Daddy Please! © |njh|

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Maratón 1/2
Mila

— ¡MAMA! —Niall inmediatamente me envolvió con sus brazos cubriéndome mis partes de la mirada de su madre.

—Lo siento, en verdad no creí que... La mama de Mila la está... Mejor me voy. —Comenzó a cerrar la puerta y la voz de mi madre resonó detrás.

— ¿Mila está aquí?

—En... ella... —La madre de Niall intento cubrirnos pero la mirada de mi madre se pegó a mí.

— ¿QUÉ DEMONIOS? ¡MILA ALEXANDRA COPPER!

—Demonios... —Susurre avergonzada. —Mama... Yo...

— ¡VÍSTETE EN ESTE INSTANTE! —Nos miró con furia. — ¡EN CINCO MINUTOS TE QUIERO ABAJO! ¡TÚ Y YO HABLAREMOS SERIAMENTE JOVENCITA! —la puerta se cerró con fuerza y mire a Niall aterrada y avergonzada.

—Dios... Tengo miedo Ni. —Lo miré asustada.

—Tranquila amor, tal vez sea bueno. ¿Has ido a ginecólogo? —Negué levemente. —Seguramente este preocupada por ello. —Beso mi mejilla —No dejaré que nos separen.

—Te amo Ni. —Frote nuestras narices y él sonrió.

Me levanté con cuidado sacando su miembro de mí y comencé a buscar mis prendas al igual que él.

Me abrazó por la espalda y beso mi cabello, tenía mucho miedo, no quería que mi madre pensara mal.

—Vamos princesa, todo estará bien. —Me dio el último aliento y asentí.

Salimos de la habitación a paso lento y vi a mi madre cruzada de brazos mirándome.

La mama de Niall estaba a su lado avergonzada al igual que yo.

—Niall, hijo, ¿Podrías acompañarme? —Niall asintió y me miro, beso mi cabeza y se retiró junto a su madre.

Mi madre me miraba con enojo, e incluso podría decir que decepción también.

Me acerque a ella sin soltar la mirada, tenía mucho miedo de sus palabras.

—Mama... Yo...

— ¿Fue tu primera vez? —Trague saliva y negué en forma de rendición. No valía la pena mentirle. — ¿Cuándo fue?

—El día de mi cumpleaños... —Hablé en un susurro.

— ¿EL DÍA DE TU CUMPLEAÑOS? —Apreté mis ojos y mis puños asustada por su grito, no pude evitar sollozar. —El día de tu... Dios Mila, hija. —me aterraba mi madre, estaba tan asustada. Oí su suspiro y me abrazo. —No llores.

—Lo siento... —susurre apoyada contra su pecho —En verdad lo siento. —Ella acariciaba mi cabello. —Sé que te decepcione pero no me separes de él por favor. —Supliqué mirando sus ojos.

—No voy a separarte de él. —Seco mis lágrimas —Solo voy a pedir un turno para llevarte al ginecólogo. Debes examinarte.

—No quiero —susurre asustada.

—No lo hubieses hecho, ahora quieras o no iras. —me separe de ella y sé que mis lágrimas.

— ¿No me alejaras de Niall? —Ella negó.

—No voy a separarte de él, ambos se necesitan. Aunque... Pronto regresaremos a Londres y Niall debe regresar al trabajo. ¿Qué piensan hacer?

—Aún no le he dicho. —Suspire —no quiero alejarme de él mama, no quiero dañarlo.

—Tendrá a Louis, podrán hablarse por Internet. —intento animarme.

—Louis... Louis se irá a vivir a Londres. —La miré preocupada. —Estará cerca de Harry en un departamento. —Ella hizo una mueca.

—Debes pensar seriamente lo que harás, una relación a distancia tiene su pro y contras, solo te pido que elijas lo que te haga feliz. No quiero verte sufrir. —Me abrazó con fuerza.

—Gracias mamá...

—Iré a llamar al ginecólogo. —Habló separándose de mí y caminando a la sala.

— ¡NO! ¡MAMA! ¡VUELVE AQUÍ!...

(...)

— ¿Qué te dijo? —Niall me abrazo y le correspondí con gusto. Amaba estar entre sus brazos.

—Tengo que ir al doctor para chequear que todo esté bien. —El asintió. — ¿Y tú madre?

—Me dijo que use protección y que te cuide, claro que primero me reto porque tú eres pequeña y dijo que no quiere que te robe la inocencia.

—Creo que tu mama no me conoce. —Hablé riendo, el sonrió y se sentó en la silla del escritorio de la habitación. — Si supiese como te conocí. —me acerqué y abracé su cuello.

—Mi pequeña babygirl, me vuelves loco. —roso nuestras narices. — Así que... ¿Alexandra?

—No me gusta —me cruce de brazos y el rió. —Odio mi segundo nombre.

—Podría decirte Alex, la leona. —Rio y yo lo mire seria. —No te enojes. —me apego a su cuerpo y lleno mi rostro de besos. —Te amo leoncita. —mordí mi labio y bese su nariz.

—Yo te amo mucho más duende. —ambos sonreímos.

La puerta se abrió y Louis nos miró.

—Me enteré que los cacharon, Niall, lamento la pérdida de tu pija. —Hablo fingiendo llorar y yo reí.

—Cállate tonto, aún la conservo. —Se quejó. —Nadie cortara a Willy.

— ¿Por qué los hombres le ponen nombre a sus miembros? —Los mire y ambos se encogieron de hombros.

—No lo sé. Debo decirles...

—Oigan ¿Quieren ir al parque? —Hablo Harry empujando a Louis al suelo y entrando muy emocionado. Ambos nos miramos y asentimos. — ¡GENIAL! en... ¿Han visto a Louis?

— ¡QUÍTATE DE ENCIMA JIRAFON! —Louis se retorcía bajo los pies de Harry.

—Oh Lou—todos reímos —Lo siento bebe, no te vi. —Lo ayudo a levantarse —es que estas muy cerca del suelo.

—Y tu estas muy cerca de que te corte las piernas. Jirafa. —Habló Louis enfadado. Niall y yo no podíamos dejar de reír, eran un par de tontos.

Luego de alistarnos, todos fuimos al parque, mi mama y la madre de Niall se llevaban súper bien, Harry molestaba a Louis por su estatura y Niall me llevaba en su espalda.

Llegamos al parque y luego de pedir un helado nos sentamos en el césped, el día era increíble.

— ¿Verdad o reto? —Hable mirando a Louis.

—Verdad. —Respondió Louis.

— ¿Eres Tops?—Alce la ceja intrigada.

—Si —Habló orgulloso.

— ¡LO SABÍA! —Miré a Niall— Me debes 20 dólares.

— ¡Demonios! —Se quejó y saco su billetera — ¿Cómo el enano puede ser Tops? —Hablo dándome el dinero.

—Siguiente pregunta. —Habló Harry sonrojado.

— ¿Verdad o...? —Niall se detuvo al oír los gritos de mi madre, todos la miramos y la vi hablando con un hombre.

— ¡NO DEJARÉ QUE TE ACERQUES A ELLA!— todos nos miramos intrigados y corrimos a ver que sucedía.

—Mama, ¿Qué sucede? —la miré y mire al hombre frente a ella. — ¿Quién es él?

—Ardillita... —Habló el hombre intentando abrazarme pero mi madre me aferro a ella.

— ¡No Tiene derecho a decirle así! —Hablo molesta.

— ¿Ardillita? —Hablé intrigada. Miré a aquel hombre y poco a poco sentí un gran peso caer sobre mí. —No... Tú no...

—Hola hija...

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