[40] Cayendo III

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Cuando Jungkook dijo filmar Taehyung razonablemente pensó que sería a través de un celular, no de una cámara, y ciertamente no pensó que se incluiría un trípode.

Ahora estaba de pie junto a la cama, frente a Jungkook, cuyo enfoque estaba completamente en el dispositivo en sus manos, un poco más grande que su palma, pero lo suficiente liviano como para poder sostenerlo con facilidad.

No lo discutieron de antemano, rara vez lo hacían cuando se trataba de sus juegos, por lo que aún no estaba seguro de cómo se llevaría a cabo todo. Jungkook estaba celoso, no tenía dudas al respecto, pero la verdadera pregunta era si lo dejaría ver o no.

Había una variedad de técnicas que podía usar para hacer que Kim se tragara sus palabras y, conociéndolo, probablemente ya tenía muchas en mente.

Contento con su trabajo, Jungkook finalmente giró la cámara, apuntando a Taehyung. No la sostuvo tan cerca como se suponía debía hacerlo, dejando el espacio suficiente para ver el rostro de Jungkook incluso con la cámara entre ellos, en sus manos.

Los ojos del pelinegro eran uno de los factores - el más decisivo - en la sumisión de Taehyung.

"Hoy vamos a mostrarte cómo se le enseña a Taehyung una lección."

Al darse cuenta de que la cámara ya estaba grabando se le revolvió el estómago. Estaba siendo filmado por Jungkook y observado, supuestamente, por Bogum. Cada palabra, cada cambio de expresión, iba a ser monitoreado, guardado, dando la posibilidad de infinitos retrocesos.

El mayor acto de intimidad que alguna vez conocería estaba a punto de hacerse público.

"Si realmente planeas salir con él, vas a necesitar saber cómo hacerlo." Jungkook siguió hablando como si Bogum realmente estuviera escuchando, mientras pellizcaba la mejilla de Taehyung "Es una pequeña puta molesta, ¿no es así, cariño?"

Era demasiado pronto para que Taehyung comenzara a temblar, pero ¿cómo podía resistirse cuando Jungkook se dirigía a él como cariño y puta, en la misma frase? Para empeorar las cosas, no podía dejar de pensar en lo sorprendido que estaría Bogum al ver por primera vez la forma en la que lo trataba Jungkook.

Fue estimulante. Le hizo querer comportarse de la peor manera solo para que Jeon le demostrara lo duro que podía ser.

"Tal vez solo soy demasiado para que algunos puedan manejarlo."

La ceja de Jungkook se arqueó y su lengua lamió los dientes. Cuando sonrió, lo hizo de manera torcida.

Aceptó el desafío.

"Vaya, de verdad estás de humor hoy."

Jungkook lo tomó del cabello con su mano libre, girándola alrededor de los mechones rubios para tirar más fuerte. Con su muñeca presionó la cabeza de Taehyung hacía abajo lo suficiente duro para ponerlo de rodillas.

Le gustaba estar así, sabía que todo era parte del espectáculo. Jungkook nunca perdía la oportunidad de decirle lo atraído que se sentía, lo imponente que esa posición lo hacía sentir.

"Eres tan bonito. Lástima que uses tu boca para los propósitos equivocados."

No solo el excitar a Jungkook también lo excitaba a él, además sentía una extraña satisfacción por el estiramiento de la mezclilla de sus jeans sobre sus rodillas, el ardor que aumentaba cuanto más tiempo pasaba arrodillado y la alineación de su rostro con la entrepierna del chico.

Estaba un poco débil, un poco incapaz. Su boca ya no servía para hablar, su opinión ya no importaba. A Jungkook ya no le importaba escuchar su voz, sólo quería su lengua, un par de labios los cuales podría conseguir de otra persona pero sabía no buscaría

I want (to punch) you so bad ☆ KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora