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Julie fingía tener el sueño encima.

- ¿Te has enojado por algo? – preguntó él al verla acostada sobre la cama dándole la espalda, Julie no le dirigió la palabra, la verdad si había sido un día muy largo y en serio tenía muchas ganas de dormir

-Vale, no vas a hablarme. – se cruzó de brazos, algo de todo lo que había pasado en la noche también le había hecho enojar muchísimo y era el enorme desplante que había hecho Julie a la familia Marsh, no solo por Sara sino por los demás, pero claro ella aún no entendería por qué esa familia era tan importante para Max. - ¿Por qué te fuiste?

Ella volvió a quedarse callada, se hizo el silencio por un gran tiempo, Max se enojó aún más porque sabía lo difícil que se ponía Julie en estas cosas.

- Al menos pudiste haber inventado algo ¿no? pero no. . . .solo se te ocurrió irte.

- No me reclames ¿ok? Has sido tú el que te has portado como un ridículo hoy - sentenció ella aún estando de espalda

- ¿En serio? ¿Por qué? ¿Por haber hecho todas las malditas cosas que me has pedido? He venido hasta Kingston por ti, por tus estúpidas ganas de conocer mi ciudad. – Max levantó la voz, ella sintió que un enorme nudo en su garganta se formaba de pronto.

- ¿Y cuál es tu problema con eso? - Julie se volteó, siempre había tenido esa duda. - ¿Por qué siempre me dices lo mismo? ¿Hay algo que yo no sé? ¿Por qué demonios odias tanto Kingston? – le preguntó.

Max endureció los pómulos". . . No Julie, no tienes que saberlo. . ."

- No es tu problema.

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