Capítulo N° 25

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***Cambios, mentiras y una carta***

ATENCIÓN! - Lauren saltó de su asiento cuando su instructor de francés golpeó una barra métrica de madera sobre su libro, haciendo un fuerte ruido. Le miró, cogiéndola distraída. Empezó este de nuevo con las clases, pero unos segundos más tarde, empezó de nuevo Lauren a distraerse. Pronto se perdió en sus pensamientos sobre aquel beso repentino, que terminó demasiado rápido, dejándola con ganas de más. Lauren, no se había podido enfocar durante todo el día. Todas sus lecciones se veían afectadas negativamente. No podía creer lo afortunada que era de que Camila le dijera que también la amaba. Cuando Becky le habló sobre los supuestos sentimientos que Austin albergaba hacia la castaña, estaba dispuesta a abandonar toda esperanza.

Reía mucho mientras el maestro continuaba su clase, algo que ocasionó el descontento del hombre. No lo escuchaba en absoluto. Éste movió sus manos, golpeando sus brazos contra sus caderas como símbolo de derrota. No podía dejar la clase a mitad de camino, el Duque podía echarlo del país. Así que continuó enseñando a Lauren, que le prestaba tanta atención como una de las estatuas de mármol en la sala.

Cuando terminó su lección, Lauren abandonó la sala adaptada para ver sus clases, ignorando a su madre por completo. Clara le echó una mirada desaprobatoria. El instructor de francés se acercó hasta la Duquesa, limpiando algunas gotitas de sudor en su frente. Su rostro estaba rojo por la frustración.

- Por favor, perdonadme alteza, si hablo deliberadamente. La señorita Lauren no ha estado atenta a la lección.

- Lo sé - Clara contestó fríamente - Tendréis que disculparla por ahora.

- Tal vez su alteza, si habla con ella... - El instructor de francés sugirió.

- Lo intentaré - Ella dijo - Puede marcharse - El instructor saludó respetuosamente y reunió todas sus cosas.

La Duquesa saludó a un siervo haciendo que este llegara rápidamente hasta donde se encontraba Clara sentada.

- Si alguno de los otros instructores llega, informadle, que se cancelan todas las lecciones por hoy. No aprenderá nada, no en su estado - La chica de servicio respondió con un rápido.

- Sí, su excelencia - y se apresuró para despedir al instructor de música de Lauren.

La duquesa frunció los labios. Esta no haría nada. No aún.

Michael estaba en su habitación siendo vestido por sus siervos cuando Clara llegó repentinamente, haciendo que su marido pestañeara varias veces como respuesta por la repentina sorpresa. Normalmente ella desaparecía la mayor parte del día.

- Debes hablar con tu hija - Clara ordenó. Michael agitó su mano y todos los sirvientes desaparecieron, cerrando la puerta detrás de él - Se está arruinando a si misma.

- ¿Qué ha hecho? - Michael preguntó - No oí ningún grito allá abajo, así que supongo que no ha matado a nadie.

- No es el momento para una de tus bromas! - gritó enojada - Tu hija está poniendo en peligro sus posibilidades de casarse con el príncipe.

- ¿Cómo? - Michael caminó fuera de la plataforma que usaba para fundarse sus trajes y se enfrentó a su esposa.

- Ella está enamor... enamorada de otra persona - Clara soltó. Michael parpadeó otra vez en estado de shock, pero luego se le escapó una sonrisa. Clara apretó sus labios en señal de repugnancia -¿Estas feliz por eso?

- Lo asumí, como mucho - El Duque contestó. Esta vez fue el turno de Clara de mirarlo de una forma desconcertada.

- ¿Lo sabías? - preguntó - Entonces debes saber que no es adecuado para ella...

Una Caja Musical me Llevo a TiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora