Capítulo 20

466 37 9
                                    

Kimberly


Cassie me dejó en casa para darme cuenta que estaré sola toda la tarde, reviso si mamá me dejó alguna nota pero no fue así. Resoplo cansada y tendré que hacer el almuerzo, no tengo ánimos de hacerlo porque hoy se supone que debe ser especial y único pero mi suegra no dejó salir a mi chica. Golpeo la isla en la cocina con la palma de mi mano.

Le escribo a Cassie para que regrese a casa, necesito que ella haga el almuerzo y me ayude a pensar lo que tengo que hacer para sacar a esa chica de su casa. Subo a mi cuarto para poner a cargar mi celular y ducharme. Escucho como se abre y se cierra la puerta principal, supongo que es Cassie.

Me depile toda para esta noche, necesito estar limpia y con un olor fresco para ella que se embriague con mi olor. Termino de ducharme y envuelvo una toalla alrededor de mi cuerpo. Entro a mi cuarto y veo que está Cassie sentada revisando mis álbumes de canciones.

—¿Qué quieres de almorzar? — Pregunta sin levantar la vista de los CDs.

—¿Qué tienes en mente? — Pregunto de vuelta.

Encuentro mi braga favorita y me la coloco sin quitarme mi toalla. Me depile toda y aún estoy roja, no quiero que me vea así.

—¿Pollo? ¿Ensalada? ¿Sushi? — Pregunta mirándome — ¿Desde cuando tienes pena en que vea tu culo y tus tetas? — Empieza a reír.

Me doy vuelta y me acerco a ella para bailarle sensual, pone una cara de pervertida y me río, poco a poco me despojo de mi toalla para que ella se desmaye de la impresión, no tarde mucho en romper a carcajadas.

—Eres cómica, hermana — Dice y se levanta.

—Lo sé — Besa mi frente y aprieta mi mano.

—Esa chica es afortunada en tenerte — Sonríe y me guiña el ojo — Iré a hacer tu almuerzo — Tomo su mano.

—¿Te quedarás a almorzar conmigo? — Pregunto y ella asiente.

La dejo ir para vestirme, escojo un short de jeans y una camiseta ancha azul, ando descalza para sentir libre y más de la naturaleza. Mientras me arreglo pienso en cómo sacar a Citlalli de su casa, usaré la misma técnica de siempre raptarla y sacarla por la ventana o hablar con mi suegra, aunque a esa hora ella estará en el quinto sueño.

Cuando bajo me encuentro a Cassie sirviendo la comida en la mesa, me dedica una sutil sonrisa para volver a buscar el jugo, me siento para esperar y comer junto ella. Termina de servir y empezamos a degustar los alimentos, hizo algo extraño, ella inventa en la cocina por lo tanto no sé qué hizo.

—La mamá de Citlalli no la dejó salir esta noche — Comento después del tercer bocado de comida.

—¿¡Qué!? — Exclamó — ¿Qué harás?

—No sé — Niego con la cabeza — No sé qué hacer — Tomo mi cabeza entre mis manos — Lo únicos es... sacarla por la ventana — Admito.

—¡Que romántico, romea! — Bromea Cassie.

—No bromees — Digo algo irritada — No estoy de humor — Confieso.

—Esta noche hay una presentación — Habla con calma — Tengo dos entradas, mamá no quiere ir — Comenta — Si quieres se la hago llegar a la mamá de Citlalli para que asista y así puedas sacar a tu chica por la puerta.

Me quedo pensando un momento por la excelente idea que se le acaba de ocurrir a mi brillante hermana. Sonrío ampliamente por el resultado que si se dará, solo que no sé dónde llevarla. Quiero hacerla sentir especial, única, amada, respetada, querida, mía. En especial quiero hacerla sentir mía y que sepa que soy suya.

Mi amor detrás de una barraWhere stories live. Discover now