CAPITULO DIESIOCHO

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T~

No sé de dónde demonios a Lena se le ocurrió venir para acá a plena madrugada.

Cuando le pedí una explicación ella no dijo nada solo me beso.

Se sintió tanto deseo ahí que me encendió.

"Quiero hacerte mía"

Esas palabras resuenan en mi cabeza.

Joder.

Nunca pensé que escucharía eso de Lena.

Eso fue la gota que derramó el vaso.

Ahora nada va a detenerme.

Voy a calmar todo mi deseo hacia esta azabache que me vuelve loca desde hace tiempo.

Ella me recuesta contra una pared y deja de besar mis labios para besar mi cuello.

Disfruto de la sensación mientras veo el balcón y noto como la luz de la luna se filtra por las puertas las cuales están abiertas.

Ella deja de besar mi cuello y vuelve a los labios mientras con ambas manos acaricia mis piernas desnudas por qué tengo puesto un short.

Ella me baja por un momento lo que me da chance para quitarle su camiseta dejando ver unos senos perfectos y de un tamaño más grande que los míos, cubiertos por un brasier de encaje de color negro.

Acarició con suma delicadeza su espalda casi desnuda lo que hace que ella sonría con ternura.

Su piel es tan suave y delicada.

Reparto pequeños besos desde su hombro hasta su cuello mientras ella lo disfruta.

Ella me levanta de nuevo y por inercia enrollo mis piernas en su cintura y ella se dirige a la cama donde se sienta dejándome a horcajadas sobre ella y me quita la ajustada camisa que tenía dejado al aire libre mis senos con los cuales juguetea con mucha experiencia, de una manera que hiciera que inclinarse la cabeza hacia atrás y soltar pequeños jadeos.

Cuando acabó me tomo de la cintura levantándome como si fuera una pluma y me sentó en la cama y yo por inercia desabroché el sierre de su pantalón tirándole al suelo y ella hace un movimiento quitandolo por completo dejando ver una anatomía llena de curvas reflejadas por la luz de la luna.

Esa mujer definitivamente es una diosa.

Ella se me acerca con lujuria y me besa mientras de forma ágil desabrochó su brasier dejando al aire dos creaciones perfectas las cuales tomo con ambas manos haciendo que ella se muerda el labio.

Ella me mira con lujuria, lo que hace que me sienta más tentada a vivir muchas más sensaciones.

Cuando mis manos dejaron esas creaciones perfectas la tomo de la nuca inclinando la hacia mi dónde le di un beso cargado de deseo.

Ella se separa y me mira a los ojos, se le notaba ternura.

Ella baja sus manos hacia el inicio de mi short y empieza a bajarlo con una lentitud extrema lo que hace que me desespere.

Cuando porfin se deshizo de el me subió por completo en la cama y se coloco sobre mi sin apoyar su peso pero si haciendo que nuestros cuerpos choquen uno con el otro.





Me encuentro de espaldas a la azabache mientras ella me abraza por la cintura.

Nuestras respiraciones estás agitadas y nuestros corazones latiendo a mil.

Eso fue increíble.

Nunca imaginé que mi primera vez sería así.

Lena sabía bien lo que hacía y a pesar de que yo sea una inexperta nos encargamos fue de amarnos y sentirnos.

Ella se recostó boca arriba dejando su pecho descubierto.

Enserio no puedo creer que debajo de esta ropa holgada oculte este cuerpo de modelo.

Ella tenía los ojos cerrados y su flequillo estaba más retirado lo que hace que el rostro se le vea más.

- Disfrutando la vista- Dice de forma pícara y con los ojos cerrados.

- Eso fue increíble- Digo feliz mientras que ella emboza una sonrisa.

- Definitivamente- Dice y muere la conversación.

Quito por completo el flequillo de su rostro y lo detallo.

Es hermosa.

No tiene ninguna cicatriz.

Su rostro es hermoso.

Quisiera saber la razón del porque se tapa la mitad del rostro.

Recorro cada parte de su rostro con la yema de mis dedos y ella se deja.

Le doy un beso en la frente y ella sonríe dejando ver un hoyuelo.

- Te amo- Dice en un murmuró tan sexi que se me erizó toda la piel.

- Yo también te amo- Digo y la beso apasionadamente en los labios.

Me acuesto sobre su pecho y me sumo en un profundo sueño.





Me despierto por el sonido de mi alarma.

No recordaba que hoy tengo clases.

Automáticamente me vienen recuerdos de lo que pasó en la madrugada y comienzo a revisar las sábanas.

Lena se fue.

¿Pero en qué momento?

De todos modos hoy la veré.

Me levanto directo a la ducha para quitarme todo el sudor que tuve anoche.

Al salir me coloco mi uniforme, me aplico maquillaje y empaco los cuadernos que utilizaré hoy.

Al bajar las escaleras voy directo al comedor donde mi madre y mi padre me esperan para desayunar.

Ya entrando por las puertas del instituto empiezo a sentir mariposas en el estómago.

Estoy nerviosa de ver a Lena, después de lo que pasó ayer no sé cómo será su actitud o la mía.

Veo a lo lejos a mis "amigas" así que decido acercarme.

Las saludo a todas con un beso y me quedo ahí.

-¿Por qué no quisiste salir con nosotras esta semana?- Pregunta Azul, digamos que ella es la "alfa".

- No quise salir- Miento.

La verdad es algo muy vergonzoso decir que me castigaron con dieciocho años, asi que prefiero mentirles.

Estuve un rato con ellas hasta que llego Lena, con su uniforme holgado como siempre, su larga cabellera moviéndose con el viento y con su expresión fría de siempre.

Ella llega hasta el grupo de chicos y los saluda a todos con un beso.

- Vamos para allá- Ordena Azul.

Yo voy con ellas porque Lena está ahí, porque de lo contrario estuviera caminando por los pasillos llevándome halagos de todo el mundo como siempre.

Al llegar las chicas saludan a su chico y yo me acerco a Lena la cual está hablando con Chris.

Ella me ve y emboza una pequeña sonrisa y me saluda con un beso.

Me vienen los recuerdos de lo que pasó anoche y las mariposas empiezan a volverse locas en mi estómago.

Saludo a Chris el cual me saluda con cariño.

Segundos después suena el timbre indicando que hay que entrar a las aulas y como todos somos de la misma aula nos fuimos juntos.

Estilos Diferentes ©Where stories live. Discover now