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Después de una larga ducha, donde me aclaré los pensamientos y  me repetí mil veces que no me iba a pasar nada si estuviese Jeffrey por cerca, caminaba decidida a hacer una cosa con Jeffrey: llegar a segunda base. Aunque yo le había hecho un oral y el me toco los pechos, lo hicimos por separado, quería hacerlo juntos hoy, que él me tocara ahí.

Llego a la sala y veo que él esta leyendo un artículo en la Tablet, está sentado en el sofá con las piernas en la mesa de centro. En su mayor comodidad. Esta con unos pantalones de chándal y una camiseta blanca básica, aun con la ropa más simple no deja de ser atractivo, de ser sensual a su simple manera.

--¿Pasa algo? –me pregunta sin despegar su vista de la Tablet, yo niego pero después me doy cuenta que el no me esta mirando.-

-- No... -diablos, no se como llegar a él. Me coloque la camiseta que él me dio en aquella cena, era una de sus camisetas más chicas. Al estar solo de ropa interior y de bragas, mitad de mi traste estaba descubierto, y no me avergonzaba, quería seducirlo pero no tenía la mínima idea como.- ¿Quieres café?

-- Son las 10 de la noche, nena –me mira y ríe.- Un té acepto

-- Esta bien, ya vengo –me levanto y siento un carraspeo, bien, al menos ahora el vió como estoy vestida. Elimino mis pensamientos de que parezco una zorra y preparo el té,unos minutos después se lo alcanzo, el agradece en voz baja y sigue leyendo un artículo.- ¿Qué lees?

-- Un artículo sobre política –me mira por encima de los lentes- Te ves rara

-- Tal vez por lo de hoy, estoy un poco abrumada.

-- No –deja la Tablet a su lado y me observa.- Estas como... queriendo decirme algo.

Sin pensar dos veces estampo mis labios con los suyos, como la primera vez, solo que ahora él si me corresponde. Paso mis manos por su cuello hasta llegar a  su nuca, doy un tirón en su pelo cuando él me muerde el labio inferior. Sus manos están en mi cintura, donde acaricia suavemente con los pulgares por debajo de mi camiseta. Paso una de mis manos por su pecho acariciando suavemente, él toma como un mensaje para colocarme en su regazo. No nos dejamos de besar por nada, ahora sus manos aprietan mis nalgas llevándome a su entrepierna.

Busco el borde de su camiseta y el se separa un poco de mi.

--¿Estas segura? –me pregunta y yo asiento, el se deja sacar la camiseta y procede a sacarme la mía. No tenía vergüenza así que ni siquiera mis mejillas se sonrojaron cuando quede solo de ropa interior frente a él.- Diablos, Cassandra! –susurra y su mirada recorre todo mi cuerpo, sus manos acarician suavemente mis piernas. El calor me invade cuando siento algo duro rozar contra mis muslos.-

Apoyo mis manos en sus hombros y me muevo un poco hasta quedar sobre su gran bulto, comienzo a moverme creando una fricción, ahora si mis mejillas se vuelven coloradas cuando veo a Jeffrey con los ojos entrecerrados soltando un par de roncos gemidos. Mis bragas están empapadas y siento que algo está sobrando, mi sostén. Como si el leyera mi pensamiento dirige sus labios hacia mi cuello, allí se entretiene un rato hasta bajar a mis pechos, sus manos recorren mi espalda buscando el broche para abrirlo pero yo río.

--Adelante cariño –susurro un poco divertida, el se saca los lentes y ahora si, con una mano desabrocha el sosten y mis pechos se liberan. El suelta un pesado suspiro antes de atacar mis pechos a besos, mordidas y chupones, me muevo un poco más sobre su miembro y lo siento endurecerse más aun. Escondo mi cara en el cuello de Jeffrey y suelto unos gemidos, diablos, esto se siente tan bien.- Tocame, por favor.

Una de sus manos recorre mis costillas, pasa por mis bragas y van hasta mi rodilla. La siento subir hasta meterse en mi entrepierna, mi cuerpo se tensa pero consigo distraerme con los pellizcones que él me da en uno de mis pezones.

--Estas segura de esto?–se separa un poco y me mira, yo asiento.- Estas tensa...

-- Necesito acostumbrarme, solo hazlo, por favor –beso la comisura de su boca y el suspira.- Lo necesito –escucho un sonido de algo rasgándose y segundos después veo mis bragas, o lo que sobro de ellas en la mano de Jeffrey, deja a un lado y vuelve a colocar su mano en mi entrepierna.-

-- Estas empapada –susurra un poco divertido y yo me sonrojo, el se mueve un poco hasta bajarse los pantalones, veo que están un poco mojados, justo sobre su miembro, el cual así que el se baja los pantalones sale disparado. Estaba sin bóxer.- No me mires así, no voy a hacer eso. Solo creo que debemos estar en igual condición -dice refiriéndose a mi desnudez.-

Vuelvo a besarlo porque si comienzo a pensar mucho, mi cuerpo va a comenzar a recordar, y no quiero hacerlo. Solo me quiero dejar llevar, hoy, y siempre que esté con este hombre. Sus largos dedos recorren mis pliegues una y otra vez , gimo, es imposible no hacerlo. Toca mi clítoris descaradamente y mis piernas comienzan a temblar. Siento que entra un dedo en mi, después otro y cuando creo que voy a  correrme, el coloca un tercer dedo.

--Santo cielo, eres muy estrecha mi niña –muerde mi cuello y eso es el último estímulo, me corro en su mano fuertemente. El saca sus dedos y me sonríe.- Lo hiciste muy bien

-- En todo caso tu lo hiciste muy bien –beso sus labios y abro mis ojos, siento como mano humeda posa en mi cintura, suspiro y mis ojos se desvían a algo que sobresale entre nosotros.- ¿Quieres que haga algo? –digo refiriéndome a su erecto miembro.-


Savior [Jeffrey Dean Morgan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora