Stay With Me || DETENTION #2

La quiero

Aún estamos en la fogata, nos la hemos pasado muy bien, pero llegó un punto en que sentí que se estaba haciendo muy tarde.

Y... Nate aún no me llama para decirme feliz cumpleaños.

Sinceramente no sé qué fue lo que hice mal, no entiendo por qué se empeña tanto en alejarme y me duele.

Me duele porque siento que no puedo estar un minuto más sin él y pareciera que él está haciendo otra vida alejado de mí.

Estaba muy segura de que iba a llamar... ¿Pero y si no lo hace? ¿Qué se supone que significa?

Especialmente me duele que mis amigos se hayan esforzado tanto en hacerme feliz hoy, cuando él, mi novio, la persona que me decía que me quería más que nadie no se haya esforzado ni la mitad que ellos, ni siquiera como para llamarme.

Eso es lo único que pido, una llamada.

¿Es mucho pedir que mi novio me llame el día de mi cumpleaños?

—Bueno—habló Valerie—Creo que ya es hora de que vayamos a dormir.

—Mañana seguimos con el cumpleaños, ¿Te das cuenta de que con amigos como nosotros tu cumpleaños dura más de un día?—dijo Mark sonriendo, no pude evitar reír

—Si, creo que soy muy afortunada.

—Oh si—dijo Mark.

Justo antes de entrar a la carpa quedé mirando mi teléfono... tengo que dejar esto.

Él no va a llamar.

****************

—Amy, tu pierna está sobre la mía

—No, esa es la de Zac

—Zac, saca tu pierna

—No puedo, creo que alguien tiene su cabeza apoyada en mi cintura

—¿Porqué no miras?

—Lo hago, pero hay un enredo de cabezas, de piernas, de brazos...

—Creo que esto no está funcionando.

—¿Estás terminando con nosotros, Valerie?

—No son ustedes, soy yo que tengo hambre y no puedo levantarme.

—No, yo creo que sí son ustedes.

—Lo que intenta decir Maddie es que deberíamos movernos.

—Exactamente.

Entonces todos nos movimos de una vez por todas, no sé como llegamos a enredarnos tanto entre nosotros mismos, la carpa no es muy grande y somos seis personas.

En la noche no pudimos dormir mucho, aunque no sé si fue por la carpa o porque seis amigos, intentando dormir en un mismo lugar se hace imposible, siempre encontrábamos la manera de reírnos de algo nuevo.

Todo a sido simplemente increíble, pero... no perfecto.

Nate no llamó, ni siquiera un mensaje.

Narra Zac.

—Hey —hablé sentándome al lado de Maddie frente al río

—Hola.

—¿Tienes algo?

—¿Cómo...? Bueno, últimamente pareces saberlo todo.

—Dime algo que no sepa—dije alzándome de hombros, ella rodó los ojos —Pero sí quiero saber qué ocurre.

—Yo... no me malentiendas, este fue uno de los mejores cumpleaños que he tenido, pero...

—El perdedor de tu novio no llamó, ¿O si?

—De nuevo. ¿Cómo...?

—Valerie me contó.

Rió —Bueno, si... es eso.

—Sé que... lo quieres mucho, pero por favor no dejes que te arruine esto.

—Es solo...—suspiró —Tengo mucho miedo de que algo le haya pasado, de su lesión o... tal vez... no lo sé, no me ha llamado en muchos días y realmente me gustaría saber qué fue lo que hice mal.

—¿Piensas que tú hiciste algo?

—Si, no encuentro otra explicación.

Tragué grueso.

Me gustaría poder decirle que el tipo es un idiota y que no la merece.

¡No la llamó para su cumpleaños!

El tipo parece no saber a la gran chica que tiene al lado y sinceramente me molesta.

El problema aquí es... que ella lo ama y yo sé que nada de lo que yo haga va a poder cambiar eso, lo peor de todo es que sé que importa muy poco todas las ganas que tengo de poder hacerla feliz, sé que el único que puede hacer eso es él.

—Deberías llamarlo—le aconsejé finalmente

—Lo he intentado, pero no me quiere contestar.

—Lo va a hacer ahora. Y si no yo mismo viajaré a donde sea que está él y le romperé el hocico.

Rió.

Joder, parece una tortura...

—Gracias por todo, en serio. Eres un muy buen amigo.

Auch.

Dolió, Maddie.

Okay, lo entendí, somos amigos, ¿Puedes dejar de restregármelo en la cara?

—Si... si, claro—mascullé

Jamás en mi vida creí que haría este papel de idiota.

Jamás en mi vida creí que una chica podría haber llegado a afectarme tanto.

Pero pasó y simplemente no pude evitarlo.

Y ahora ella constantemente está dentro de mi cabeza y no sé qué hacer para cambiar eso, ni siquiera puedo estar con otras personas sin tener su nombre grabado.

La quiero.

Y justo ahora no sé qué hacer frente a eso, pero mientras más la veo, más quiero decirle que la chica de la que le hablé es ella.

Justo ahora trae un vestido azul junto con unas zapatillas vans, su cabello castaño claro cae liso por sus hombros... se ve hermosa.

No trae ni un gramo de maquillaje y se ve mucho más linda que muchas chicas que usan toneladas.

No puedo creer lo cursi que me he vuelto.