Capítulo 7

1.7K 84 11
                                    

El día de clases transcurrió con una relativa normalidad, si podría decirse. La gente me miraba menos que ayer, pero aún sentía miradas clavadas en mí y oía susurros a mis espaldas cuando pasaba por los pasillos, pero simplemente me enfoqué en ignorarlos.

Con los únicos con los que discutí el tema de Justin fué con Stephanie y Bryce, las únicas personas a las que les tengo verdadera confianza. Es decir, no es que sean mis únicos amigos, pero son los más cercanos y a los que les cuento todos, y viceversa.

Stephanie seguía gritando y emocionándose cada vez que siquiera mencionaba el nombre de Justin, y me decía que era la persona más suertuda del planeta y que me envidiaba, pero que aún así estaba feliz por mi. Bryce decía que igual se alegraba, pero me decía que tuviera cuidado y que no me ilusionara mucho.

La verdad es que tenía razón. Acabo de conocer al chico, y aunque cuando estoy con el me trata muy bien y parece una muy buena persona, no lo conocía realmente. Anoche habíamos hecho un gran avance, ya que me contó cosas muy personales y se mostró muy abierto...Añadiéndole el hecho de que nos besamos, por segunda vez. El beso pudo haber significado mucho para él, como absolutamente nada. No quiero simplemente ser un capricho o alguna de sus conquistas, así que espero que con el tiempo dejemos las cosas claras, ya que yo ni siquiera estoy segura de lo que siento.

Como hoy nos habíamos quedado a almorzar en la escuela,  cuando llegó la hora de irnos ya eran aproximadamente las tres de la tarde. Sonó el último timbre del día y caminé a la salida junto a los chicos. Me despedí de ellos y luego me dispuse a caminar hacia la parada del bus.

Saco los audífonos de mi bolso y los conecto a mi celular. La música comienza a sonar y apenas avanzo unos cuantos pasos cuando siento una mano en mi brazo que me detiene. Me doy la vuelta y veo que fué Thomas. Me mira con una sonrisa y yo se la devuelvo, mientras me saco un audífono para poder escucharlo.

-Hola Thomas- le digo.

-Hola Isa, cómo estás?- pregunta.

-Todo bien. Estoy de ida en mi casa en realidad, estoy un poco apurada ya que tengo que ir a trabajar- le digo haciendo una mueca- Me encantaría charlar, pero tengo que irme, lo siento. Hablamos otro día si?

-Quieres que te acompañe? No me molestaría- dice levantando sus hombros.

Cuando dice esto, las palabras que me dijo el otro día resuenan en mi cabeza: ''No me voy a dar por vencido hasta que logre enamorarte de nuevo.'' Trato de no darle importancia y olvidarlo. El solo hace esto por amabilidad, no es así?

-Oh, está bien, gracias- digo y me saco el otro audífono y los guardo en mi bolso junto a mi celular.-Vamos.

Al final iba a terminar yendo a mi casa a pie acompañada por este chico. En realidad quedaba a solo unas cuadras, pero me iba en bus por la comodidad y para ahorrar tiempo, aunque caminar un día no iba a matarme.

Empezamos a caminar en silencio, simplemente haciéndonos compañía durante un buen rato, hasta que Thomas rompe el silencio.

-Y, hace cuanto trabajas?- pregunta.- Y donde?

-Empecé hace unos meses, cuando cumplí dieciocho- explico- Quería empezar a ganar un poco de dinero extra para la Universidad por mi cuenta, y me pareció que Starbucks era una buena opción, ya sabes- digo y el asiente.

-Genial. Y que tal, es divertido?

-A veces si, pero otras veces los clientes me desesperan- Ambos reímos.- Y tu, tu trabajas?

-No, no lo veo necesario ahora mismo.- Obviamente que no lo hace, si está forrado en dinero.

Seguimos caminando y charlando de varios temas, cuando me llega un mensaje. Saco mi teléfono y lo abro. 

Beautiful ChaosWhere stories live. Discover now