Donde las personas aún piensan que los omegas deben ser perfectos y sumisos, solamente útiles para procrear.
O donde Jimin nunca, pero nunca, piensa ser un maldito Omega sumiso.
Yoongi... Yoongi jamás estuvo en sus planes.
-omegaverse
-comedia ro...
Yoongi camina con pasos apresurados por todo el lugar, está tratando de encontrar de dónde proviene el maravilloso olor de su mate. Mientras más se impacienta, el perfecto olor va desapareciendo como si el dueño estuviera alejándose.
No, definitivamente no iba a perder ese dulce olor.
Importándole poco la muchedumbre que le sigue el paso. Busca en los grandes comedores, baños, salones. Incluso en la dirección y el gigantesco jardín.
Y al final no hay ni rastro del ser que tenía maravillado con su olor al alfa, ahora solo podía distinguir a duras penas el tenue olor que más que nada, se ha quedado grabado en su memoria y corazón, con desesperación pasa las manos por su cabello.
— ¿Me dirás que estamos buscando? — Un exhausto Jackson pregunta con sus manos apoyadas en sus rodillas, perseguir al alfa no era un trabajo fácil. Mucho menos si detrás tenían un montón de omegas que parecían poder comérselos.
Yoongi había estado corriendo como un lunático por todo el lugar, llevaban yendo de aquí para allá, como por mil años según el castaño y juraba que si no paraban, moriría de un paro cardiaco o alguna de esas cosas.
— A mi destinado.
Sin esperar aquella respuesta, escupe el líquido que apenas había podido obtener después de tanta carrera.
— ¿¡Tu qué!?
Yoongi hace una mueca y pasa la mano por su mejilla donde salpicó la bebida del chico.
—Que puto asco.
El beta toma de los hombros al alfa y lo sacude con una mirada llena de emoción — ¿Sabes cuánto mejora todo esto? ¡Ya no tendremos que quedarnos aquí! ¡Podré volver a casa con Mark! Maravilloso, maravilloso.
La emoción del chico hace sonreír al alfa, más pronto la culpa se apodera de sus sentidos.
— Uhm, sí. Sobre eso, hay un pequeño, pequeñísimo problema. —Yoongi sonríe de medio lado, mientras que muestra su pulgar e índice juntos.
Jackson rápidamente sale de su burbuja de emoción y lo mira inquisitivo.
— ¿Qué tipo de problema?
— Bueno, probablemente no sé exactamente quién es, perdí su olor.
El alfa rasca su nuca con culpabilidad y pronto tiene al beta una vez más robando su espacio vital.
— ¿¡Que tú qué!?
— Eso, así que querido Jackson, me temo que no volveremos hasta que lo encuentre. –Yoongi sonríe y se encoge de hombros desinteresado por la molestia de su amigo.
— Me lleva la que me trajo — Un quejido de molestia escapa del menor.
— Tú nos trajiste... —El alfa habla con burla.
Jackson solo rueda sus ojos.
¿Este tipo en serio era su jefe?
— Vamos a buscarlo, lo encontraras y nos vamos de aquí.
El pelimenta ríe divertido, más en sus adentros espera poder encontrar al dueño de tan apetecible olor.
Quiere encontrar a su otra mitad.
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