Capitulo 12

150 7 0
                                    

El estruendo de la botella haciéndose añicos en el piso, me regresa a la realidad. Tyler se ha accidentado, estaba ebrio ¡JODER! Él no es de los que toma sin control alguno, no sé por qué lo hizo. O bueno, talvez lo sé pero no quiero ni pensarlo, no podría soportar que por el hecho de que Daniela le haya contado todo, se haya embriagado sin parar y haya cogido su auto, todo sería mi culpa, mi puta culpa.

—Gaby, tenemos que ir al hospital, necesito verlo, necesito saber cómo está, necesito... — no puedo terminar de hablar, siento que se me forma un nudo en la garganta, y las lágrimas comienzan a salir.

—Claro que iremos, pero tienes que tranquilizarte — dice y se va a pagar las bebidas que ni si quiera nos alcanzamos a tomar.

Cogemos el primer taxi que pasa, nos subimos y para añadirle algo más a mi puto día de mala suerte, está lloviendo y el señor va como una tortuga. Y me estreso tanto que le exijo que suba la velocidad, que es una emergencia pero no! Dice que si excede la velocidad podríamos terminar matándonos así que con ayuda de Gaby logro calmarme.

Cuando llegamos al hospital preguntamos por él y nos dicen que está en salas de cirugía y que tiene varios golpes, una pierna fracturada y ha perdido mucha sangre. ¡Joder! Quiero darme contra las paredes, esto es mi maldita culpa, si yo hubiera sido sincera con él desde un principio, esto no hubiera pasado porque se habría enterado de la verdad por mí y no por otros, menos por esa imbécil.

— ¿Podemos pasar a verlo cuando salga? — le pregunto a la enfermera que está detrás del mostrador.

— ¿Son familiares? Si lo son, claro pueden pasar de lo contrario no — dice con esa cara de amargada y baja la vista al computador para escribir quien sabe que chorradas, seguro estará metida en Facebook o vaya a saber que, por que lo que si sé es que de trabajo no es. Tomo aire para no comenzar la tercera guerra mundial justo aquí en la sala de espera.

—No, no lo somos pero somos las enfermeras, nos han contratado para el cuidado particular de él — miento, y espero que nos crea, lo que está a nuestro favor es que vamos con el uniforme del instituto y así parecemos todas unas enfermeras.

—No me han informado nada, así que cuando salga ya veremos — dice y nos mira de arriba abajo. La verdad que estoy haciendo uso de todo mi autocontrol a pesar de que me está sacando de mis casillas y fuera de eso estoy muy preocupada por él. Preferiría ser yo la que estuviera en esa sala, me lo merezco, él no porque no ha hecho más que ser bueno conmigo.

—Gracias, y por si le queda alguna duda traemos carnets donde puede verificar lo que le decimos — digo intentando que no suele de mala manera, pero no lo logro.

—Está bien, ¿saben algo de los familiares? — pregunta. ¡Mierda! Ni siquiera conozco a los padres, no sé ni dónde viven y menos su número telefónico.

—No, pero trataré de contactarlos y le informo — miento.

—Gracias, por favor siéntense en cualquier momento puede salir el doctor a dar avances. — dice con una sonrisa lo más de falsa.

Doy vuelta para ir a sentarnos pero no veo a Gaby, ¡Dios! Ahora donde se metió. Miro entre varias personas que se encuentran llorando, unas caminan de un lado a otro, otras lloran incluso gritan, es horrible pero por fin la localizo, está junto a la ventana y el movimiento de sus hombros me indica que está llorando. Me acerco a ella y la abrazo, no soy muy expresiva pero en este momento creo que ese abrazo es justo lo que necesitamos.

—Gaby, por favor no llores — le digo conteniendo yo también mis ganas de llorar, si ambas no derrumbamos será peor.

—Aliss, me siento muy mal él ha tratado de arreglar las cosas conmigo ha hecho todo lo que está en sus manos y yo lo he perdonado, pero no soy capaz de decírselo y tengo miedo de que algo suceda y la vida no me dé la oportunidad para decirle que lo perdono, que en nuestra amistad algo se rompió, pero lo podemos arreglar, es mi mejor amigo y lo quiero muchísimo a pesar de lo que pasó, sólo quiero que lo sepa — solloza

Una Nueva Oportunidad Para Amar...Where stories live. Discover now