🩸Sanando Cicatrices🩸

🩸⛓️𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 77⛓️🩸

•PROVECHO•

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JACOB BROWN

Veía a Alison reír y mover sus manos en el viento en un movimiento de zigzag o haciendo ondas, ella estaba con mi camiseta en el sofá, con la cabeza apoyada en mi regazo, yo tenía mi mano en un pecho de ella metido en la camiseta mientras veía la tele y reía por sus reacciones por el efecto bajo sustancia de la droga.

-¡Uvvvvvvvvv! -comenzó a despegar su mano como si fuese un avión. -¡BUUUUGGHHH! -Lo estrelló contra mi brazo y comenzó a reír y yo la acompañé, me gusta verla reír, pero sin estar drogada. Pero quise, quise decirle un NO pero no pude, me lo suplicaba y no fui capaz de decirle un NO como respuesta, ¿Me siento culpable? Si, la verdad es que si, pero anhelaba verla reír así, anhelaba que sus risas hicieran eco en mi cabeza y no lo hice por mi si no por ella, me lo suplicaba tanto y yo no podía negárselo.

-Si tu brazo fuese un iceberg hubieses echo al Titanic carne picada. -los dos reímos.

-¿Tu crees? ¿Pero eso no era un avión? ¿Como se va a estrellar con un iceberg? -le dije desviando mi mirada desde la tele hasta sus ojos color miel, que ya no eran miel, de color miel solo tenía un aro alrededor de las pupilas dilatadas.

-Pero tú has visto estos tremendos brazos—me masajea el bíceps de mi brazo apretándolo. -Y obviamente hay iceberg en el cielo. -solté una carcajada y ella me acompañó.

-No hay iceberg en el cielo Ali. -y ella me fulminó con la mirada.

-Si

-No

-Si

-No. -insistí a su terquedad.

-¿Y esas cosas blancas que flotan? ¿Qué? -dijo con su voz relajada por efecto de la droga y reí.

-Esas cosas se llaman nubes. -ella puso los ojos en blanco.

-No. -negó.

-Si

-No

-Si. -le aparté el pelo de su rostro y ella seguía masajeando mi brazo, y lo miró con admiración y apretó un poco.

-Me encantan... -dice mirándome a los ojos y luego voltea quedando boca arriba nuevamente.

-¿El que? -cuestioné, ella se coloca otra vez de lado y levantando su mirada para verme.

-Tus brazos. -comienza a acariciar mi bíceps con la yema de sus dedos cálidos mirándome a los ojos. -Grandes y ocupados por tatuajes. -aclara su garganta, se levanta y se siente encima de mi, poniendo un pie en cada lado y lo único que separa nuestras partes íntimas son nuestras ropa interior, bajé mi mirada hasta estas, y su coño estaba literalmente encima de mi polla.

-Pues me a dicho un pajarito, que de pequeña llorabas cuando veías a alguien tatuado. -ella frunció el ceño mirando a su alrededor por las esquinas del techo. -¿Qué haces? -reí levemente.

-¿Dónde está ese pajarraco? Que lo reviento. -pegué un puñetazo a su otra mano en forma violenta y con el ceño fruncido por el enfado y yo solté una carcajada, ella comenzó a brincar. -¿Dónde está? ¿Dónde está? ¿Dónde está?

Está chica ¿Cómo puede provocarme tanto? ¿Y excitarme en cuestión de segundos? Hace que parezca un adolescente de quince años, de esos que no duran ni un minuto y se corren viendo un puto vídeo de porno, pues eso...eso es lo que provoca en mi esta chica.

Pone cada mano en mi brazo y las comienza a mover de arriba hacia abajo haciendo que me de un escalofrío, comienza a cabalgar lento encima de mi, la miré a los ojos, soltó un jadeo y sus labios temblaban, los tenía rojizos y algo secos así que los estampé con los mis labios, en un beso profundo y lleno de deseo, creo que los dos ya estábamos lo suficientemente mojados, se separó de mis labios y deseaba que no lo hiciera, bajó su mirada a nuestras parte mientras se movía y yo hice lo mismos.