「Thirsty」 ;+p. jm

❝✾ thirsty 02#✾❞

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Hiwo detuvo el pequeño auto negro en frente de la entrada del colegio, Hara se mantuvo callada en todo el transcurso con su padre, aun se sentía mal por haberle dado aquella impresión, ella no solía ser mentirosa, pero en ese momento le salió natural.

—Que te vaya bien.—vocalizo su padre mientras acercaba su mano a la puerta del auto y la abría, Hara sonrió nerviosa, tomo sus cosas y salio del automóvil. Hiwo cerro la puerta y a su vez bajo la ventana, la miró.—Vengo por ti, espera aquí en la salida. Adiós.—dicho aquello se marcho dejando a Hara en la entrada del colegio.

La chica temerosa apretó la correa de su mochila y comenzó a marchar hasta adentrarse al colegio, su semblante cambio completamente al ver el interior, el lugar era muy diferente al que ella conocía, empezó a caminar por los pasillos mientras observaba a su alrededor y el alrededor la observaba a ella, a los pocos minutos de haber pisado el lugar ya se comenzaba a sentir incomoda, la gente la miraba como si fuera un bicho raro solo por ser diferente a ellos, solo por tener una nacionalidad poco común a la de ellos.

Hara a los minutos de merodear por todo el colegio en busca de su salón, lo consiguió, pero, no se esperaba que la clase se hallara a mitad de camino, suspiro y entro al aula, recibiendo las miradas curiosas de todo el salón.

—Ehh...disculpe, creo que me equivoque de salón.—confeso avergonzada mientras mirada a la tutora la cual sonrió apenada.

—No creo. Debes ser Kim Hara ¿Cierto?.—asintió.—Entonces no te equivocaste, por favor déjame presentarte.

Dicho aquello tomó a Hara por los hombros y la encamino al centro del aula.

—Por favor, presten atención aquí.—suplicó la tutora, mientras intentaba hacer que Hara no se le escapara.—Quiero presentares a su nueva compañera, ella es Kim Hara y sera nuestra nueva amiga así que por favor cuiden de ella.

La tutora la miró, esperando a que agregara algo, Hara entendió y asintió.

—Un gusto Kim Hara, por favor cuiden de mi.—terminado aquello todo el salón soltó una carcajada burlona y arrogante, Hara sabia que su coreano no era muy bueno, pero nunca llego a pensar que fuera tan malo, se sintió humillada. La tutora regaño a la clase, pero no tuvo efecto. Una de las niñas de adelante levanto la mano. La profesora rápidamente le otorgo hablar.

—¿No eres coreana?.—Hara negó.—Entonces ¿Que haces aquí?.

A Hara y a la tutora les pareció grosera su pregunta, pero aun así contesto;—Vine a quedarme con mi padre, el si es coreano. 

La tutora al ver el recibimiento opto por mandarla a su asiento y seguir con la clase.

—Bien, entonces Hara te sentaras con...—medito mientras su mirada recorría todo el salón, sonrió al ver aquel puesto vació.—Con Jungkook.—el nombrado levanto la mirada de su cuaderno mientras fruncía el ceño. Levanto la mano.—¿Sucede algo Jeon?.

—Si, no quiero que la extranjera se siente conmigo. Me puede pegar las pulgas.—todo el salón comenzó a reírse, la tutora lo miró mal.—¿No se puede sentar con algún otro?

—Yo no la quiero conmigo.—soltó uno rápidamente.

—Yo menos.—dijo una chica.

—Déjela sola con sus pulgas profesora.—sugirió otro mientras reía.

La Tutora comenzó a regañar molesta a los estudiantes mientras Hara aun de pie, trataba de no soltar en llanto, miro el piso, se restregó los ojos con su mano derecha e intento no romperse ahí mismo.

—Suficiente Jeon, por favor no digas eso de tu compañera.—miro a Hara.—Por favor Hara toma asiento en donde te indique.—la nombrada se sintió incomoda mientras asentía y comenzaba a caminar en dirección a su asiento, aquel asiento con aquel chico que había dicho que ella tenia pulgas, como si de un perro se tratase. Tomo asiento intentando parecer que no le importaba lo que el pelinegro había dicho, pero en realidad por dentro estaba rota. El chico la miro de soslayo, detallando cada facción de su rostro, era la primera vez que veía a una chica extranjera, comenzó a comparar; los labios de la chica eran de un rosa pálido y a cada cinco segundos  los relamía, sus ojos no eran tan pequeños y no eran de un color común, era de un  marrón claro, su cabello negro no era liso, sino todo lo contrario era de diversas formas y parecía tener vida propia. Hara al sentir la mirada de su compañero, lo miro. Este al darse cuenta retiro rápidamente su foco de atención de ella y miro la pizarra. 

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Hara se encontraba de pie, en la entrada con su bolso entre las manos mientras esperaba la llegada de su padre, los minutos pasaban y no veía rastro de el sujeto, suspiro mientras tomaba asiento en la acera y llevaba su mirada a la carretera en busca de el automóvil conocido.

Una hora después, Hiwo hizo su aparición, haciendo que Hara cansada se levantara rápidamente del suelo y mientras limpiaba su falda en la parte trasera se acercara hacia su padre, este al verle la saludo.

—Siento llegar tarde, tuve un problema, pero lo importante es que estoy aquí.—sonrió mientras veía como Hara se adentraba al auto. Arrancó.—Y dime ¿Como te fue en tu primer día?.

Hara despego la mirada de la ventana y lo miro;—Bien, lo mismo de siempre.—regreso su vista a la ventana.—¿Mi madre  ha llamado?.

Hiwo rió burlón, mientras aceleraba.

—Te fuiste ayer Hara, ¿Creíste que te llamaría hoy?.—Hara lo miro confundido, suspiró.—No Hara, no ha llamado, y no llamara así que no creo que debas sentarte al lado del teléfono todo el día esperando a que lo haga. Claro si es que tienes ese plan.

Hara asintió, le dolía escuchar aquellas palabras, pero era verdad. De seguro su madre no llamaría.

—Hoy iremos a cenar, ¿Te parece?.

—Si, me encantaría.—asintió pensando en que tendría la oportunidad de conocer mas a su padre, aquello de tener una noche juntos le parecía bien.

—Bien, déjame avisarle a Yuso para que nos espere en la casa.—la sonrisa de la chica se esfumo. Hara mostró otra sonrisa sin ganas mientras miraba hacia la carretera.