¤20¤

10.6K 1.6K 301
                                    

En este punto, Jackson pensaba que esto sólo era un capricho del Alfa.

Con un suspiro de resignación, tan solo le queda seguir con toda esa tontería como si de verdad los fuera a llevar a algún lado. Y es que, Yoongi era tan, pero tan especial.

— ¿Estás consciente del poco tiempo que tenemos? — El castaño pregunta cuando nota que están muy cerca de su destino, de verdad que no entendía al alfa.

— Ah, querido Jackie chan... ¿Cómo podría Jimin resistirse a mis encantos?

Suelta Yoongi con suficiencia y entonces toca a la puerta con su mano hecha puño, un minuto después se abre. El chico pelinegro observa al alfa y beta frente suyo, sus ojos les recorren de arriba a abajo y entonces, la puerta es estampada en el rostro del alfa, que se echa atrás tapando su nariz a causa del dolor. 

Y Jackson una vez más, solo atina a reír con fuerza, para luego anunciarle a su amigo y jefe que todo eso era una pérdida de tiempo, así que iría a llamar al bonito novio que lo esperaba en casa. Le da unas palmaditas como consuelo y se aleja, no quiere estar presente en el próximo rechazo, es demasiado humillante luego de ser ignorado durante dos días. 

Más Yoongi no se rinde y aún con su nariz un tanto roja, vuelve a tocar aquella puerta que esconde al chico de sus sueños, anhelos y todo eso.

Un molesto Jimin abre y suspira cansino, nota que el Beta se fue, y es peor aún, ahora está solo con el cabeza de brócoli desteñido. Cruza sus brazos y planta en su rostro una mirada de repudio total, tan ácida que podría hacer temblar a cualquiera.

Pero para Yoongi se ve tan hermoso, hay fuego en su mirada, pero Yoongi solo siente que es la mirada más cálida que ha visto jamás.

— ¿Qué necesitas? — Pregunta tosco.

El Omega tan sólo quiere que se vaya pronto, él y su horrible olor que le marea.

Oh, Yoon. Quédate. 

¿Quién diablos es Yoon? 

Cuando escucha la voz del alfa, decide ignorar a su lobo por ahora.

— Bueno, vine en busca de alguien. —Una bella sonrisa adorna los rosado labios de Yoongi, el brillo emocionado en sus ojos no pasa desapercibido para el menor.

Era un alfa extraño, sin duda. 

—¿Tú muñeca de aparador? — Alza una ceja cuestionante.

— ¿Disculpa?

Yoongi observa confundido al pelinegro.

Él no quería una muñeca, estaba bien que no quisiera casarse con una omega común, pero en sus épocas de calor nunca le hizo falta llegar a tener que utilizar algo así.

¿Por qué Jimin mencionaba algo así?  

Eres tan estúpido, realmente. 

Yoongi no le toma importancia, está acostumbrado a cierto desprecio de parte de su lobo. 

—Tú sabes... Este es un internado y los chismes no son muy frecuentes, todos saben a qué vienes, Yunyi.

Jimin rueda sus ojos una vez más, mientras dentro de sí reprende una y otra vez a su lobo, por hacerlo sentir tan inquieto por tener al alfa frente suyo. 

Deja de repetir Yoon una y otra vez, joder Chim.

Su lobo lo está exasperando y justo ahora no necesita distraerse, eso le daría ventaja a Min. 

— ¿Y a qué vengo? —Yoongi pregunta, ignorando el extraño nombre por el que fue llamado.

Se llamaba Yoongi, no Yunyi. 

Haway //Yoonmin//Where stories live. Discover now