Part. 31

1.9K 143 30
                                    

☆♤☆♡☆♤☆♡☆

Había pasado un rato en el cual aproveché para meterme a la regadera, al menos eso ayudó a que me tranquilizara.

En lo que acababa de secar mi cabello escuché como tocaron la puerta y corroboré quien era cuando habló.

- T/n... ¿puedo pasar? - preguntó algo tímido por su tono de voz y yo apagué la secadora y dejé todo encima de la mesa

No sabía si abrirle o no, no me había gustado para nada su reacción, pero también entiendo que para él era una buena noticia y en eso volvió a tocar, esta vez no lo pensé más y abrí.

- ¿qué pasó? - pregunté mientras lo veía sin expresión alguna

- quisiera hablar contigo...-

- si vienes a disculparte, ya lo hiciste ¿algo más? - lo sé, estoy siendo muy mala, pero mi lado masoquista estaba liderando mis decisiones

- no, no te molesto más... - dicho eso me arrepentí, no quería que se fuera

- pasa - dije ofreciéndole entrar

- ¿qué? - preguntó confundido

- perdón, tampoco te mereces este trato, solo es mi ego hablando - dije con vergüenza

- entiendo - respondió con una leve risita, haciendo que a mí también se me escapara una

Sin más entró a la habitación para caminar hasta la cama y sentarse, yo iba detrás de él y al verlo sentado extendió sus manos invitándome a sentarme sobre sus piernas, lo cual acepté

- se está volviendo costumbre hablar de esta manera - comenté una vez que coloqué mis rodillas entre sus caderas

- se están volviendo costumbre muchas cosas, pequeña - dicho eso no evitar verlo con sorpresa mientras mis mejillas se ruborizaban, ¿había escuchado bien?

- ¿pequeña?...

- sí, eres más pequeña que yo y es una manera tierna de llamarte... mi pequeña, suena lindo

- no soy tan pequeña - reclamé

- casi 20 centímetros se te hacen poco -comentó a lo cual me reí

- no, bueno ya, está bien si soy pequeña, pero... -

- entonces dime como llamarte - sugirió - o mejor dime como te llamaba tu ex para no llamarte de esa forma

- aún no eh terminado con él - dije algo seria

- pero piensas hacerlo

- sí, pero...-

- entonces dime como te decía - insistió

- T/n

- ¿en serio? - preguntó sorprendido y no pude evitar reír al ver su rostro

- sí, no teníamos apodos... a él le parecía raro - dije con algo de melancolía

- entiendo... eso significa que puedo llamarte, mi amor, mi vida, mi tesoro - hablaba mientras me daba besos por parte de mi cara y mi cuello y yo no pude evitar reírme por las cosquillas que sentía a lo cual tuve que apartarlo

- podrás llamarme así una vez que seamos novios - dije con una sonrisa

- no puedo esperar

En eso sus labios se unieron a los míos, me sentía en las nubes cada que me besaba, a estas alturas yo también podía decir que estaba loca por él.

Lo tomé de cuello y mientras me sujetaba, se paró para comenzar a caminar hacia la puerta mientras me cargaba.

Salimos de mi habitación para luego entrar a la suya, donde me colocó en su cama para comenzar a desvestirme mientras besaba cada zona de mi cuerpo.

Y sí, así como ayer nuevamente unimos nuestros cuerpos para ser uno, en donde yo era suya y él era mío, donde ya no podía decir que esto era simplemente sexo, ya que cada uno estaba entregando una parte de su ser.

Después de tantos besos, tantas caricias y tantos gemidos, ambos habíamos llegado a nuestro clímax, donde nuevamente cansados y con algunas gotas de sudor nos veíamos con tontas sonrisas mientras intentábamos retomar la cordura.

Al hacerlo, solo nos abrazamos y nos dimos las buenas noches, ambos solo queríamos dormir y hacerlo después de haber hecho el amor... era un sentimiento indescriptible.

~~~~~~~

Al día siguiente desperté por las caricias de mi acompañante que verlo no pude no sonreír embobada.

- buenos días - saludé

- buenos días, pequeña... ¿cómo amaneciste?

- bien, podría acostumbrarme a despertar así todas las mañanas - dije para ganarme una sonrisa suya

- yo pienso igual, pero mi espalda no está de acuerdo

- ¿qué? - pregunté confundida

- acaso no te acuerdas que alguien aquí presente tiene un complejo de gata porque me arañó toda la espalda - dijo tan calmadamente haciendo que me muera en vergüenza y llevara mis manos a mi rostro

- ¡¿en serio?! - pregunté mientras me reía por nerviosismo - perdóname, ¿te duele mucho?

- tranquila, solo arde un poco, pero valió la pena

- perdón, prometo que no volverá a pasar - hablé a un más apenada

- me... es un precio que estoy dispuesto a pagar

Dicho eso comenzó a besarme, yo no podía dejar de reírme, no recordaba haberlo arañado tanto, pero al sentir mis uñas, pues si estaban un poquito largas; no pudimos seguir besándonos ya que mi teléfono comenzó a sonar.

- ¿aló? - contesté

- aló, señorita soy yo, el cerrajero le eh estado llamando a su novio y no me contesta - habló de repente y yo se lo pasé a Jimin quien puso la llamada en altavoz

- aló, él habla, perdona no sé dónde dejé mi celular

- aló joven, le llamaba para decirle que dentro de una hora abriré la puerta, para que pueda venir a revisar - dicho eso hizo hice una sonrisa de extremo a extremo, por fin abrían mi departamento

- sí, no se preocupe ahí estaremos

- muy bien, joven yo empiezo a trabajar, entonces

Sin más colgó y yo en mi felicidad le robé un beso a mi supuesto novio ya que estaba tan feliz de volver a tener mis cosas.

- gracias, sin tu ayuda esto hubiera demorado semanas

- no te preocupes, solo me da tristeza que ya no te quedarás conmigo

- pero nunca dije eso - hablé intentando animarlo - ahora tenemos dos lugares para pasar el rato, si sabes a lo que me refiero... - dije con algo de picardía en mis palabras a lo cual él entendió

- me fascina esa idea - dijo para volver a besarme

- entonces hay que alistarnos, estoy algo emocionada

- está bien, ve a cambiarte

Yo asentí y salí de la cama envuelta en las sábanas, me daba gracias ver mi ropa regada por su habitación, pero no perdí más tiempo y me retiré para ir a cambiarme, ya quería llegar a mi departamento...



*******

Eres Mía - Imagina con JiminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora