Daddy Please! © |njh|

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Maratón 2/2
Mila

Mamá:
No espero que lo entiendas, tampoco te pido que lo comprendas, tan solo te pido que sigas adelante...

Encendí la canilla del lavamanos y alce mi vista al espejo.

Lamento haber sido una decepción para ti, tú no merecías tener una hija como yo. Nadie merece tener un hijo como yo...

Abrí el botiquín y saque varios frascos de píldoras, espere que el vaso se llenará con agua mientras fijaba mi mirada en aquel monstruo frente a mí. Mi reflejo.

Lamento haber sido la causa por la cual papá te dejó, tan solo mi existencia arruina vidas...

— ¿Mila? —La voz de Harry retumbaba por el pasillo de la casa.
Hice caso omiso a mi primo y abrí el frasco, las pastillas de colores parecían darme esperanza. Esperanzas de sanar todo mi dolor.

Lamento haber sido la culpable de que te quedases hasta altas horas trabajando con tal de ganar dinero para cumplir mis caprichos los cuales jamás merecí... tú no merecías eso mamá, tu no debías hacer eso por mi cuando yo fui tan solo una carga que no merecías...

— ¿Mila? —Los golpes en la puerta resonaban en el baño al compás del agua que comenzaba a rebalsar del vaso.

Tome el mismo y me senté en el suelo con aquel puñado de píldoras en la otra mano.

Se feliz mama, lo mereces, tú, Harry, Jessie, todos merecen ser felices, y lo serán. Serán felices porque ya no tendrán que cargar con algo que jamás debía existir. Yo.

Abrí la boca y coloque todas las pastillas, acerqué el agua a mi boca y comencé a tragar. Una por una hasta acabar con las 6 pastillas. Dejé el vaso a un lado y tomé la hoja del sacapuntas que había roto.

Has sido una de las pocas personas que me mantenían en este mundo, has sido la mejor madre de este maldito y horrible mundo.

No te culpes mama, nada de esto me fue tu culpa, tú me has dicho que todos tenemos un propósito en la vida. Y lo halle mamá, halle mi propósito, pero no me gusta... No me gusta tener que estar aquí, en esta vida, para sufrir.

— ¡MILA! ¡MILA ABRE LA PUERTA! —los golpes comenzaban a resonar casa vez más fuerte.

Remangue mis mangas y mire mis brazos, la piel se veía demasiado blanco y creí que era momento de cumplir el objetivo de mi vida, sufrir.

Tal vez dirán que soy egoísta, tal vez me criticaran pero oye... Ya no estaré para oírlos. No tendrás que ir al colegio para hablar con los profesores, ya no tendrás que preocuparte por mi mama, ya no más.

— ¡MILA! ¡HABRÉ LA MALDITA PUERTA! —Los golpes se oían cada vez más lejos, tenía toda mi concentración en mi agujero negro, en aquel agujero al que llamaba vida.

—Harry... ¿Qué sucede? —la voz de mi madre se escuchó levemente.

— ¡MILA NO QUIERE SALIR! ¡NO ABRE LA PUERTA!

— ¡Mila! ¡Mila soy tu madre, habré la puerta!

No lo hago por Niall, no. Él no tiene la culpa de que yo sea una maldita idiota. No lo odien, el merece ser feliz, el no merece odio, el tan solo hizo lo correcto, porque... ¿Por qué alguien como él se enamoraría de alguien como yo? Era demasiado bueno para ser verdad...

El agua del lavamanos comenzaba a rebalsar y comenzaba a inundar el baño, yéndose por el pequeño agujero de la puerta.

— ¿QUE DEMONIOS...? Es agua... —Los golpes comenzaron a ser más fuerte, ya no eran dos manos, eran cuatro.

— ¡MILA! ¡MILA HIJA ABRE POR FAVOR!

Charlotte y Sheila tenían razón, mi destino es estar sola y jamás ser amada... Tal vez en la otra vida, pueda cumplir aquella meta si es que existe la otra vida.

— ¡MILA MALDICIÓN!

—Traeré el hacha—Los pasos de Harry se oían tan lejos. —Me sentía cansada, las pastillas comenzaban a hacer efecto, aunque no sabía qué clase de pastillas eran.

No es culpa de nadie mama, cuídate mucho, se muy feliz y jamás olvides que...

Te amo mama.

El primer corte ocurrió y las gotas de sangre comenzaron a brotar.

Por mi papá...

— ¡MILA HIJA POR FAVOR!

— ¡A UN LADO TÍA!

Por la gente que me odia...

Golpe tras golpe la madera comenzaba a romperse y la sangre comenzaba a mezclase con el agua.

Por la felicidad mi familia...

— ¡HARRY! ¡HAY SANGRE! ¡MILA POR FAVOR! ¡CONTÉSTAME!

Y el último es por ti, Niall.

— ¡MILA! —El llanto de mi mama se oía tan lejos— ¡HIJA MÍRAME! —me tomó de las mejillas para mirarla. — ¡MILA! ¡HIJA! ¡QUÉDATE CONMIGO! ¡POR FAVOR AMOR QUÉDATE CON MAMA! —me aplastó contra su pecho en llanto.

— ¡HOLA! ¡EMERGENCIA! ¡UNA AMBULANCIA AHORA POR FAVOR! ¡MI PRIMA SE ESTÁ DESANGRANDO! ¡AYUDA POR FAVOR! CALLE HOMWEL 581 ¡RÁPIDO POR FAVOR!

—Lo siento mama... —Mi voz se oía casi como un susurro. — pero ahora... Seré feliz. —sonreí levemente y mis ojos comenzaban a cerrarse.

— ¡NO MILA! ¡NO HIJA POR FAVOR!

— ¡RÁPIDO AL HOSPITAL! ¡MILA! ¡MILA QUÉDATE CON NOSOTROS!

Los brazos de Harry me cargaron pero ya no sentina nada.

La oscuridad.

Tanto miedo le había tendió de pequeña, tantas lágrimas había derramó por su culpa, y en aquel momento era lo mejor que me había pasado, era mi futuro.

La fría e infinita oscuridad.

En ella lo vi, sus ojos azules, su sonrisa, su cabello, su manera de enamorarme.

"Toma mi mano hermosa, seamos felices juntos"

Sonreí, claro que iría, iría allí, a la luz blanca al final de la oscuridad. Donde no existe el dolor, donde no sientes nada, donde todo acaba. Allí, donde las personas dejas a un lado todo los dolores y solo sienten paz.

Allí voy Ni...

Seguramente me quieren matar, y los entiendo, pero alto ahí. ✋

Te traje un capítulo extra ❤️