「Thirsty」 ;+p. jm

❝✾thirsty 09#✾❞

―Tenemos que hablar.―Jungkook tomo el brazo de Hara haciendo que se levantara bruscamente de su asiento. La chica confusa no tuvo tiempo de rehusarse. Jungkook la saco del salón jalándola de manera poco amable por los pasillos. Hara intento alejarlo ya que había dejado sus pertenencias en el aula y necesitaba recogerlas. No quería que le robaran.

Llegaron a un salón vació, el pelinegro cerro la puerta dejando la luz apagada con intenciones de que no los vieran. No quería que los interrumpieran. Hara danzo por el salón al ser lanzada con brusquedad al lugar.

Sin dudas, eso demostraba que Jungkook no era caballeroso ni mucho menos el príncipe que ella creía. Aunque no tenia el derecho de quejarse; después de todo el chico malo de su salón la había salvado de ser atropellada y eso, era algo que Hara no podía olvidar. 

Lejos de sus pensamientos, sintió miedo. Por la cabeza dramática de Hara; propia de muchas películas de terror, pasaron miles de situaciones que hicieron que su cuerpo delgado se estremeciera. Estaban solos, en un lugar apartado en donde nadie escucharía nada, a oscuras y con un chico de pinta no muy respetuoso.

Intento huir, pero Jungkook rápidamente la tomo del codo y maniobrando en el acto la pego contra el pizarron polvoriento. Hara cerro los ojos asustada, quería gritar pero tenia miedo de que aquel acto lo molestara y se las cobrara. 

―Aun no me has dado las gracias.―soltó el pelinegro mientras sostenía a la chica hecha gelatina por los hombros.

―¿Que?―aquellas palabras la tomaron por sorpresa.

―Eres una desagradecida.―comenzó al tiempo en que el frió del salón bailaba por las piernas descubiertas de Hara.―Hay que ver que aun eres una cría incompetente.

―Gracias.―murmuro avergonzada. ¿Esto era todo? ¿Solo la había secuestrado para exigir un agradecimiento? 

Definitivamente Jungkook era un misterio. 

Hara estaba dispuesta a preguntarle algunas cosas referentes al accidente, después de todo no creía mucho las palabras de su vecino. Pero antes de hablar Jungkook la corto:

―¿Quien era el?―ataco de la nada. 

La chica se mantuvo en silencio, sin entender muy bien a lo que se refería. 

¿Acaso hablaba del Sr. Park?

El pelinegro adivino la confusión en la cara de la chica así que continuo.

―¿Quien era ese hombre el cual te llevo a tu casa?―la miro directamente a los ojos. Hara se sintió incomoda, pero aun así no aparto la mirada.―No me jodas diciéndome que es tu padre, ese te miraba con cara de asquerosidad.―algo en su voz detonaba molestia y recelo. Hara capto a quien se refería y una oleada de satisfacción recorrió su cuerpo. ¿Park Jimin la miraba con esos ojos?

―No es tu asunto.―objeto intentando mostrar autoridad, pero Jungkook se rió amargamente mientras negaba con la cabeza. 

―Me tienes que responder.―acuso.―Después de todo es lo menos que puedes hacer por haberte salvado el pellejo.―la miro.―Si no fuera por mi, en estos momentos estarías bajo tierra cubierta de malditos gusanos.―aquellas palabras hirieron a Hara, a parte de que su forma de hablar no era apropiada no le agrado su argumentación.

―E-es mi vecino...―murmuro al tiempo en que los ojos de el pelinegro la escaneaban. Jungkook se acerco mas a ella, a tal punto de invadir aun mas su espacio personal. 

―¿Y dime?―objeto.―¿Desde cuando los vecinos ven a sus vecinas con ganas de follarlas?―pregunto. Su aliento mentolado cayo sin piedad sobre los labios de la chica. Hara se quedo quieta, no quiso moverse ni mucho menos alejarlo.