Cuando me secuestraron por primera vez y apenas volví con vida, mi padre dijo
---𝑫𝒆𝒃𝒐 𝒆𝒏𝒔𝒆𝒏̃𝒂𝒓𝒕𝒆 𝒄𝒐𝒎𝒐 𝒔𝒐𝒃𝒓𝒆𝒗𝒊𝒗𝒊𝒓 𝒑𝒐𝒓 𝒕𝒖 𝒄𝒖𝒆𝒏𝒕𝒂
Escuche a alguien decir que a ver regresado era un error, pero este era el único lug...
La mañana llego y Hyun-ki sentía como el sueño poco a poco la estaba venciendo mientras intentaba probar un bocado de su desayuno, pero le era casi imposible sin bostezar.
—«Sin duda estoy mal acostumbrada a dormir en una cama suave por culpa de Caesar, la espalda me esta matando»—pensó Hyun-ki mientras se restregaba el ojo por el sueño antes de volver a cabecear—...Que sueño~...
De pronto escucho un chasquido al lado de su oído haciendo que se despertara de golpe nuevamente para voltear la mirada a su costado y ver a Caesar sentado a su lado mirándola con un gesto divertido.
—Oye, o duermes o comer, pero solo haz una de las dos cosas —dijo Caesar con una sonrisa y rostro tan frescos que no asegurarías que se quedo despierto toda la noche—
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*Que ganas de verse así cuando uno no duerme en toda la noche, yo parezco un mapache XD*
— Puedo hacer ambas —aseguró Hyun-ki aunque su rostro no era para nada convincente—«¿Por qué se ve tan bien? No parece mínimamente cansado, que envidia» —pensó Hyun-ki tomando el mango de su taza de café—
Sin darse cuenta de su torpeza al intentar levantar la taza de café termino empujando una pequeña botella de jarabe haciendo que el liquido viscoso cayera sobre la mesa haciendo que se derramara en el pantalón de la persona a su otro costado.
—¡Ah, lo siento mucho! —exclamo Hyun-ki apresuradamente mientras tomaba un pequeño trapo para ayudar a limpiar el desastre—¡No me di cuenta...!
—No se preocupe —dijo el hombre haciendo que la muchacha alzara la vista—
Era el mismo hombre que se estaba registrando ayer.
—Oh, a usted yo lo vi ayer —dijo Hyun-ki ya un poco mas despierta—Lo siento, no recuerdo su nombre
—Me llamo Leonid —dijo el hombre con una sonrisa comprensible, pero con el rostro lleno de cansancio mientras recibía el trapo—
—Perdóneme otra vez, no fue mi intensión —se volvió a disculpar Hyun-ki apenada—
—Tonterías, fue solo un accidente —dijo Leonid agitando la mano para restarle importancia mientras se limpiaba—¿Cuál es su nombre Señorita?
Mientras que Hyun-ki se presentaba con el hombre con la mejor sonrisa que pudo ofrecer debido al cansancio no noto la mirada de Caesar detrás de ella, cualquier ciego notaria que no estaba para nada contento con lo que estaba pasando delante de sus narices.
—Parece que tu tampoco dormiste bien ¿A qué no? —le dijo Leonid tomando su mano en forma de saludo—
—Pues...no hay forma en que pueda negarle algo así —dijo Hyun-ki con una sonrisa cansada—Aunque por suerte usted se ve mejor que yo