Capitulo 18 | ¿Confianza?

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La mente de Hyun-ki despertó de golpe al ver en qué situación se encontraba en ese preciso momento ¿¡Como termino siendo cargada por este sujeto mientras estaba envuelta como si fuera un burrito!?

—¿¡Como...cuando...por qué!? —grito la joven intentando moverse, pero era imposible ya que Caesar la tenía bien sujetada—¡Bájame...!

—Esta bien...duerme un poco más —dijo Caesar mientras le daba un pequeño beso al costado de la cabeza haciendo que el rostro de Hyun-ki se tiñera más de rojo—

—¡Tu...argh! —exclamo Hyun-ki al sentirse débil y mareada por lo que se recostó de nuevo contra Caesar—¿A dónde...me llevas?

—A mi habitación —le respondió Caesar mientras continuaba su camino—

—...Mi cuerpo...se siente raro...—murmuro Hyun-ki mientras cerraba los ojos—

—Sera mejor que descanses por unos días

Hyun-ki no podía dejar en pensar en lo sucedido, lo ultimo que recordaba era esa extraña taza de té que había bebido con el mayordomo ¿Le había dado veneno? ¿Cómo pudo ser tan ingenua de confiar en él? Ahora mismo sentía una autentica estúpida.

El mayordomo...el...—dijo Hyun-ki haciendo un esfuerzo por abrir los ojos—

—Si, ya lo se todo —aseguro Caesar con una sonrisa —No te preocupes y duerme un poco más, yo ya me encargué de todo incluyendo tus documentos

Esas palabras golpearon a la joven como un bloque en granito en la cabeza y más al ver la sonrisa en el hombre que le dio una incómoda sensación.

Tu... ¿lo sabias?

Caesar no respondió, solo sonrió brevemente haciendo que Hyun-ki obtuviera su respuesta. Todo lo que había pasado era parte de un plan en la que ella sirvió no mas que una simple carnada, como un cebo que simplemente era usada para sacar a las ratas de su escondite y así poder cazarlas...

Hahahaha...haha...ya veo —dijo Hyun-ki con una sonrisa leve en el rostro haciendo que Caesar la mirara—Soy la persona más estúpida del planeta... ¿Cómo se me ocurrió pensar que podía confiar...?

—¿Qu-!?

PLAF

El sonido de la mano de Hyun-ki contra el rostro de Caesar resonó en todo el pasillo dejando atónito al Zar ya que no vio venir ese golpe por parte de la mujer y fue cuando miro su rostro, no le estaba mirando a los ojos pero mantenía una sonrisa sarcástica en su rostro mientras que por su mejilla cruzaba una lagrima.

—Tu...¿Por que? —le pregunto Caesar—

—¡Cállate! —le grito Hyun-ki con toda la potencia que le permitía su cuerpo—...Me usaste como mejor te lo parecido... ¿Cuánto falta para que deje de ser útil para ti?

—Escúchame, era la mejor opción en esta situación —intento explicarse pero fue cortado por una sonrisa cínica —

Claro...como la vida de una persona no vale más que un simple peón en un tablero de ajedrez para ti es lógico que pienses así...¿Qué se podía esperar de un hombre que le apunta un arma a un niño a sangre fría?

El rostro de Caesar se endureció e intento que ella lo volteara a mirar, pero Hyun-ki se negaba a mirarlo a los ojos. El sentimiento de decepción en su pecho era fuerte ¿En qué estaba pensando? Por momentos se preocupo por el y eso la hizo enojarse mas consigo misma por ser tan estúpida y esperar lo mejor de las personas, tal y como lo hace su padre.

Refugio | En EmisiónWhere stories live. Discover now