EL ITALIANO ( Matteo Esposito)

Capitulo 10

 En eso suena el llanto de mi bebé y mi mamá me la trae para hacerle el biberón, Marcos me observa sorprendido y me pregunta.

—¿Y ese bebé? ¿Ahora eres niñera?

— No soy niñera de Marcos, ella es mi hija, se llama Elizabeth, él me mira muy serio y enojado.

—¿Cómo va a ser tu hija, si tenemos tres años de relación y nunca has estado embarazada? Solo viajé un mes... No soy médico, pero sé que es imposible tener un hijo en ese tiempo.

—No te estoy mintiendo, ella es mi hija, de hecho te puedo enseñar su certificado de nacimiento, siéntate para contarte cómo llegó a mí, le cuento todo y él queda sorprendido.

—Mierda, estoy muy molesto— entiendo que ella quiera ayudar a las personas–pero Kate, ¡yo no sé qué pensaste al hacer esto! ¡Pero conmigo no cuentes, yo no puedo creer que tengas una bastarda de la calle! Si tanto querías un hijo solo tenías que decirme y lo teníamos, para eso somos una pareja o simplemente te hubieras dejado de cuidar... Aún recuerdo que las pocas veces que te mencioné el tema, me decías que con tu trabajo no podías tener un bebé y ahora regresó de viaje y eres madre.

—¡Marcos, que sea la última vez que hablas así de mi hija, a ella la respetas! No es ninguna niña de la calle, es mía, ¡así te guste o no es mi hija!

— ¡Ella no es tu hija, Kate! Es una niña extraña, vamos a llevarla al orfanato del estado, eso es lo que debiste hacer, apenas su madre murió.

—¡Marcos, para ya! Ella es mi hija, Elizabeth tiene un mes de nacida, te guste o no es mía y no te estoy pidiendo ni tu opinión, ni tu permiso, ¡así que te puedes ir!

—¡La verdad es que te desconozco...! ¿Dónde está la mujer que no tenía tiempo para casarse y tener a sus propios hijos? Respóndeme algo ¿Kate la prefieres a ella?

—¡Si Marcos, la prefiero a ella! —Marcos me observa sorprendido, sé que lo herí con mis palabras, pero no puedo quedarme callada cuando él insulta a mi hija.

—¿echarás tres años de relación a la basura solo por un capricho tonto? ¡Vamos a mi casa ahora para embarazarte, si es eso lo que tanto quieres! Y luego llevamos a esa niña a un orfanato para que alguien más la adopte.

—¡no, Marcos! Eso nunca va a suceder, ella es mi hija, ya te lo dije y no irá a ningún lado, ¡esta es su casa y nosotros somos su familia!

Estoy dolido, decepcionado, creo que no encuentro los adjetivos necesarios para describir cómo me siento en estos momentos — ¡que te vaya bien con ella! Yo no pienso reconocer una bastarda y menos cuando mi carrera va en aumento. Como para tener un compromiso así, ¿has pensado en lo que pensaran las personas, sobre todo mis colegas? Todos creerán que yo no pude embarazarte y por eso me tocó hacerme cargo de una bastarda, mi reputación quedará por el suelo. Así como tu trabajo es importante, el mío también lo es , pronto seré un arquitecto muy reconocido, montaré mi propia empresa y no puedo con esto. Pero soy capaz de ceder si quieres un hijo nuestro, pero no cargaré con un hijo de otras personas, no sabes como fue concebida o si sus padres son personas sanas, adiós Kate, cuando te arrepientas y la lleves al orfanato búscame.

Me acerqué a él, le di una fuerte bofetada—¡lárgate de mi casa, no quiero verte más nunca! Ojalá que tu carrera te dé todo lo que yo te daba, pensé que había un poquito de empatía en ti, pero veo que me equivoqué—Abrí la puerta, lo saqué a empujones y le tiré la puerta en la cara y mis lágrimas salían sin permiso, mi mamá tomó a la beba y yo solo lloré ¡jamás, pensé que Marcos fuera así, tres años de relación y lo desconozco!

Maldita sea, yo venía feliz a verla y ella me sale con esto, ¿cómo se le ocurre hacer semejante cosa? ¡Una hija, eso no es cualquier cosa! Tanto que le pedí un hijo y siempre se negó con la excusa de su trabajo, solo bastó que me ausentara un poco más de un mes y ya tiene una hija hasta registrada. Pero conmigo que no cuente yo no pienso arruinar mi futuro, ahora solo me dedicaré a mi carrera, dejaré de perder el tiempo en tonterías, y pensar que me sentía un poco mal por una aventura que tuve durante el viaje. Quería pedirle matrimonio porque un socio me dijo que debía dejar esas cosas porque un empresario tiene éxito solo cuando está centrado en su mujer y el trabajo. Y yo de tonto dejé a esa mujer que estaba bien rica,que es una empresaria reconocida, por venir tras el supuesto amor de mi vida, pero sé que ella volverá arrepentida a buscarme.

Lloré hasta que me quedé dormida, de nuevo mi madre me dio muchos consejos y creo que tiene razón al decirme que lo mejor es lo que pasa. El ver a mi pequeño angelito dormir me llena de energía, sé que ella vale la pena y no importa si me toca estar sola el resto de mi vida, pues lo haré con gusto, seremos nosotras dos contra el mundo, mi Eli. Tomo mi teléfono y comienzo a borrar las fotos que teníamos juntos, es difícil dejar ir. Recuerdo que tengo algo de su ropa, así que busco una bolsa de basura y comienzo a echar todos los recuerdos mientras más pronto lo saque de mi vida, más pronto sanaré... Cuando recojo todo lo que me regaló bajo y lo hecho en la basura.