Ella quería una historia de amor como la que tuvieron sus padres. Quería amar y ser amada.
Sin embargo amar a alguien no es difícil, lo difícil es ser amado por la misma persona.
Ella quería su final feliz.
Pero cometió error tras error..
Se enamor...
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Una sonrisa y la mano de la joven apoyada en el pecho del peliazul le aseguraron a este que si en aquel momento le pedía su alma sería capaz de confiársela.
¿En qué momento dejó que se metiera de ese modo en su vida? ¿Dónde quedó eso de que en las mujeres no se puede confiar? ¿Dónde quedó el mal recuerdo de lo doloroso que se siente cuando traicionan la confianza?
Los jugadores se aseguraron de que ella estaba bien, mientras Arion y Samguk realizaban entre ellos el cambio. Un par de sonrisas y asegurar que estaba bien parecieron no ser suficientes ante sus miradas preocupadas, pero si pareció ser suficiente para Victor, quien, según su punto de vista, la Barbie tenía una mirada firme y diferente.
Incluso ella se sentía diferente. El fuego que recorría su cuerpo por dentro no era normal, esa sensación la hacía sentir viva. Y él podía verlo.
Él veía el fuego en su mirada que nadie más parecía ver. Él veía su alma en sus ojos, y nadie más que él lo comprendía.
Con la vuelta de Arion a su posición original se reanudó el partido, un saque a largo hacia un jugador que nadie había cubierto, pero Gabi se interpone robándole el balón al instante y un pase directo hacia Eugene, hacia la persona que más dudas tenía en ese campo. ¿De verdad valía la pena todo lo que estaban arriesgando? ¿Lo conseguirían?
Tuvo miedo antes de intentarlo, siempre fue así. Ya era hora de cambiarlo, ¿no? De luchar antes de rendirse.
Una patada fuerte al suelo y su supertécnica salió a la luz, dándole un arranque veloz.
-¡Melissa!
Sus pies se apoderaron del balón y una sonrisa que hacía años que Axel no veía asomó por su rostro y se reflejó en las pantallas. Una sonrisa llena de confianza y poder oculto.
Daba pequeños toques al balón mientras seguía la trayectoria, dispuesta a llevarlo a la cima.
"Corre, mi amor. Así es como se juega al fútbol. Tienes que correr con el balón en los pies ¿Sí?"
Su sonrisa se ensancho oyendo la voz de su padre en su mente. Él se lo había explicado, pero ella lo había olvidado.
Santelmo se lanzó por el suelo en una entrada dispuesto a robar el balón, pero ella se dio cuenta desde el inicio de su intención, ella era capaz de controlar lo que sucedía en el campo.
"Tienes que saber dónde están tanto tus compañeros como tus rivales. Debes de ser consciente de lo que sucede a tu alrededor."
Ella lo recordaba. Recordaba haberle dicho que aquello era muy complicado, y él le arrebato el balón en un regate afirmando que nunca dijo que fuera fácil. ¿Por qué ella había olvidado sus recuerdos tan preciados con su padre? ¿Por qué había olvidado algo tan único como aquello?
