! – respondió mientras prendía la camioneta

- ¡¿por qué me haces esto?! ¡no quiero ir a cenar con ustedes! – grité con algunas lágrimas en los ojos

- perdón... no tuve opción, te prometo que solo vamos a cenar

- ¡¿lo dices en serio?! ¡o solo es una maldita excusa para llevarme a tu casa!

- ¡NO! ¡lo digo en serio! ¡solo finge amarme como lo haz hecho todo este tiempo!

Gritó lo cual preferí quedarme callada y ver a la ventana intentando no derramar ni una sola lágrima por él, sin duda él no era en nada el lindo chico que una vez conocí.

El recorrido fue en silencio hasta que sentí como sonaba mi celular y al verlo disimuladamente me di cuenta que Jimin me estaba llamando lo cual corté inmediatamente.

Pasaron algunos minutos en los que saqué el teléfono de mi cartera para entrar a mensajes y aprovechando que Jungkook estaba mirando al frente envié un mensaje rápido.

- perdóname, el padre de Jk vino y me obligaron a ir a cenar

- mándame tu ubicación – escribió rápidamente lo cual obedecí y compartí mi ubicación para poner el celular en silencio

Guarde el celular y afortunadamente Jungkook no se había dado cuenta o tal vez sí y no le generó ninguna sospecha.

Pasó el tiempo para que por fin podamos llegar al dichoso restaurante y antes de salir él tenía que hablar.

- después de mañana te prometo que te dejaré en paz...



*******

Eres Mía - Imagina con JiminWhere stories live. Discover now