Con todo lo que había trabajado y con las propinas que me habían dado ya había ahorrado lo suficiente para alquilar un apartamento y sostenerme.
Lo mejor de todo es que el apartamento queda en un edificio justo al lado de la casa de Clara y Dylan.
Hoy me mudaría, aunque lo único que tenía que llevar era mi maleta y unas bolsas con las compras. Ya en el apartamento tenía unos pocos electrodomésticos que había comprado hace poco. El apartamento es bastante pequeño. Una cocina, un baño, una habitación y una pequeña sala.
Estaba en el cuarto que compartía con Clara, en su casa, terminando de empacar mis cosas.
-Sabes que te voy a extrañar mucho ¿cierto?-dijo Clara a punto de llorar
-Lo sé yo también los extrañare-dije
-No tienes que irte-dijo ella-vas a vivir sola, eso es aburrido-añadió
-Vendré a visitarlos seguido- dije para animarla.
-Quédate con nosotros-rogo ella
-No clara, no puedo-dije
-¿Por qué? ¿Qué te lo impide?-inquirió Clara
No sabía que decirle, necesitaba mi espacio, y además no era correcto que me quedara allí, mas con un chico en la casa.
-Clara...no es correcto que me quede aquí, sabes que no vivimos las dos solas, Dylan también vive aquí... así que ¿entiendes a qué me refiero?-dije nerviosa
Ella se quedó pensando unos segundos
-Oh...si es cierto. Temes quedarte a solas con el-dijo ella
-No había pensado en eso-añadió ella
-Si... es por eso que tengo que irme-dije con sinceridad
-¿Sabes? Eres una mujer muy honesta, y es bueno que te guardes, después de todo se trata de obedecerle a Dios-comentó Clara
-Exactamente, tengo que poner en práctica lo que he aprendido de Dios-dije
Termine de empacar mis cosas y me coloqué mi maleta.
Clara y yo bajamos, ella me ayudo con las bolsas donde tenía las compras.
Salimos dela casa y fuimos inmediatamente a mi nuevo apartamento.
Saqué las llaves y abrí la puerta.
-Vaya que lindo-comentó Clara al entrar
-Sí, es pequeño pero acogedor, perfecto para mí-respondí
Le enseñe a mi amiga el resto de mi apartamento, el cual ya estaba dotado con lo básico.
Mi habitación, ya tenía una cama, un armario y un lindo tocador, todo eso me lo había regalado Dana. Al principio no quería aceptar, era demasiado, pero mi amiga insistió diciendo que lo necesitaba y que era un regalo por nuestra amistad. Así que lo acepte.
Clara y Dylan me habían regalado un gran televisor y pues el resto yo lo había comprado. Una nevera pequeña, un fogón, y otros cuantos utensilios de cocina.
Tenía que agradecerle a Dios por haberme dado un trabajo porque si no hubiese sido por eso y por la ayuda de mis amigos no sé qué hubiera hecho.
Era sábado así que hoy descansábamos tanto clara como yo.
Mi amiga se quedó ayudándome a organizar las compras y me acompaño el resto de la tarde. También decidimos hacer un postre con fresas que nos quedó delicioso.
Nos sentamos a ver una película mientras nos comíamos el postre.
Dylan había quedado de venir en la tarde a conocer e apartamento.
Estábamos viendo una película llamada un paseo para recordar, ya se estaba terminando y las dos ya estábamos llorando.
Tocaron la puerta, me levante para ver quien era.
Era Dylan
En cuanto le abrí escuche el grito de Clara
-¡POR QUE SE MURIÓ!-gritó ella
-Hola- saludó él
-Hola pasa-dije sorbiéndome la nariz
-¿Quién se murió?-preguntó él asustado
Me limpie mis lágrimas y solté una risita al ver su expresión
-Nadie se murió, estamos viendo una película-explique
-Oh-dijo el aliviado
-Pasa- dije
Él entro y observó el apartamento
-Es agradable-dijo
-sí, lo es-
Pasamos a la sala donde se encontraba Clara aun llorando
-Hermanita, es solo una película-dijo Dylan para calmarla
-Aun así, es triste-dijo ella
Fui a la cocina y le lleve un pedazo de postre a Dylan
-Insisto, eres una gran cocinera-dijo Dylan
-Gracias-respondí
Unas horas más tarde clara y Dylan se fueron y yo pasaba mi primer día en mi nuevo apartamento. Me sentía más independiente, aunque extrañaba a Clara contándome sus historias en las noches.
Y a Dylan quien siempre me sacaba una sonrisa.
Lo bueno es que igual continuamos viviendo cerca.
BINABASA MO ANG
Salvando una Vida
Spiritual(EN EDICIÓN) ¿Será posible encontrarte con alguien solo por casualidad? No. Nada ocurre por casualidad, todo tiene un propósito específico. Dana se encontrara con Támara en el momento justo y antes de que fuese demasiado tarde. Esta es una historia...