8

6.8K 463 39
                                    

Me ha desnudado y me ha bañado.

Tocó cada parte de mí, mientras el agua recorría mi tembloroso y delgado cuerpo.

Y lo peor. Él estuvo presente, apreció mi desnudes, caminaba de un lado a otro y se detenía por momentos a observarme.

Gracias al masaje que me han hecho después del baño, me siento más ligera y descansada. Pero no bien.

Mi cabello aún suelta pequeñas gotas de agua que caen sobre mi espalda.

Estoy recostada sobre la nueva cama, en la nueva habitación. Y él me esta observando.

Quiero gritar y ordenarle que se vaya, pero parece que me hubiese quedado sin cuerdas vocales. Estoy completamente muda.

Su mirada no se aparta ni un segundo de mí.

Abro y cierro mi boca repetidamente pero no logro emitir ningún sonido.

-¿Quieres decir algo, corazón?- pregunta con esa puta expresión de superioridad, como si manipulara el mundo con sus manos.

Intento de nuevo, pero ninguna palabra logra salir, todas quedan estancadas.
La ira crece dentro de mí y le señalo la puerta.

Este mira en la dirección que apunta mi dedo y vuelve la mirada a mí.

-¿Quieres que me marche?- pregunta de nuevo.

Digo que sí con la cabeza y le sostengo la mirada, como si lo retara.

Sonríe de medio lado, como si de uns manía se tratara y me da la espalda, abre la puerta y antes de salir, me mira por última vez y guiña su ojo.

Desde adentro escucho como introduce la llave y la gira repetidas veces.

GimeWhere stories live. Discover now