Llegamos a la casa de mi suegra y al bajar todos nos aplauden saludamos al resto de invitados que nos esperan e inicia la fiesta Mateo y yo abrimos la pista de baile con un vals. Luego se acerca a la familia, intercambiamos pareja, todos están felices y eso me encanta, luego Matteo baila con nuestra hija, es una imagen digna de admirar, son tan igual físicamente sonrío al verlos, él es un excelente padre, un excelente esposo.
—cuñada, ¡es hora de sacar los pasos prohibidos!
—Luigi, ¡ya me extrañabas que estabas tan tranquilo! Hasta pensé que te habían cambiado en la iglesia
—eso nunca, cuñada
— ¡sigues siendo el mismo mujeriego inalcanzable, ja, ja, ja!
—Por eso es por lo que la confianza da asco, cuñado, ya mira cómo me tratas
— ¿Cuándo dejaras de huirle de las chicas? Todas te observan igual a Federico, ustedes son el centro de atención, ¡todas están viendo cómo pueden atraparlos! Así que te aconsejaría que no tomaras mucho, no vaya a ser que amanezcas enredado en las sábanas de alguna de ellas.
—no cuñada, eso nunca, créeme que lo de Luisa me dejó una gran enseñanza, me mantendré alejado de todas estas mujeres, es más, creo que no tendré ni una novia italiana, nunca. Buscaré una persona de otra nacionalidad a ver si está menos loca que las mujeres de aquí,
—Luigi no hables así de las mujeres no todas son iguales, seguro hay una que otra chica que vale la pena en tu círculo social
— no lo quiero averiguar cuñada prefiero mantenerme soltero y a la orden algún día me casaré, aunque te confieso que no tengo apuro ¡podría vivir cómodamente soltero por el resto de mi vida disfrutando de los placeres que ofrece el mundo!
—ja, ja, ja, ya te veré cuando caigas, te recordaré las palabras que me has dicho hoy, ¡te apuesto que terminaras como dice el dicho, el cazador, cazado!
— bueno, qué te puedo decir, es que tú también eres culpable. Dejaste la vara muy alta, ¿cómo podría yo casarme con cualquier mujer? Después de tener una cuñada extraordinaria como tú imagínate, debería tener mínimo un premio Nobel a la paz para que te superara, Kate, es más, estoy pensando en reclamarle a tu madre porque debió haber tenido por lo menos tres hijas, una para cada uno de nosotros.
—ja, ja, ja, todas las personas no somos iguales. Así seamos hermanos, tú no eres igual a Matteo ni Federico
— Pero tenemos los mismos valores, esa es la cuestión, quizás variamos un poco en carácter o en físico, pero tenemos la misma base y creo que de ahí parte todo.
— en eso tienes razón, de hecho si tuviera una amiga que fuera tan buena como para ustedes ya se la hubiese presentado y ¿Qué te parecen las chicas, las hijas de los trabajadores?
—Son lindas y muy inteligentes, pero ninguna llama mi atención lo suficiente y no me atrevería a jugar con una chica como ellas. También son de las mujeres que si las tienes es para toda la vida, así que descartado, por ahora no hay ninguna que me mueva el tapete.
—Luigi, ¿serías tan amable de volverme a mi esposa?
— tranquilo hermano que traté de convencerla de que se quedara conmigo, pero no hubo caso, así que tómala es toda tuya
— ja, ja, ja, eso lo sé nunca podrías competir contra tu hermano mayor ¡si todo lo que sabes te lo enseñé yo!
— ¿Me estaba buscando, señor Expósito?
— ¡Sí, estaba buscando a mi hermosa esposa! Pero por lo visto ella la estaba pasando a lo grande, no paras de sonreír con Luigi
— Es imposible no hacerlo, se le ocurre cada cosa, pero bueno, ¿para qué soy buena?
—para muchas cosas, pero prefiero no decírtelo, prefiero mostrártelo, ahora vamos a picar el pastel y luego quiero que tires el ramo como te dije, no vamos a estar mucho rato en la fiesta, así que haremos todo de modo natural, pero más apresurado
— ja, ja, ja, ¡Qué manera tan sutil de decirme apúrate!
Debo decir que nuestros planes se frustraron, no pudimos irnos tan pronto como Matteo lo deseaba, pero estoy feliz por eso, porque podemos disfrutar nuestra fiesta al máximo. Debo decir que por un momento se descontroló, todas las personas bailaban, reían, la pasamos muy bien, los pies ya me dolían de tanto bailar a las dos de la mañana, por fin nos retiramos.
— vamos agotados, Matteo me llevó a un hotel que tenía reservado para pasar la noche, al llegar todo estaba decorado, hermoso, mi esposo me regaló un hermoso brazalete de oro con tres iniciales M. K. E.
— ¿te gusta, mi amor?
— ¡Me encanta cariño! Pero creo que le falta algo, ¡así que por ahora lo guardaré!— me parece extraña la actitud de mi esposa, ante el regalo, ella por lo general adora todo lo que yo le doy, así sea una simple rosa, pero bueno, a lo mejor está agotada, así que cerré la caja del brazalete y la coloqué en la mesita. Me enfoqué en lo realmente importante en descifrar cómo quitar ese vestido, creo que tenía como mil botones, así que dejé de pensar tonterías y me dediqué a hacerle el amor a mi esposa por toda la habitación, la tomé hasta por su rico trasero.
debo decir, que fue una noche espectacular, vimos el amanecer juntos desnudos desde el balcón de la habitación con unas copas de champán, ¡este es nuestro primer amanecer como marido y mujer delante de Dios y el mundo!---- No tienes idea de lo mucho que te amo, tú iluminas mi vida, solo puedo agradecerte, gracias a ti, tengo a mi hija, gracias a ti, soy el hombre más feliz de este planeta. —mis ojos se llenan de lágrimas.
— ¡Matteo, me hiciste llorar! Gracias, a ti, por tanto, nunca en la vida me había sentido tan amada, tú haces que cada día sea especial. Con tus detalles, con tus palabras, con tu cuidado, creo que Elizabeth y yo somos las mujeres más afortunadas del planeta, ¡por tenerte a ti solo para nosotras, espero que nunca cambies mi amor!

ČTEŠ
EL ITALIANO ( Matteo Esposito)
TeenfikceTrilogía hermanos esposito Libro 1 ( se está editando y añadiendo más capítulos) Un empresario Italiano que solo busca una noche más de pasión en chicago.... Una modelo que solo busca diversión de una noche lo que no se imagina es que le dejara cons...