1.- Todo termina.

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Mientras Lysandro, Kim y Rosalya jalaban al pelinegro con todas sus fuerzas, él volvió a cruzar su mirada con el delegado, Nathaniel estaba desconcertado, Castiel solo enojado.
El pelinegro se soltó de un golpe brusco de sus amigos.

Suspiró varias veces mientras se tensaba.

Observó por ultima vez los ojos del rubio, que lo observaba triste.

-Castiel...

-¡Te vuelves a acercar a Debrah y te mato!- El pelinegro salió a paso rápido de la sala.

Nathaniel suspiró en el suelo, Kim salió enseguida, mientras que Rosalya se acercó al delegado y Lysandro le tendió la mano para ayudarlo a levantarse.

Nathaniel la tomó y se levantó como pudo.

-¿Quieres que te lleve a la enfermería?- Preguntó el albino.

-No... Y-Yo...- Nathaniel tosió nervioso intentando deshacer el nudo en su garganta.- Solo necesito aire.

-Nathaniel, te llevaremos a la enfermería.- Rosalya habló, observaba seria al delegado.

-Enserio... e-estoy bien...- El rubio solo imploraba por que se fueran.

-No pregunté si estás bien.

-Rosa...- Lysandro le llamó la atención.- Si el no quiere, no puedes obligarlo.

La chica volteo los ojos.

-Gracias por la preocupación Rosa, primero alzaré aquí y luego iré a la enfermería, pero ustedes deberían irse a clase.

-¿Seguro?

El rubio asintió.

Los dos amigos salieron, Nathaniel caminó a la puerta y colocó el pasador.

Caminó recargándose en las paredes y se dejó caer en una silla. Su cara punzaba. Se pasó la mano por la nariz y la observó, salía sangre.

Suspiró intentando calmarse, todo había pasado muy rápido.

Flashback.

El delegado suspiró mientras observaba Debrah, la pobre, estaba pálida. Nathaniel la había atrapado hablando por teléfono, mientras intentaba persuadir al mánager de botar a Castiel.

-Delegadito... - La castaña forzó una sonrisa.

Nathaniel sonrió, la idea de que Castiel, su mejor amigo, se alejara de Debrah de una vez, que por fin viera quien es en realidad, le causaba una felicidad enorme.

-Ni lo intentes.- El rubio se dio media vuelta y salió corriendo, Castiel había quedado de verlo en la sala de delegados. Entró, pero no vio a Castiel.

Amor en tiempos de Debrah.Where stories live. Discover now