Refugio | En Emisión

Capitulo 8 | Oferta Tentadora

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—¿¡En serio el hizo todo eso!?

La voz incrédula de Lee hizo que Hyun-ki casi se atragantara con la hamburguesa que se estaba comiendo debido a que se quedo con hambre por culpa de ese restaurante tan costoso al que la llevo al mafioso. Tenia los papeles del sobre aun lado mientras le contaba todo a su amigo y revisaba los documentos.

—Si, como te estoy diciendo —exclamo Hyun-ki limpiándose un poco de la salsa que sobro de sus dedos con una toalla de papel—Ni siquiera le preste atención la mayor parte del tiempo, era mejor ponerme a contar ovejas o a pensar en la grandeza de las piñas, esa fue de lejos la peor "cita" que he tenido en la vida ¡Fue casi tortura!

—Tu habilidad para distraerte en ese tipo de situaciones me asombra siempre pero sin duda le sacas provecho —aseguro Lee desde el otro lado de la línea—Oye, pero al menos lo que te dio ¿Si te servirá de algo?

—Mmh...debo reconocer que sí, no bastara para ganar de un solo golpe pero si ayudara a poner un poco la balanza a mi favor —dijo Hyun-ki leyendo atentamente los papeles—

—Entonces no te distraigo más, me cuentas mañana como te fue

—Si, mándale saludos a mi padre y no te emborraches esta noche ¿bien? —dijo Hyun-ki tomando su teléfono entre sus manos para cortar la llamada—

—Si si, buenas noches

La llamada se corto de inmediato, contarse las desgracias de sus vidas era un muy buen pasatiempo que los dos habían adquirido para poder desahogarse porque la vida de los dos era tan bizarra que muchas veces no daba risa. Hyun-ki se despejo de esos pensamientos y siguió leyendo atentamente los papeles.

Aún tenía un largo camino que recorrer, todo este papelero era de hace 10 años y se dejaba ver que Zhdanov usó el mismo método que estaba usando esta vez para tomar tierras y edificios de otras personas sin culpa alguna.

Toda la evidencia era clara, pero Rusia era un paraíso para la corrupción, pero ella aun veía una cierta luz al final del túnel...del tamaño del agujero de una aguja fina pero aun así la había y no se iba a rendir tan fácil.

—«Esto será muy duro»—pensó Hyun-ki con seriedad y sin despegar la mirada de los papeles—

[...]

TOC TOC

Al escuchar el toque de la puerta Caesar alzo la cabeza y vio a su asistente Lyudmila entrar con una expresión incómoda.

—Tiene un visitante... —dijo la chica de forma tímida—

Mirando detrás de ella, el visitante agitó su mano con un rostro brillante y lo reconoció de inmediato.

—Hola hermano —exclamo Dimitri con una sonrisa brillante antes ver la expresión de Caesar y entrar en la habitación—Tal mirada de decepción ¿A quién estabas esperando?

—¿Qué pasa? Ni siquiera me llamaste antes —le dijo Caesar mientras seguía atento con los papeles que tenía sobre el escritorio—

—¿Cuándo has visto que llame antes? —le pregunto Dimitri sentándose en el largo sofá—

Dimitri siempre llegaba a la oficina así, confiando en que era "especial" para Caesar ya que siempre que lo hacia el rostro de Caesar fruncia el ceño, pero nunca era castigado y hoy no fue diferente.