13.

2K 163 11
                                    

PARTE TRECE

ANTES DE LEER: 

Quería avisaros que cuando Ainhoa se refiere a él en (negrita y cursiva) habla sobre Nathaniel, pero ella no se atreve a llamarlo por su nombre, ni siquiera en su cabeza. 

***

Tras entregarle su regalo, me puse más nerviosa aún porque él no había reaccionado. 

Sé que no hay pizca de sentimientos en este hombre la mayor parte del tiempo pero me esperaba al menos una reacción, cualquier cosa, no esperaba ni un gracias y mucho menos una sonrisa pero al menos que asintiera...que dijera algo. 

- ¿Ahora entiendes lo que vivo todos los días? - pregunto desesperada a David. Este sonríe y pasa su mano por mi cabello colocando un mechón detrás de mi oreja. 

- Sigo sin entender, Ainhoa. Pero bueno, ¿qué tal si dejas de pensarlo un rato? - replica. Miro al suelo y niego con la cabeza 

- Ojalá fuera tan fácil - murmuro. 

- ¿Que te parece irnos por allí? - propone emocionado. Le miro extrañada y este continúa sonriendo. 

- Tenemos aún dos clases, David - respondo. Nunca pensé que David propusiera escaparnos del colegio. 

- Da igual - alza los hombros restandole importancia - pero decide rápido, porque dentro de poco la directora volverá a su despacho y si lo hace no tenemos oportunidad de escaquearnos - ¿nos vamos? - cuestiona de nuevo. 

Le miro indecisa...no quiero faltar pero me vendría muy muy bien olvidarme un poco del tema.  

Asiento tímida y este agarra mi mano. Le miro sorprendida y me guiñe un ojo. Siento mis mejillas sonrojarse. 

Salimos corriendo del patio, subimos las escaleras del edificio, atravesamos por delante del despacho de la directora, cruzamos la secretaría y cuando la mujer dejó su puesto para ir al servicio, aprovechamos para salir a la calle. Nos llevamos nuestras cosas con nosotros ya que gracias a Dios se nos había ocurrido bajarlas al patio. 

Comenzamos a reír como locos y cruzamos la calle a toda velocidad. Nos dio tiempo a coger el autobús antes de que este se marchara. Ya estábamos camino al centro de la ciudad.  

- Esto ha sido genial - grito emocionada y él sonríe de nuevo. 

Continuamos charlando durante el viaje. Nos bajamos en el centro de la ciudad. 

- ¿ A dónde quieres ir? - pregunta. Ambos seguíamos emocionados aunque creo que David era el que más lo estaba. 

- A dónde quieras - respondo.- Cualquier lugar está bien . 

Este decide dar un paseo por aquella calle repleta de tiendas, bares y restaurantes. 

Me detengo ante un mostrador, al otro lado había un precioso vestido de color rosa palo, apretado hasta la cintura y suelto a partir de allí. 

- Te quedaría genial - murmura David a mi lado. Lo miro y él hace lo mismo, su cara se está volviendo del color de las fresas. Me alejo un poco y él también.

- ¿Qué dices? Yo creo que me quedaría fatal - replico tratando de eliminar aquel silencio. 

- Veamos quién tiene razón - musita y agarra mi brazo forzándome a entrar en aquella tienda. 

- ¿Eh? - pregunto y ríe. 

- Pruébate el vestido  - contesta este. Decido hacerle caso, quería evitarlo por unos momentos pues lo de antes había sido demasiado extraño.

FALL INTO OBSESSION: sixteen of shyness (+18) español.Where stories live. Discover now