12.- Enemigos amantes.

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Castiel le marcaba a Debrah mientras caminaba a su casa,por fin, al tercer intento, la castaña le contestó.

-¿Que pasa gatito?

-Nada de gatito, tenemos que hablar.

-¿Que?- Debrah sonó muy extrañada.

-Si, tenemos que hablar de Nathaniel.

Se escuchó un largo silencio y luego como Debrah suspiró.

-Estoy viendo unas cosas con el manager de mi vestuario, hablamos mañana en el insti. Bye gatito.

-¡No Deb..!- La castaña colgó.- ¡Maldita sea!- Castiel observó su móvil molesto.

Le marcó a Lysandro.

-¿Bueno?

-Lysandro. ¿Quieres venir a mi casa? No tengo nada que hacer.

-Si, voy en una media hora.

-¿Qué haces?

-Estoy en la cafetería con Rosalya, Nathaniel, Alexy...

-Ya entendí.

-Te veo en un rato.

-Paso por ti. Estoy cerca.

-¿Todo bien?- Lysandro preguntó.

Castiel sonaba raro.

-Si.

El pelinegro colgó.

-Perdón. Decían...- Lysandro se disculpó.

-Que apoyo el que quieras poner en su lugar a Debrah pero ¿Por qué? Hace unas horas no querías saber nada del tema.- Rosalya se cruzó de brazos.

Nathaniel suspiró.

-Solo quiero estar en paz, pero tienen razón, no pasará mientras Debrah pueda hacer lo que quiera.

-¡Si!- Sucrette sonrió. - Contra Debrah.

-¿Alguna idea?- Preguntó Alexy.

-Podemos amarrarla en el sótano hasta que diga la verdad.- Armin sonrió.

-No ayudes Armin.- Alexy volcó los ojos y Kentin lo observó divertido.

-Secuestrarla tal vez no, pero ¿Y si la obligamos a decir la verdad? Y la grabamos.- Habló Kentin.

-Suena bien.- Sucrette observó a Rosalya.- ¿No?

-Si. Pero ¿Cómo? No se fía de nadie.

El móvil de Nathaniel sonó.

Era un mensaje de su padre.

"A las 7 llego con mi jefe, quiero cena lista y todo en orden."

El rubio observó la hora. Eran las cinco treinta.

Se levantó rápidamente.

-Lo siento, tengo que irme.

-¿Ya?- Rosalya lo observó.

-Si. Lo siento.- Nathaniel tomó sus cosas.- Los veo mañana.

Salió corriendo del lugar.

-¿Por qué es tan raro a veces?- Kentin preguntó.

-No eres nada amable.- Alexy lo observó burlón.

-No, Kentin tiene razón. Actúa extraño.- Habló Sucrette.

Armin solo observó a su amigo alejarse.

-Bueno, deberíamos buscar una manera en que Debrah cuente lo que hace.- Rosalya regresó al tema de interés.

Amor en tiempos de Debrah.Where stories live. Discover now