Desde que te conocí [Hiccup y tú]

Capítulo 14

Hiccup Haddock

—¡Ganamos! —gritó mi padre junto a otros.

Ganamos.

Sin embargo, siento que hemos perdido.

Yo he perdido.

La he perdido.

—______....— dije entre sollozos.

Acerque mi cabeza hasta donde se encuentra su corazón, aún latía, era débil, pero latía.

—Hey, abre los ojos —sentí como unas cuantas lágrimas salían de mis mejillas.

—¡Hiccup! ¡Ganamos! —sentí voces a mis espaldas. —¿Hiccup? —sentí muchas pisadas rodeándome, alcé la vista y me encontré con los rostros asombrados de mis amigos y sus ojos cristalizados.

—Oh no...—dijo Astrid y se agacho ubicándose a mi lado.

—¿Ella...esta...? —Patán titubeaba.

—No, su corazón aún late, aún esta con vida...aún puede vivir...—Ella no podía irse, no así.

—Gothi, ella podrá ayudarnos, creo que esta en el comedor con los niños —se apresuro a decir Patapez.

No dude y tome el cuerpo inerte de _____ y corrí hacia el comedor, al llegar quedaron asombrados, el dragón de _____, Moody, salió de entre la multitud al igual que Gothi.

—¿Puede ayudarnos? —Gothi observo a _____ y luego a su herida— Por favor...

Gothi nos indico una camilla improvisada que estaba en una esquina, lleve a _____ hasta allá y la deje allí. Luego, la sanadora nos hizo un gesto con su bastón para que nos fuéramos y así lo hicimos, sin embargo, Moody se quedo junto a ella.

—¡Mamá, ella es la mujer que me salvó!—exclamó una niña pequeña e indico a _____.

Ella arriesgo su vida por una niña.

Fui a sentarme en una esquina del comedor, mire mi mano estaba llena de su sangre, no obstante allí estaba, el collar que ella me había regalado, no pude evitar que unas cuantas lágrimas salieran de mis ojos.

—Amigo...ella estará bien —Brutacio se sentó a mi lado, al poco rato, todos se sentaron formando un circulo.

—Sí, Gothi es buena en lo que hace, lleva siglos haciéndolo —Aportó Astrid.

No quería decir nada, no quería hablar.

Sabía que ella era fuerte pero, ¿Si no lo lograba?

Al cabo de un rato entro mi padre seguido de todos los demás que habían estado en la lucha, mi mirada se cruzo con la suya e inmediatamente vino hacia mi.

—¿Hijo? ¿Estás bien? —Los chicos se separaron para dejar que mi padre se ubicara enfrente de mi.

—Yo estoy bien —me pare de mi lugar.

—Tus ojos están rojos, hijo...

—N-no quiero hablar de eso —tras mis últimas palabras me fui del lugar.

Pero al salir del comedor, la vista no resultaba agradable del todo, habíamos ganado pero, ¿A qué costo? Muchas vidas se habían perdido, muchos estaban heridos, _____ podía morir.

—Hijo —sentí la mano de mi padre en mi hombro— Puedes contar conmigo para lo que sea.

—Definitivamente, este es mi peor cumpleaños —dije más calmado.

—¿Sucedió algo?

—Sí, la mujer de la cual estoy enamorado tiene la mitad de una flecha en el costado del estómago, creo que ahora puede entender porque digo que es mi peor cumpleaños.

—Muchas vidas se pierden en guerras así...

—Lo sé...

—Ella esta con Gothi, ¿Verdad? —yo asentí— Ella estará bien, ¿Por qué no vas a descansar un rato?

—No quiero, quiero saber cómo estará ella...—suspire— ella no puede irse de ese modo...

—Hijo, cosas como estás te preparan para ser más fuerte, no importa lo que suceda, tu debes pensar. ¿Ella querría que yo siguiera llorando su muerte? —lo miré atónito.

—¿Ese es el truco que usaste para...seguir adelante?

—Algún día volveré a verla y bailar junto a ella, estoy seguro —vi como a mi padre se le ponían los ojos rojos.

La muerte de mi madre siempre lo pone de ese modo.

—Hazme caso, ve a dormir un rato —exigió mi padre.

Yo asentí y camine hasta mi hogar junto a Chimuelo y me lancé en la cama.

—¿Y si ella no está bien?...Dioses, claro que no lo está —puse mis manos en mi cabeza y luego las dejé caer a un costado de la cama, mi mirada estaba fija en el techo.

Chimuelo lamió mi mano, en un gesto de consuelo.

Aún no dejaba de mirar el collar que me había regalado.