Inspírame 🧵 [JiKookMin]

❀8❀

Idear el discurso que le diría a Jimin era como empezar a escribir en una página en blanco. Había practicado varias veces frente al espejo, considerando las diferentes énfasis que podría hacer y cada uno de los gestos que usaría. Nada le convencía.

Respiró profundo, aclaró su garganta, se aflojó el cuello de la camisa, acomodó su postura, miró fijo a su reflejo. Tomó aire ensanchando su pecho.

—¿Quieres modelar para mí? —ensayó. Seguía sin sentirse satisfecho.

Se escucharon tres golpes en la puerta, la atención de Jungkook fue hasta allí. Salió del baño para ver de quien se trataba. Abrió la puerta de su estudio. Era Clarice con una mirada como de consternada.

—¿Pasó algo? —preguntó extrañado.

—Hana Lee está en la tienda.

Los ojos de Jungkook se abrieron de par en par. "¿Es que esta mujer siempre llega sin avisar?", dijo para sus adentros. Soltó un suspiro cerrando los ojos. Se mantuvo así unos segundos, recuperó su postura enaltecida y se dispuso a bajar las escaleras seguido por su amiga. Tenía que mantener la calma, aquella mujer era como su jefa.

Clarice se quedó sentada en los últimos escalones, Jungkook pisó la planta baja con firmeza. Hana Lee estaba toqueteando con cara de desagrado una de las polvorientas sábanas blancas que cubrían los maniquíes desnudos. Traía puestos unos tacos altos, un vestido verde limón largo hasta debajo de las rodillas y un abrigo peludo color marrón. Ella dejó de tocar las sábanas y volteó hacia Jungkook.

—Buenos días —habló él sin saber muy bien qué decir, acercándose a ella.

—Buenos días —dijo en un tono refinado.

—¿Qué la trae por aquí? —Se puso frente a ella poniendo sus manos detrás de su espalda

—Trabajo —Acomodó su abrigo—, traigo noticias.

—¿Buenas o malas? —se preocupó.

—La agenda de nuestros patrocinadores está muy ajustada, les surgió una muestra de autos de alta gama sobre la misma fecha que nuestro desfile de modas. Les va a dar más dinero.

—¿Y eso qué significa?

—Adelantaron la fecha del desfile —dijo cruzándose de brazos. Jungkook reprimió un grito.

—¿Para cuándo?

—En un mes.

Jungkook se llevó una mano a la frente, sintiendo como todo se le venía encima. De pronto todo lo que había avanzado le parecía deficiente.

—¿Cómo vas con los diseños?

—Yo... voy bien, supongo.

—¿Supones?

—Tiene hechos cuatro diseños —dijo Clarice desde el fondo. Jungkook volteó a mirarla con el ceño fruncido, no estaba listo para que la mujer lo supiera—, confeccionados y listos para que alguien los modele.

—¿En serio? —se sorprendió Hana— ¿Puedo verlos?

—Les faltan algunos detalles, terminaciones...

—Están arriba —interrumpió Clarice poniéndose de pie.

Jungkook presionó los labios en una línea y tragó saliva. Hana esbozó una amplia sonrisa.

—¿A qué estamos esperando? —cuestionó emocionada, dio una serie de pequeños aplausos.

—Sígame —indicó Clarice.

La mujer dió un saltito y siguió a Clarice. Jungkook iba detrás de ellas mordiéndose las uñas.

Subieron las escaleras, Clarice abrió la puerta del estudio y se hizo a un lado para que Hana pudiera pasar. La mujer se adentró en la habitación y empezó a mirar alrededor. Jungkook se apresuró a pasar por su costado.