❝✾thirsty 29#✾❞

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—Deberías ir y verla...—murmuro Hara llevando con parsimonia sus pies al sofá. Hoseok le siguió negando furtivamente la cabeza. La idea de verla lo había atormentado desde que la vio por primera vez, pero aun así.

—No puedo, Hara.—bajo la cabeza con cierta molestia en el pecho.—No quiero causarle problemas, si la veo y hablamos todo volverá a ser como antes.—le miro.—No quiero irme o que ella pierda su empleo por una estupidez mía.—la menor se mantuvo en silencio, pensativa. Hoseok espero unos segundos para que luego una sonrisa amistosa adornara sus labios.—Oye...—comenzó, ganando la atención de la chica.—Cuando el Sr. Hiwo y su novia se casen, espero que vengas conmigo a la  casa de mi abuela. Ya sabes, para que no te quedes aburrida sin mi cuando ellos pasen su luna de miel.— Hara sonrió complacida.

—Gracias, Hoseok.

—¿Y como vas con Jeon?—levanto sus cejas quisquilloso.

Y Hara suspiro. 

Si supiera que Jimin se esta metiendo... 

La menor seguía leyendo uno de sus libros cuando el timbre de la entrada resonó. Creyendo que debía de ser Hoseok se levanto del sofá con hastió y se encamino a la puerta. Pero la sorpresa que se llevo jamas la había visto venir.

—Jimin...—murmuro atontada observando aquel adonis solitario de pie a las seis de la noche en la puerta de su casa. Jimin sonrió ante el comportamiento de la chica, echo una mirada rápida sobre el hombro de esta comprobando que estaba sola.

—Necesito entrar, Hara.—su voz ronca la alarmo. Sus piernas temblaron sobre la sala mientras ojeaba su vestimenta. Unos simples vaqueros y una camisa ajustada. La chica cabeceo sin entender, se mantuvo en la puerta esperando a que siguiera y sobre todo no lo dejaría pasar. Jimin ahora estando soltero no seria del todo confiable.

Y que inteligente era Hara.

—Disculpe...

—He venido porque necesito algunas cosas que le he prestado a tu padre. Ya que el no esta deberías dármelas tu, ¿No crees?—sus labios carnosos dejaron ver una sonrisa inocente.

—Claro.—susurro.—Por favor pase, yo...—dejando espacio en la puerta se acerco a la cocina, pero frenando en seco se volteo. Observo a Jimin ya dentro de su casa y las manos le picaron.—¿Que le presto a mi padre?—pregunto con voz nerviosa.

Jimin levanto los hombros sin importancia y suspiro;—Algunas herramientas de jardinería.—la menor asintió. ¿Hiwo con herramientas de jardín?

Ahora Jimin se mantenía detrás de ella mientras esta ansiosa buscaba las herramientas. ¿Por que lo había dejado pasar? lo que hacia no estaba bien, ¿Con que cara su padre le vería si viera a el Sr. Park con ella solos? 

Estuvo a solo segundos de correrlo, pero antes de girarse a encararlo una suave voz gruesa y contenida baila entre su oído y el frió aliento de un hombre imponente roza su cuello.

—Tu padre no usa herramientas de jardín, Hara...

Sintiendo como el calor inunda su rostro, se percato de unas manos extrañas tomando con fiereza su cintura para acercarla a el y dejar que su espalda nerviosa se estrellara contra su fornido pecho alterado.

Pudo sentir como Jimin sonreía y su voz profunda la llamaba.

—¿Así que estas solas?—pregunto juguetón, ya que el sabia que Hiwo no se hallaba. Sus manos comenzaron a cobrar vida propia regalando caricias y sutiles movimientos sobre su cintura baja.—Joder, Hara...—ronroneo. Ya no podía contenerse mas, tener a Hara así de vulnerable y no hacer nada lo estaba carcomiendo.

Y de un solo movimiento la giro con fuerzas, haciendo que su pies giraran y que sus manos se estrellaran sobre el pecho de aquel hombre mayor. Jimin la ataco sin esperar mas, beso sus labios inocentes y dulces mezclando su saliva con la de ella. El beso subió de nivel y Jimin quería mas, mucho mas. 

La levanto en el aire, sus brazos se contrajeron debido a la fuerza y Hara para evitar caer tuvo que enrollar sus pies a los costados de su cuerpo. Siguieron el furtivo beso mojado, la menor se había desconectado de todo, olvidándose de su situación con Jungkook, de que su padre los podría encontrar, de Hoseok y solo cerro los ojos y se dejo llevar entre los brazos de aquel adonis caliente. La espalda de la chica se estrello con leve rudeza contra una de las paredes de la casa. Los cabellos de Hara estaban revueltos al igual que su estomago cuando sintió como Jimin la enjaulaba dejándola presa. Repartió un beso en su cuello y otro en su mejilla para luego soltarla en el aire y alejarse de ella jadeante.

La mirada de ambos brillaban y se mantenían oscuras. Hara respiro con fuerzas pegando su espalda de la pared en un intento de no caerse. Jimin la miro con la frente sudorosa y sus cabellos despeinados, paso su lengua por sus labios mientras trataba de conseguir aire. 

Si hubiera querido se la abría comido...

Sonrió, como cual niño inocente dejando a Hara confundida, y excitada por su agresión. Jimin acomodo sus cabellos echándolos hacia atrás para luego morder su labio con fuerzas en un intento de controlarse. Ver a Hara así lo ponía tanto.

—No continuare hasta que tu misma me lo pidas...—murmuro.—Que me ruegues por volver a tocarte.—se acerco a ella para besar con lentitud su frente perlada para a su vez ir a la puerta con aquel aire hermoso y peligroso que lo caracterizaba y antes de abrir la se volteo.

Hara se mantuvo en silencio sin poder objetar nada. 

Las puertas de la casa del lobo siempre estarán abiertas, para que caperucita roja entre y se pierda...—la miro con fiereza antes de marchar hacia su cueva.—Salúdame a tu novio, Hara.

Y sin mas se fue. 

「Thirsty」 ;+p. jmWhere stories live. Discover now