Saga Elementos III: Agua

Capítulo 30: La huida.

KAI

Entre tanto luchador experimentado, me estaba volviendo loco. No hacían otra cosa que venir y darme recomendaciones para cómo actuar en diferentes momentos y situaciones, me daban tanta información que no era capaz de asimilar ninguna.

- Lo más importante de todo, es que no te separes de nosotros. – me dijo Eve con una severa mirada.

- De acuerdo. – era lo único que decía.

- Si nos atacasen, intenta no ponerte en la trayectoria de los sombras, escóndete detrás de alguno de nosotros. – dijo ahora Steeve.

- De acuerdo. – otra vez.

- Sobretodo no intentes hacerte el héroe, tú eres lo importante. Si es necesario, cogerás solo ese avión. – me dijo ahora Ralph

Pero a eso no podía estar de acuerdo, no me iría sin Eve y eso era importante que lo supieran.

- No me iré sin Eve. Entiendo lo importante que es mi destino, pero ese destino no será si ella no está a mi lado, ¿lo habéis entendido? – les dije a los tres.

Pude ver una fugaz sonrisa en los labios de Eve, sabía que le había gustado mi fuerza y mis palabras, pero en seguida se puso sería y me miró con severidad. Sabía que en el fondo no estaba de acuerdo conmigo y que ella preferiría que me fuera solo, pero eso no iba a pasar.

- Da igual, no importa, saldrá bien. – dijo Steeve dando ánimos al grupo.

La verdad es que tenía un nudo en el estomago, era como un presentimiento de que algo malo iba a pasar, no sé el que pero no estaba a gusto.

La puerta sonó con tres golpes secos y yo me sobresalté, no sabía que esperábamos visita y por la cara de Eve y de Steeve, tampoco tenían ni idea.

Fue Ralph quien se adelantó para abrirla, Eve le fulminó con la mirada cuando pasó por su lado y Steeve le miró con desconcierto. Esto era salirse del plan y estaba claro que a ninguno de los dos le gustaba el comportamiento de su jefe, y para ser sinceros, a mí tampoco. Algo rondaba en su cabeza, no sabía si era porque estaba enojado por no seguir su plan o era otra cosa, pero este no era el mismo Ralph que me presentaron en Castlesite.

La puerta se abrió y se escucharon pasos acercarse, el ambiente estaba tenso, Eve se había colocado delante de mí y Steeve hizo lo mismo.

Al final apareció, era un chico alto y muy fuerte, mucho más que yo. Su mirada se posó en mí desde el momento que entró en el pequeño salón y Eve y Steeve dijeron a la vez:

- ¿Meison?

EVE

Estaba enfadada con Ralph por muchos motivos que no era capaz de comprender, empezando por su actitud. No sabía que le había pasado o que se supone que había hecho para que me tratara así, pero lo que si sabía es que estaba poniendo la misión en peligro.

La puerta acaba de sonar y fue Ralph quien la abrió. Tanto Steeve como yo nos miramos desconcertados, él estaba jugando a nuestras espaldas y eso no podía permitirlo.

El ambiente estaba algo tenso, yo porque estaba muy enfadada y el resto supongo que por la nueva visita. Al final oímos la puerta abrirse y unos pasos que se dirigían al salón.

Le conocía muy bien, era alto y fuerte, su pelo castaño se lo había cortado al ras y ahora le hacía parecer más duro, pero sus facciones eran demasiado redondas como para infundir tanto miedo. Le conocía demasiado bien y verle me trajo recuerdos de los últimos momentos que pasé en mi comunidad.

- ¿Meison? – dijimos Steeve y yo a la vez.

Meison fue mi contrincante en el último examen de lucha, recuerdo lo mucho que me enfureció su típica mirada de “no quiero hacerte daño, pequeña” y como le di un buen derechazo para quitársela. Sonreí ante tal recuerdo.