Capítulo 14

12.7K 577 160
                                    


Lauren y Camila habían pasado el resto del concierto pegadas la una a la otra. Lauren había dejado de bailar para abrazar a Camila por la cintura desde atrás y depositar tiernos besos en su mejilla de vez en cuando. También, a veces, Camila giraba su cuerpo para agarrar la cara de Lauren con sus dos manos y dejar un dulce beso en sus labios, y hacer morisquetas pellizcando sus mofletes. Lauren sentía una especie de escalofrío cuando la chica más baja hacía esto, un escalofrío que le hacía sonreír y desearla aún más.

Cuando salieron del auditorio, seguidas y siguiendo a la multitud, entraron al coche de Lauren, donde estuvieron solas y tranquilas por primera vez, y aquello ponía un poco nerviosa a Lauren.

-¿Qué va a pasar ahora? -preguntó Camila.

Lauren, que estaba arrancando el motor del coche, devolvió la llave a su posición original.

-¿Qué quieres que pase? -preguntó Lauren.

-No sé -contestó Camila, ruborizándose ligeramente.

Lauren se acercó a la pequeña y comenzó a dejar besos en sus mejillas, mientras sentía la mano de Camila posarse en su espalda.

-¿Por qué no te pones el cinturón? -preguntó Lauren separándose un poco.

-No lo hagas -pidió Camila, dejando un poco desconcertada a la chica de ojos verdes.

-¿Que no haga qué, Camz? -volvió a preguntar Lauren.

-No te separes de mí -musitó Camila.

Lauren dejó un beso en sus labios antes de volver a hablar. Se sentía tan extremadamente bien al estar ahí quieta.

-Ponte el cinturón, Camz -pidió Lauren de nuevo, con una sonrisa pequeña en el rostro.

Al principio, Camila se sintió un poco triste. Quizás pensara que Lauren no quería seguir aquella conversación, no quería besarla más o, simplemente, tenía ganas de irse a casa; algo que ella ni si quiera tanteaba. Pero cambió de opinión cuando Lauren condujo más allá del área de sus casas y estuvo conduciendo durante, al menos, veinte minutos más.

-¿A dónde me llevas? -preguntó Camila con un tono divertido.

-Voy a secuestrarte, violarte y descuartizarte -bromeó Lauren sin dejar de mirar la carretera.

-Eh, no hagas trampas.

-Cada uno juega sus cartas -dijo Lauren guiñando un ojo rápidamente a Camila. -¿No era algo así?

Camila cruzó sus brazos haciendo un puchero con sus labios. Lauren dirigió un par de miradas rápidas a Camila.

-Eh, vamos, no seas así -pidió Lauren con una sonrisa. -Eso es jugar sucio.

-Tú estabas usando mis técnicas, tienes más maldad que yo -dijo Camila, sin cambiar su tono de voz, el cual haría que cualquier asesino le comprara un caramelo.

-No lo creo -dijo Lauren riéndose.

Condujeron unos kilómetros más y, a unos escasos minutos, Lauren estacionó en un lugar en el que ambas habían estado previamente.

-¿Me has traído a casa de Cara? -preguntó Camila, completamente confundida, mirando por la ventanilla.

-No, Camz -rió Lauren, señalando con su dedo al frente.

A Camila se le iluminaron los ojos al ver a dónde Lauren le había llevado. Sus comisuras se elevaron hasta permitir a la chica de ojos verdes ver sus dientes.
Camila se desabrochó el cinturón y salió del automóvil. Lauren la imitó, después de haber metido las llaves en el bolsillo trasero.
El morro de su 4x4 presenció un tierno beso que hizo que la chica más pequeña tuviera que ponerse de puntillas para alcanzar.

El destino de la casualidad (Camren)Where stories live. Discover now