Gime

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Su cuerpo yace sobre el suelo, mientras la sangre de su cabeza mancha el piso, no siento nada, ni más tranquilidad ni más culpabilidad, estoy impresionada de mi puntería, a tal distancia y darle justo en la cabeza, para ser principiante estoy más que bien, Evan observa el cadáver de unos de sus tantos hombres sin vida y luego pasa su mirada de nuevo a mí, absorto y confundido al mismo tiempo, como si en realidad hubiese aceptado la muerte sólo por darme el gusto de asesinarlo.

Camino hacia él y le entrego el arma.

-No puedes morir sin haber pagado en la tierra, lo que hiciste en la tierra, cuando pagues y mueras, pagarás en el infierno, las molestia que le causaste a dios- 

-Mi castigo en la tierra eres tú, que no me ames como yo lo hago, es eso, con lo que pago las molestias causadas-

Me encuentro perpleja ante sus palabras, imágenes golpean mi mente, Evan y yo tomados de la mano, riendo, charlando y él sonrojado por motivos que desconozco...