WILL/KAI
La perdí un segundo de vista, la gente empezaba a acercarse a la hoguera debido al frío que empezaba hacer y ella no estaba. La busqué con una extraña desesperación, no lo entendía, ¿qué me importaba a mí una estúpida niña?
Me concentré en mis amigos, ellos si me importaban aunque nunca se lo diría. Ed hablaba con una chica, alguien a quien yo conocía de antes de la muerte de mi madre, ella era un año mayor que yo pero jugábamos juntos en el patio del colegio.
- ¿De quién es la fiesta? – preguntó Ed a la chica, Sussan creo que se llamaba.
- La damos en honor a mi prima. Hacía mucho que no nos veíamos y ha venido a pasar un par de semanas con nosotros. – contestó esta con una gran sonrisa en la boca.
Era obvio que estaba emocionada, supongo que para ella era todo un honor estar aquí, hablando con Ed y conmigo a su lado. No es que fuese un creído, lo sabía por sus actos, por cómo no dejaba de mirarme de reojo y se sonrojaba cuando yo la pillaba.
- ¿Quién es tu prima? – dije de manera seca y cortante.
Ella se puso a mirar hacia todos los lados, complacida de que le hubiese dedicado cuatro palabras y dispuesta a contestarme lo antes posible.
- Esa de ahí. – dijo señalando a mi chica guerrera, la que estaba en la orilla.
Me largué y la deje con la palabra en la boca, creo que quería decirme como se llamaba su prima pero no quería saberlo, o al menos no de sus labios, quería que ella me lo dijera.
Estaba tan absorta en sus pensamientos que ni siquiera notó mi presencia, tuve que hablarla para que se girara y me mirara.
- ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como este? – dije recordando el titulo de una canción.
Ella no contestó, en lugar de eso se me quedó mirando con una ceja levantada y con cara de asco. Yo me senté a su lado para que no tuviera que levantar la mirada y pudiera mirarme bien.
- ¿Qué haces? – dijo ella en cuanto me senté.
- Disfrutar del mar.
- Pues disfrútalo diez metros más para allá. – dijo señalando hacia la derecha, me estaba pidiendo que me apartara.
- Es que este es el sitio perfecto. – dije sabiendo que se mosquearía.
Y así fue, pude ver como la cólera iba subiendo hasta su cara, su mirada era dura e inexpresiva, pero había algo, algo más en sus ojos que no sabría identificar con exactitud, se parecía al interés pero con cierto reproche.
Al final se levantó tirándome la manta a la cara de forma despectiva. Nunca antes me habían tratado así, con desprecio y mostrando una falta de interés que resultaba hasta molesta. Así era como trataba yo a los demás y estaba probando mi propia medicina.
“Si piensas que voy aprender de esto, lo llevas claro guapa – pensé mientras me levantaba y la seguía hasta donde estaba su prima”
Yo era William, el motero-mujeriego-villano del pueblo. Nadie se atreve a tener un comportamiento así conmigo y ella no iba a ser la primera.
- Oye Sus, me voy para casa. – dijo esta al llegar donde estaba su prima.
- Pero es muy pronto.
- Tranquila, se volver yo sola. – dijo poniendo una falsa sonrisa que solo yo lo vi.
- Está bien. Toma mis llaves, luego déjalas debajo del felpudo para que cuando yo regrese pueda abrir. – le tendió las llaves y paso de ella para volver a la conversación que estaba teniendo con Ed.
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Saga Elementos III: Agua
FantasyEl chico agua nos sorprenderá por su carácter y por su fuerza. Un rebelde sin causa que se ve en medio de un destino que nunca buscó pero que lo aceptará con los brazos abiertos solo porque eso le hará escapar de su penosa vida. Pero como en todas m...