FALL INTO OBSESSION: sixteen of shyness (+18) español.

26.

***NARRA NATE***

La mañana llega pronto, demasiado pronto para mi. A las seis y media suena mi alarma y extiendo el brazo para apagarla. Suelto la cintura de Ainhoa y me pongo de pie, sin decir ni una palabra. Seguramente ella esté despierta también, la verdad es que no me paro a comprobarlo. Ella tampoco se mueve. Agarro la toalla del suelo y me adentro en el baño. Dejo la toalla en la cesta de ropa sucia y me meto bajo el chorro de agua. Unos minutos después salgo, me tapo el cuerpo con una toalla y agarro el cepillo de dientes. Tras concluir aquello me seco el cabello y salgo del baño. No presto atención a lo que Ainhoa está haciendo, simplemente me adentro en el vestidor. Tras colocarme un traje gris, una camisa blanca y unos zapatos negros con una corbata del mismo color, salgo. 

- Lo siento. - murmura Ainhoa al verme - De verdad que lo siento. 

- Un lo siento no arreglará este desastre. - replico algo cortante.

 Ella tiene que aprender que necesita límites. Todos los necesitamos. 

- Lo sé. - replica sincera - Pero quiero disculparme. - expone y yo niego con la cabeza. 

- Hablaremos de esto en otro lugar y desde luego en otro momento - expongo mirando el reloj. Linda y Nora ya deben de estar aquí, al igual que Carter. 

- Entendido - replica. Suspiro, vuelvo a mirar el reloj. 

- A desayunar, ahora mismo. - ordeno y de inmediato se pone de pie. 

Bajamos las escaleras en silencio y desayunamos de la misma manera. 

- Quiero que te comportes bien. - aviso antes de salir de casa - Ni una sola tontería más. - La regaño y ella asiente. 

- Vale - afirma

Salgo de casa y subo al coche. Carter arranca y al poco tiempo ya estábamos camino a las oficinas. 

- Al final solo fue un susto. - expone el chico de repente, sacándome de mis pensamientos. 

- ¿Perdón? - replico algo cortante, supongo que es por haber dormido tan poco. 

- Mi novia - responde él con un tono relajado, sin tener en cuenta mi tono - no está embarazada. - dice al fin y yo sonrío. 

- Genial. - digo con alegría

- Sí, la verdad es que sí. - explica y justo en ese momento aparca el coche. - Estamos aquí. - anuncia y se baja del coche para abrirme la puerta. 

- Enhorabuena por no ser padre. - digo riendo y golpeo su brazo suavemente. Este ríe. 

- Gracias, supongo - replica y ambos reímos de nuevo.

Agarro mi maletín y me dirijo a las oficinas. Me subo al ascensor y bajo cuando este se detiene en mi piso. Al ver a mi secretaria agobiada y corriendo hacía mi sé que mi día de trabajo ha comenzado oficialmente. 

***

- ¿Qué tal el trabajo? - cuestiona Ainhoa desde el otro lado de la mesa. 

- Estresante. - respondo algo cortante. 

Ambos estamos cenando en lados opuestos de la mesa. Ainhoa está buscando dar tema de conversación pero lo único que hago es cortarla siempre. Linda y Nora están a escasos metros, lo que me impide a mí pasarme y a ella estallar.

- ¿Algún nuevo caso? - cuestiona y niego con la cabeza. 

- Nada interesante. 

- ¿Qué pasó con el hombre del otro día? - pregunta y mi mente de inmediato se centra en Isaac.