Cuando me secuestraron por primera vez y apenas volví con vida, mi padre dijo
---𝑫𝒆𝒃𝒐 𝒆𝒏𝒔𝒆𝒏̃𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒄𝒐𝒎𝒐 𝒔𝒐𝒃𝒓𝒆𝒗𝒊𝒗𝒊𝒓 𝒑𝒐𝒓 𝒕𝒖 𝒄𝒖𝒆𝒏𝒕𝒂
Escuche a alguien decir que a ver regresado era un error, pero este era el único lug...
Había pasado nueve días desde el ataque, no nevo en mucho tiempo y el clima soleado que se prolongo era muy agradable, muchas personas decían que era una buena señal después de todos los problemas que tuvieron.
La rutina se repetía una y otra vez parar Hyun-ki pero no le importaba en lo absoluto y hasta llego a disfrutarla mucho. Cada mañana tenia que levantarse muy temprano para ayudar a reconstruir todo lo que se destrozó en el ataque y terminar de afinar algunos detalles con Nikolai para su juicio. Había pocas posibilidades de ganar, pero ella era tan orgullosa que se negaba a dar el brazo a torcer y mas ante ese miserable viejo, pero tenía un problema muy grave que aún no lograba resolver.
La clave para poner a Zhdanov en manos de la justicia era comprobar su corrupción y demostrar que la fábrica fue arrebatada injustamente, pero era difícil encontrar pruebas válidas y no había nadie que testificara a favor del pobre hombre y eso la tenia muy tensa, mas aun con el juicio a la vuelta de la esquina.
—«Bastaría con un solo trozo de papel donde se demuestra la falsificación para acabar con todo esto»—pensó Hyun-ki mientras se masajeaba el hombro con fuerza debido al estrés—
En estos momentos un pequeño trago de licor seria muy bueno para pasar el mal rato y despejar su mente, pero el estruendo de la pobre puerta la hizo sobresaltarse un poco.
—¿Quién viene tan tarde? —murmuro Hyun-ki extrañada—
Salió de la cocina para ir a la entrada de la cafetería y se quedo de piedra al ver de quien se trataba.
—«¡Pero...! ¿¡Que hace Caesar aquí!?»
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Quitando el detalle gracioso de que este hombre tenia que agacharse un poco para pasar por la puerta en la pobre mujer no cabía el desconcierto en estos momentos ¿Qué hacia un hombre como el en este lugar?
—Mucho tiempo sin verte, abogada —saludo Caesar brevemente al momento en que sus ojos se conectaron antes de desviar la mirada y comenzar a observar el lugar—
—¿Qué hace aquí? —le pregunto cruzándose de brazos—
—No seas tan cautelosa, vine a darte algo y apuesto a que lo quieres —aseguro el hombre acercándose poco a poco a ella—Pronto tienes el juicio con Zhdanvo ¿no? Va ser difícil, él tiene conexiones con funcionarios importantes
—...¿Y? Eso no es nada nuevo —dijo Hyun-ki arqueando la ceja y mirando al hombre con indiferencia—Vaya al punto ¿Quiere? No tengo tiempo
Los ojos plateados de Caesar se movieron suavemente, como con una sensación de alegría antes de revelar un sobre marrón que tenia entre su abrigo y mostrárselo.
—Evidencia ¿No la necesitas?
Como un cazador que puso un cebo a una presa, Caesar capturo la total atención de Hyun-ki en tiempo récord ya que cambio la postura defensiva y hostil a una más permisiva y dócil.
