Daddy Please! © |njh|

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Mila

—Mila... Mila por favor... —Niall se me intento acercar, pero mi padre se interpuso.

—No quiero que te acerques a mi hija, ya le has hecho mucho daño.

—Mila, no entiendes, yo no quiero dejarte. Yo...

—No es lo que dijiste con Harry. —Lo enfrente. — ¿Por qué sigues insistiendo? ¿Acaso te aterra quedarte sin tu maldita puta?—Hable con odio y dolor en mis palabras.

—No Mila, Niall tiene razón. —Harry por primera vez lo defendía. -Sólo escúchalo.

—Mila— El suspiró y se acercó a mí— no quería dejarte, en verdad eres lo que más amo, pero... Lo arruine, si seguía contigo, tu madre te perdería, no podía permitir que te alejaran de ella, se cuánto significa para ti. Si terminaba contigo, tenían oportunidad de ganar el caso y tú no tener que irte a Italia.

— ¿Ibas...? ¿A dejarme....? ¿Para qué no me valla a Italia? —El asintió levemente. —Pero tú... Tú actuabas raro conmigo.

—Necesitaba que me odies, no fue la mejor opción, tenía miedo, no quería cometer más errores y que perdieran el caso por mi culpa. -Sus ojos parecían decir la verdad pero estaba demasiado confundida.

— ¡Mira lo que causas! —Mi madre se enfrentó a mi padre.— ¡Casi separas a lo único que hace feliz a nuestra hija!

—¡El solo la está manipulando! ¡Por dios! ¡Seguramente es todo un complot! ¡Mila no merece estar con alguien tan necia como tú! ¿Cómo permites que nuestra hija esté con un hombre mayor?

— ¡YA BASTA! —Me interpuse—¡Alto!—Los mire a ambos— ¡No quiero oírlos a ninguno de los dos! -Ellos abrieron los ojos de par en par.

Los mire a ambos y suspire, me acerque a Niall y el acaricio mi mejilla.

—Lamento haberte engañado, me duele tanto saber que te iras. —Pude ver como sus lágrimas recorrían sus mejillas.

Me pare de puntitas y abrazando su cuello unido nuestros labios, el me correspondió con gusto y me aferro a su cuerpo. Se sentía bien volver a sentirse completa.

—Te amo... —Susurre mirando sus ojos.

—Yo también te amo Mila. —Sus ojos brillaban como nunca. —Y es por eso que debes irte...

—Ni...

—No quiero hacerte más daño hermosa, lo eres todo para mí, y desde que estamos juntos tan solo nos hacemos daño. —Mis ojos se llenaron de lágrimas que no tardaron en salir. —Sé que serás feliz sin mi Mila.

—No... No por favor...

—Te amo con mi vida Mila, y es por eso que rompo contigo. —Ambos sollozábamos en los brazos del otro.

—No Niall, por favor no lo hagas... No puedes...

—Solo quiero que seas feliz.

— ¡No seré feliz sin ti!—no podía creer lo que estaba sucediendo en verdad.

—Jamás dejaras de ser mía hermosa. Y yo jamás dejaré de ser tuyo. —Me aferro a su cuerpo en un gran abrazo el cual correspondí.

Dolía tanto, nos estábamos separando, me estaba dejando, ardía más que cualquier cosa. Mire sus ojos empapados en lágrimas, el me soltó poco a poco y comenzó a alejarse.

—Niall... Niall... No lo hagas... —El comenzó a retroceder y corrió en llanto. — ¡NIALL!— Quise seguirlo pero Harry me detuvo. — ¡NO! ¡DÉJAME! DÉJAME.... Por favor.... ¡NIALL! —caí al suelo en llanto, Harry me aferro a su pecho y me envolvió en sus brazos.

—Tranquila Mila, por favor... Cálmate...

Mi respiración estaba demasiado acelerada, mi pecho ardía como jamás lo había hecho, sentía que el aire no ingresaba a mi cuerpo, me sentía caer en un profundo dolor.

El dolor que solo puede causar el amor...

Niall

No quería estar allí cuando ella se fuera, no quería bajar a despedirla porque sabía que no podría soltarla. La había dejado porque sabía que si seguía junto a ella, no solo su padre se opondría, aún la seguiría dañando.

Nuestro destino no estaba hecho para estar juntos, dolía demasiado saber que no podía estar junto a la persona que más amaba. No quería dañarla y por eso la dejé ir.

En ese momento había comprendido el significado de aquella frase célebre.

"Si amas algo, déjalo ir..."

Debía dejarla ir, y así fue. Mire por la ventana y la vi junto a su madre y Harry. Estaban por regresar a Londres, mi madre las despedía con un fuerte abrazo, pues habían forjado una gran relación.

Mila giro su cabeza hacia mi ventana y me miró fijamente, su mirada rompía mi corazón a cada segundo, en mi mano tenía el collar que le había regalado y lo apreté contra mí pecho. Ella bajo su mirada y sin nada más que hacer subió al auto.

Mi madre las despedía sacudiendo su mano de un lado al otro, el auto se alejaba a paso lento al igual que mi corazón se desintegraba a cada segundo.

Di un gran suspiro y caí al suelo, me apoye contra la pared de mi habitación abrazando mis piernas, sollozando entre ellas.

Ardía, como la llama más fuerte que el sol pueda crear. Dolía, como una gran herida expuesta. Sufría, como jamás había sufrido por un amor.

Mi mente me hundía más en mis recuerdos y poco a poco caía en cuenta de que Mila lo era todo para mí. Y al no tenerla, sentía que mi vida no tenía sentido alguno.

Me sentía inútil, sin fuerza alguna, me sentía un ente vacío, me sentía un muerto en vida.

— ¿Niall? —Levante mi cabeza para hallarme con la mirada preocupada de mi madre. —Oh Niall... —Ella se acercó a mí y se arrodillo para quedar a mi estatura. —Mi niño. —Me abrazo con fuerza y solloce aún más.

—La deje ir mama... La deje ir... —Ella acariciaba con suavidad mi cabello e intentaba calmar mi dolor, pero nada lo detendría.

—En algún momento, la vida, los volverá a unir hijo, todo sucede por algo. —la mire a los ojos y ella seco mis lágrimas —Confía en mi bebé. —Agache nuevamente mi cabeza y ella me aferro a su pecho.

Me sentía como un niño pequeño al cual le había arrebatado su bicicleta y lo habían lastimado.

No importa cuán fuerte seas, o cuantos golpes te des, el perder a la persona que amas es el mayor de los dolores que pueda existir.

Esa canción siempre me hace llorar 😭😭😭
#SadTime

No me maten
Ya entenderán todo.

❤️Los amo❤️