EL ITALIANO ( Matteo Esposito)

Capitulo 24

Estoy buscando a Kate porque el abogado ya está aquí para hacer el papeleo, pero me dice que debemos hablar con ella porque legalmente yo sería el único padre de la niña, no entiendo nada y vamos a su consultorio, toco y entro.

Escucho que tocan la puerta del consultorio, doy el pase y entra Matteo con otro señor—¡buenas! ¿En qué puedo ayudarlos? Matteo.

— Kate, él es mi abogado, necesita hablar con nosotros, es un tema con respecto al apellido, el señor dice que yo sería el único padre de la niña, ¿no entiendo por qué, me puedes explicar?—cuando escucho a Matteo casi muero de la impresión

— disculpe abogado nos podría dejar solos un momento lo veo salir respiro profundo, te voy a contar una historia, Matteo, pero primero necesito que me jures, que no me vas a quitar a mi hija por nada del mundo que siempre voy a hacer su mamá y seguirá llevando mi apellido.

Las palabras de ella me sorprenden, ahora estoy más confundido que antes, pero decido hacer lo que ella desea.

— Te lo juro Kate, tú eres su madre, eso no lo va a cambiar nadie.

—Matteo hace un año y ocho meses aproximadamente, estaba de guardia y llegó una mujer que había tenido un accidente de tránsito y estaba embarazada, se llamaba Zara. Su estado era crítico, bueno el de ambas, la atendimos, le preguntamos por sus familiares y ella dijo que no tenía a nadie en el mundo, que era modelo, huérfana, en resumen ella no tenía posibilidades de sobrevivir. Su corazón no daba, así que le hicimos una cesárea de emergencia, yo atendí al bebe y logre estabilizarlo, pero ambos estaban en riesgo vital. Luego fui a donde ella estaba inconsciente junto con mi colega Robert como no tenía familia, yo tomé las mejores decisiones médicas para la niña. Igual tuvimos que llamar a servicios sociales, cuando ella reaccionó, le explique todo lo que había sucedido. Luego la señora de servicios sociales le explico el proceso que pasaría su hija al entrar el sistema y ella se negó rotundamente, ya que ella fue abandonada desde niña y creció en ese lugar.

>>Ella me dijo que su única voluntad era que yo tuviera a su hija, por el hecho de que gracias a mí ella estaba viva. Que de algún modo yo le di la vida, todos estábamos impactados ante semejante proposición, pero yo de verdad no podía negarme, ella estaba muriendo y yo no estoy a favor de como son los niños asignados en el sistema en casas temporales y esas cosas el bebe necesitaba atenciones que yo le podía dar así que lo hicimos.Llamamos al abogado del hospital junto con el director, le explicaron que me estaba cediendo a su hija y eso no lo podía revertir, pero ella estaba muy decidida, dijo que esa era su última voluntad. Hicieron el papeleo, firmamos, luego ella me dio la dirección de su casa y sus datos bancarios para que tomara las cosas que tenía para Eli y así me ayudara los primeros días, eso fue muy fuerte porque me demostró cuanto la amaba después entró en paro te juro que hicimos todo para salvarla pero ella murió—-lágrimas bajaban por mi rostro— es muy fuerte contar esta historia, Zara marcó mi vida, gracias a ella soy madre, luego me dedique a cuidar de mi hija hasta el día de hoy, ¡esa es la historia de nuestra hija, por eso tú no me recordabas y yo no tenía seguridad sobre tu paternidad!

Él estaba en shock, por eso tenía tanto miedo de que tú fueras su padre, ya que si aparecía el padre podía pelearla. Yo tengo la voluntad de su madre biológica, pero el que su padre la reclame deja sin efecto su voluntad, por eso no estaba segura de nada, yo nunca estuve embarazada, no soy realmente su madre.

Escuchó la historia de Kate y me quedo sin palabras, mi hija era una huérfana, que nunca hubiese conocido si ella no la hubiera acogido como a su hija. Mierda ella pudo morir junto a su madre y Kate dejó todo por criar a una niña desconocida, no le importó perder hasta a su novio de años o su trabajo, esto es muy fuerte para asimilar, pero de lo que estoy seguro es que esta mujer se merece todo y de eso me voy a encargar yo.

Ella hace el intento por levantarse y le tomó las manos

— Kate no sé por dónde empezar, pero te debo la vida entera, lo que has hecho es el acto de amor más grande que puede existir en el mundo. Estoy apenado por como te trate, yo sabía que nunca había estado contigo, yo jamás hubiera dejado escapar una mujer como tú de Zara, si la recuerdo tuvimos una aventura de una noche cuando vine por negocios, yo estaba soltero, una chica con cuerpo de modelo es lo que recuerdo. Pero tú perdiste tu relación por cuidar de mi hija, escúchame bien, nunca nadie te va a quitar a tu hija porque tú no la llevaste en el vientre, pero realmente le diste la vida. Sin tus cuidados ella no estaría aquí y yo nunca la hubiese conocido, eres su madre ahora más que nunca debes entender que debo velar por ustedes, son mi familia y sería un honor muy grande tener como esposa a la mujer con el corazón más grande del mundo. Sé que no somos pareja, pero podemos ir de a poco, lo importante es casarnos para que no te quiten la custodia compartida que quiero para nuestra hija, porque tú mereces poder tener la potestad de salir y entrar con ella al igual que yo.

Escucho a Matteo y lo abrazo fuerte y lloro, pero de felicidad no sabía que él era una persona tan extraordinaria, me disculpo por pensar que me la quitarías

— yo sé que soy genial Kate, pero no debes llorar por eso,

— guao, ¡qué ego! Ambos, reímos —vamos con el abogado, a ver como seguimos este proceso.