Young love || Bradley Simpson.

7. Sabes que lo quieres

―Sky... ¿Estás despierta? ―susurró Brad desde su cama.

―No. ―contesté en el mismo tono que él.

―Tonta.

―Tonto.

―Cállate.

―Cállate tú.

―No lo haré.

―Bien. ¿Qué quieres?

―Oh nada, sólo estoy aburrido.

―Déjame dormir.

―No.

―Brad.

―¿Qué?

―So.

―Tonta.

―Ya, en serio. ¿Me ayudas?

―¿Qué quieres?

―Ir al baño.

―Ve.

―No puedo levantarme.

―Ya. ―se levantó y encendió la luz.―Eres molesta ¿sabes?

―No más que tú. ¿Qué haces? ¡Brad! ―me tomó en sus brazos y me llevó hasta el baño.

―Ya cállate, son las once de la noche.

―Bien. Puedes bajarme. ―me bajó en la puerta del baño.

―Puedo llevarte dentro.

―No, gracias. ―sonreí y me metí en éste. Luego de hacer mis necesidades salí de éste y vi a Brad sentado en el piso con su móvil, a un lado de la puerta.―¿Qué haces ahí?

―Te espero. ―se levantó y me tomó nuevamente en sus brazos para luego dejarme en mi cama.

―Gracias. ―sonrió y volvió a su cama.

[...]

―Brad. Debes ir a clases. ―hablé desde mi cama al escuchar su alarma.

―Cinco minutos más.

―Claro que no, vamos. ―soltó un bufido y se sentó.

―Definitivamente eres molesta.

―Cállate.

―Cállate tú.

―Tú.

―No, tú.

―No, tú.

―Que te calles. ―se acercó y se sentó a horcajadas sobre mi.

―¿Qué ha... ―solté una gran carcajada seguida de muchas más.―¡Deja de hacerme cosquillas!

―Nup.

―Por favor.

―No. ―como pude puse mi mano en su mejilla y lo acerqué a mi. 

Él dejó de hacerme cosquillas y se acercó más a mi. Sólo nos separaban dos centímetros pero se alejó. Bajo de encima mía y se metió rápido al baño.

Se preguntarán por qué hice eso.

Pues también yo.

[...]

Me desperté a causa de un molesto ruido, específicamente la puerta siendo golpeada.

―¿Quién es? ―grité desde mi cama ya que me costaba mucho levantarme.

―Luke. ―se escuchó desde el otro lado. Como pude me senté y me acomodé el cabello un poco, al igual que mi cama.

―¡Pasa! ―dicho esto la puerta se abrió y un sonriente Luke entró en la habitación, cerrando la puerta detrás de él.

―Buenos días, linda. ―se sentó en mi cama y besó mi frente.

―Buenos días. ―sonreí luego de sentarme.

―¿Cómo te encuentras?

―Mejor que ayer. Ya no duele tanto.

―Me alegro por ti. ―sonreí.

―¿Qué haces aquí?

―Sólo pasaba para ver cómo te encontrabas.

―Ow, eres muy lindo. ―dije inconscientemente. La sangre subió rápidamente a mis mejillas al darme cuenta.

―¿Crees que soy lindo? ―preguntó con un tono burlón. Bajé mi cabeza.

―Eh...

―Crees que soy lindo. ―afirmó.―Tú eres hermosa. ―murmuró mientras se acercaba a mi.

―Luke...

―Es sólo un beso.

―Eres mi profesor, ni siquiera es correcto que estés aquí.

―Sabes que lo quieres. ―susurró a centímetros de mis labios. Finalmente yo cortó la distancia que nos separaba y me besó.

Diablos, deseaba tanto esto.

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All the love, Sabrina