Julian miró a Oshi de reojo, una y otra vez, sin decidirse a decir nada. El pelirrojo caminaba tranquilamente, sin dejar de tararear la cancioncilla que siempre tenía en los labios y sin prestarle atención.
— ¿Quieres algo? — se interesó de pronto, desviando la mirada hacia él. Julian dio un respingo y se encogió.
— No... yo...
— ¡Vamos! No te cortes, soy tu mejor amigo, ¿no? Cuéntame lo que te preocupa.
¿Lo que le preocupaba? ¿Su mejor amigo? Julian suspiró resignado.
— ¿De qué conoces a Kei?
— ¿Conocerlo? —. Oshi comenzó a reír divertido y asintió con la cabeza exageradamente —. ¿Estas de broma? Nadie conoce realmente a Kei. Hemos compartido parte de nuestras vidas y... —. Oshi había dejado de sonreír y una sombra de tristeza cubrió su rostro unos instantes —. ...Y bueno, supongo que soy su mejor amigo — terminó con un tono jocoso.
Julian no dijo nada al respecto, pero no era tan tonto como para no haber percibido la complicidad y la seriedad con la que había empezado a hablar de pronto, sin acabar lo que realmente había querido decir.
— ¿Hace mucho que os conocéis?
— Sí, más o menos.
— Entonces... tal vez sepas cosas sobre Kei... — Julian miró de reojo a Oshi, pero éste seguía con la misma expresión desenfadada en su rostro.
— Sí, algunas, ¿qué quieres saber? — Oshi le dedicó una socarrona sonrisa —. Si tiene novia, ¿tal vez?
— ¡No! —. Julian enrojeció avergonzado y clavó la mirada en las baldosas del suelo —. No sé, quería saber algo de él... sobre su familia, sus padres por ejemplo...
Oshi no respondió y Julian se vio obligado a levantar la cabeza, intrigado por el silencio de su amigo. Éste, nuevamente había dejado de sonreír y clavando la mirada al frente, apresuró el paso como si tuviera mucha prisa por llegar a su destino. ¿Había tocado un tema tabú? ¿Qué ocurría entre Kei y sus padres? ¿Estarían enfadados?
— Están muertos — soltó Oshi finalmente y con aspereza, sin disminuir el ritmo que había empezado y claramente nada dispuesto a seguir hablando de ese tema aunque Julian volviera a hacer alguna pregunta.
Julian, sin embargo, no dijo nada. Continuó el camino callado, preguntándose lo doloroso que debió ser esa perdida para Kei, y después de un rato, escuchando la cancioncilla que Oshi había retomado, devolviéndole su actitud jovial.
— ¿Se puede saber qué estas haciendo, Oshi?
Rykou había abierto la puerta y al verlos, había fruncido el ceño, clavando en él una fría mirada de advertencia. Julian había retrocedido un poco asustado y el joven abriendo mucho los ojos ante su reacción, suavizó la severa expresión que adornaba su rostro e intentó hacer un amago de sonrisa amistosa. Después, había descargado en un "inocente" Oshi todo su enfado.
— ¿Qué demonios es éste alboroto? Rykou, ¿quién ha llamado?
Kei se acercó a la puerta abierta. Tenía el cabello alborotado y el rostro blanquecino con unas pequeñas ojeras. Al ver a Julian enarcó una ceja y su mirada se endureció.
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Cuando habla el corazón (chico x chico)
RomanceJulian es un chico tímido, sin amigos y algo torpe. Un día después de una cita choca contra otro chico, estropeándole la ropa. Éste, todo lo contrario a Julian, se las apaña para hacerle la vida imposible. (temática Gay) Dibujo de la portada por B...