🩸⛓️𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 71⛓️🩸

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•La persigue novios•

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JACOB BROWN

Al despertar encontré a mi lado a la chica más hermosa que he podido llegar a ver en este mundo, el edredón tapaba de la parte inferior de su espalda hasta abajo, dejándome ver su hermosa espalda, durmiendo bocabajo y con el pelo tapándole la cara, se lo aparté un poco poniéndolo detrás de la oreja y sonreí como un tonto mirándola durmiendo.

-¡Mmmmmm! -se estiró quejándose.

-Lo siento. -susurré para luego levantarme.

-¿Donde vas? -levantó su cabeza de la almohada y sus imperfectas ondas cayeron sobre sus hombros, los ojos semi cerrados y me preguntó con voz mañanera ronca, y se ve tan perfecta. Volví a tumbarme y la regresé a la almohada.

-Iré a correr un rato, tú descansa princesa. -ella empezó a balbucear algo que soy incapaz de entender. -Abejita no te entiendo. -reí.

-¿¡Que, que hora es!? -elevó su voz.

-Las siete, tu duerme. -le di un beso en la coronilla para luego levantar de la cama e ir a cambiar, me puse unos pantalones cortos negros que me llegan por las rodillas y una camiseta tirantes blanca que por los laterales me llega por las costillas.

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Al salir, comencé a hacer ejercicios de estiramiento y calentamiento de musculatura antes de empezar a trotar, comencé a mover mi cuerpo alejándome de la casa hasta llegar a la avenida del parque central más cercana mientras corría no dejaba de pensar el día de ayer, de lo loco que fue, no dejaba de ver, como Alison le gritaba a Manuela, se va, ella se va, no se cuando se va, pero lo hará, no le conviene quedarse, se que Alison no es capaz de contárselo a mi madre, sin que yo quiera pero Manuela no conoce a Alison, piensa que es capaz de hacerlo, así que no le "conviene" quedarse.

El sol cada vez se hacía más visible, me detuve un momento para recuperar aliento agitado, me pasé la pequeña toalla blanca que tenía en el hombro por la frente decidido para empezar a correr nuevamente me interrumpe un chica bajita, rubia, llevaba unos pantalones cortos deportivos negros y top rosa.

-Siento interrumpir que estes ejercitando tu... -me mira de arriba a abajo. -Cuerpo... -se queda callada mirándome.

-¿Si? -la saqué de su trance.

-¡Ah perdón! Y no se, si no es mucha molestia, me podrías dar tu número o Instagram y podríamos quedar a tomar algo por ahí. -dijo entre cortada por los nervios y mordiendo su labio inferior nerviosa y yo levanté mis cejas.

-¡No! -dije rotundamente, empecé a correr pero está a mi lado, le hizo un gesto a sus amigas despidiéndose. ¿A caso le pedí compañía?

-Pero ¿Porque no? ¿Eres gay? -reí sarcástico por su expresión exagerada.

-No, pero tengo novia que es distinto. -ella abrió la boca sorprendida mientras seguía trotando a mi lado.

-¿Y cuanto tiempo lleváis? -me detuve en seco.

-No necesito tu compañía, si me permites. -cambié mi ruta, si esto llegase a ser al revés yo ya estaría preso, en fin que hipócrita es la igualdad.

-¿Años? -me sobresalté, pensé que tomó otro camino.

-Seis meses y medio. -dije sin mirarla.

-Eso es poco, no te agradaría conocer a más personas y no se, luego tomar decisiones. -la camiseta ya comenzaba a pegarse a mi cuerpo y esta no dejaba de mirarme, sinceramente no me incomoda yo siempre fui de esas personas con el ego muy alto, me fascina gustar y no es ninguna novedad.

🩸Sanando Cicatrices🩸Where stories live. Discover now