Desencuentros ...

Cap 30 ... Frustraciones y Elecciones

(Benedict)

Los días habían pasado después de que hablé con Kate la última vez, no nos habíamos encontrado por diferentes motivos uno: vivía en el set y otro ella estaba a full con sus clases. De tanto estar en el set la única compañía que tenía además de mis colegas era Charlotte. Ella conversaba mucho conmigo y éramos buenos compañeros. Cada día aprendíamos algo diferente de ambos.

Estaba caminando hacia la cafetería cuando re golpe sonó mi móvil. Número desconocido. Fruncí el ceño pero atendí.

- Hola!

- Cumberbacht – esa voz conocida no era nadie más que ...

- Hiddleston. – dije muy a mi pesar. ¿Qué hacía llamándome? – ¿que haces llamándome?

- Es raro no?- lo escuché reír-

- ¿Que quieres? No tengo mucho tiempo

- Ohhhh lo siento gran sherlock.

- Siempre tan imbécil.!!!!

- Hablar sobre Kate, eso quiero.

- ¿le ha pasado algo? – mientras le daba el dinero a la chica de la registradora y tomaba mi late. Salí con el móvil en mi oreja y mi café en la otra mano.

- No, solo quiero decirte que hablé con ella. – me hirvió al sangre.

- Escucha hiddleston, no te metas....

- Shhhhhhh no te alteres cumberbacht. Sólo voy a decirte que voy a luchar por ella. Sé que se ha distanciado de ti también y eso es una ventaja.

- ¿pero qué dices? Estás loco después de todo lo que has hecho maldito

- No me insultes, solo te digo que voy a recuperarla sabes que siempre estuvo enamorada de mi Benedict. ¿no es así? No te acuerdas esa conversación que tuvimos hace algunos años....

- Cállate. Ella está enamorándose de mí y lo sabes.... Y por eso haces esta maldita llamada. Además ¿no que ibas a mudarte con la rubia esa que tienes como novia?

- Y lo he hecho....

- Entonces!!!! Eres un mal nacido.

- Shhhhh

- Eso es lo que eres usas a Kate... paraa.....

- ¿Quién usa a quien Benedict? Piensa.... Todos estos años – calle estaba muy molesto en cierta forma tenía razón pero ella se estaba dando una oportunidad conmigo. Voy a usar esta carta para molestarlo maldito Thomas.

- Hicimos el amor antes de irse a Madrid sabes!!!! – le grite, el sólo quedo en silencio.- ella sola me lo dijo hiddleston. Ya no te ama.

- Se sigue estremeciendo cuando le hablo Cumberbacht... que no lo entiendes, porque no le preguntas y que ella elija. Sabes cuál va a ser su respuesta.

- No tiene caso hablar contigo eres un sínico. Un imbécil.

- Bla bla bla no me interesa solo te digo esto. La voy a recuperar. – colgó- tiré el vaso de café a la basura y seguí camino.

Entre hecho una furia al set, no podía estar ahí estaba descontrolado. Maldito Thomas y su imbecilidad. Hablé con el director de la serie y le pedí retirarme necesitaba beber algo y estaba muy furioso. Me dió el día y salí corriendo a un bar. Llamaría a Kate y hablaría con ella. Tenía que verla lo antes posible. Pero... ¿si Hiddleston decía la verdad?. No no podía ser recuerdo sus palabras....

Te quiero Ben. Déjame amarte. – tomé su rostro, sus ojos despedían lágrimas de dolor por todo lo que le había hecho. – perdóname. Déjame hacerlo.

Sonó mi móvil... era Charlotte. Hasta ahora ella había sido la única que podía charla conmigo de estas cosas, ella tenía un problema parecido con su ex novio Sebastián. Conversamos unos minutos y le dije que estaba en un bar tomando un trago para sacarme los nervios. Al rato ella estaba parada en la puerta con una mirada preocupada.

- No conozco a hiddleston, pero no deberías confiar en lo que dice. – me dijo ella. - Por lo que me cuentas siempre ha estado metido entre ustedes.

- En realidad siempre fui yo Charlotte – le dije y tomé un sorbo de vodka. Ella me miró- ella acudía a mi cada vez que ellos peleaban como amigos o lo que sea.

- Entonces la culpa no la tienes tú, sino.... –hizo un silencio-

- Kate, lo sé. Pero es inevitable me siento tan inseguro.

- Calma Benedict – tomó una de sus manos y la apoyó sobre la mía. – tienes que resolver esto hablando con ella.

- Siento que se está alejando. No me ha dicho sobre su charla con Thomas. no sé estoy confundido. La llamaré.

- No Benedict ahora estas un poco... ebrio y no tienes que arruinarlo.

- Tienes razón.

- Acuérdate que todo saldrá bien con Kate. Sólo tranquilízate y mañana llámala.

(Tom)

Estaba mirando por el ventanal del departamento que tenía en Los Ángeles, toda la ciudad se veía iluminada, tomé un sorbo de vodka y miré hacia mi cama. Un destello de luz iluminaba el cuerpo desnudo de Tifanny. Estuvimos varias horas haciendo el amor. La miré con deseo y me acordé de las palabras de Cumberbacht....

Hicimos el amor antes de irse a Madrid sabes!!!! ella sola me lo dijo hiddleston. Ya no te ama.

Estaba confundido, todo había pasando tan rápido, me transformé en una persona que no quería ser. Hasta qué punto había llegado del de llamar a Benedict decirle mis planes y acostarme e invitar a vivir a Tiffany a poco de conocerla. La respuesta: estaba resentido, conmigo mismo por haberlo arruinado todo. Amaba a Kate y no quería que nadie esté con ella excepto yo. Pero en donde estaba yo, lejos de ella y con otra chica a la que hice mi novia sólo por resentimiento.

Dejé el vaso en la mesa de luz y fui hasta la cocina. Prendí mi laptop y miré las noticias. Mi mente buscaba algo que diga algo de Kate. Pero no había nada. Me había eliminado de sus redes sociales, entonces menos información podía encontrar de ella. Me sentía frustrado. Todo salía mal, que podía hacer nada. Solo comunicarme con ella por teléfono y dejar que el destino haga lo suyo. Sentí unos pasos. Cerré mi laptop y sentí los brazos de Tiffany.

- Mi amor, me has dejado sola, tenía frío y no te encontré.

- Lo siento cariño- me di vuelta y la abracé- vamos a la cama.- me dio un beso en los labios y la guié hacia la habitación.

(Kate)

Los días habían pasado rápido, estuve organizando mis clases ahora tendría que organizar bien mi equipaje porque ya estaba a unos días de irme a Liverpool. Durante estas semanas no me había podido comunicar con Ben solo algunos mensajes y eso me ponía muy nerviosa, lo sentía medio distante.

Había hablado con George en la mañana y le había dicho como me sentía respecto a eso. Me dijo que me tranquilizara que todo estaría bien. Estaba muy ansiosa y feliz, después de haberlo pensado bastante quería darme verdaderamente una oportunidad con Benedict y esta vez aprovecharía el viaje para decírselo cara a cara y que a pesar de la distancia que nos separaba aprontar esto juntos. Lo único que esperaba era que a él le gustase la sorpresa que iba a darle...