Capítulo 49

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______ Haakosson

Al despertar observé la hermosa sortija que yacía en mi dedo, sonreí al recordar que volvía a ser la prometida de Hiccup.

Me vestí y me peiné, me puse parte de la armadura y me dirigí al comedor.

Allí los chicos no estaban, y no llegaron en todo el rato.

No creo que duerman tanto.

[...]

Las cosas no cambiaron al cabo horas, los chicos no estaban y muchos se preguntaban donde estaba el jefe de Berk.

Me dirigí al comedor, Valka había organizado una reunión y todos nos dirigíamos allí.

Al llegar pude ver su expresión, era de tristeza y no pude evitar preocuparme.

¿Cómo no hacerlo? Mis amigos no estaban.

  —¡SILENCIO! —Bocón calló los murmullos que se habían producido por el comedor.

Al instante todos se callaron y escucharon atentos lo que Valka diría.

  —Hiccup y los demás jinetes fueron a una misión —explico Valka con voz potente.

Muchos murmullos volvieron a surgir.

Todo tenía sentido, por eso se juntaban secretamente, iban a una misión y no quisieron decirme. ¿Adónde habrán ido? ¿Por qué no quisieron contarme?

  —Es probable de que no lleguen luego de un tiempo —Valka volvió a hablar haciendo callar a todos, menos a alguien que decidió preguntar.

  —¿Y quién será el jefe ahora? Dices que no llegará luego de un tiempo ¿Cuánto es eso? —preguntó un hombre y muchos lo apoyaron.

Yo igual lo hice, quería respuestas.

  —No estoy segura, solo informo lo que mi hijo dijo antes de partir —se excuso Valka al no tener respuestas— pero, como muchos sabrán, Hiccup estaba comprometido. Su prometida tomará su lugar como jefa.

Los murmullos volvieron a cesar y muchos posaron su vista en mi.

¿Jefa de Berk? ¿Yo? ¿Adónde habían ido los chicos?

Miré a Valka horrorizada. Me hizo una señal de que fuera hacia donde ella. Fui y me ubique a su lado, en la mesa que suele ocupar el jefe.

Los murmullos volvieron.

  —¡SILENCIO! —agarré el hacha que tenía alguien y la tiré sobre la mesa, el arma se incrustó bruscamente sobre la madera y todo volvió a quedar en silenció— Berk seguirá su curso normal, hasta que llegue el jefe y los jinetes. No deben preocuparse.

  —¿Cómo nos garantizas el bienestar de Berk, niña? —pregunto alguien de la multitud.

  —¿Crees que no soy capaz de liderar una aldea? —pregunte pero luego decidí hablar para todos— ¡Si alguien cree que no soy capaz que lo diga enseguida! —grité enfurecida— No veo ningún motivo por el que Berk decaiga, sé como funciona ésto y haré que funcione hasta que el jefe vuelva —hable seria y tratando de mostrarme molesta— Si alguien tiene sugerencias, son bienvenidas.

Todos se quedaron en silencio, nadie quiso contradecirme.

  —Bien, vuelvan a sus tareas normales —ordene— todo seguirá su curso normal —volví a repetir para darle énfasis a la oración que todos entendieran.

Al cabo de un rato, todos se habían ido del lugar, excepto Valka, Bocón y Daven.

  —¿Sabías esto? ¿Sabías que se irían sin decirme? —le dije a Valka con lágrimas en los ojos, ella asintió entristecida pero no me importó— ¿Adónde fueron?

  —Hiccup me ordeno no decirte, _____ —trato de tranquilizarme con su voz.

  —¡Maldita sea! ¡Pensé que todo podría ir bien aunque sea por una vez! —grité desesperada— ¿Todos se fueron sin decirme? ¿No les importo cómo me sentiría? —unas lágrimas salieron de mis ojos por la impotencia que sentía en el momento— ¡Pueden irse al demonio!

  —_______, ellos tenías sus razones —habló esta vez Bocón.

  —¿Ah sí? ¿Qué razones eran? ¿Tan buenas son que no soy digna de saberlas? —pregunté irónica.

Hiccup y mis amigos se habían ido, si no quisieron decirme, se debía a que era una misión peligrosa.

Pensé que todo estaba bien, que todo podría volver a funcionar entre Hiccup y yo.

Por eso él se había despedido ayer, para irse y quizás no volver.

Y se fueron dejándome a cargo de todo Berk.

Se habían ido y ni una nota me dejaron, solo me dejaron con el cargo de jefa que no pretendía tomar.

  —¡Si supiera donde demonios están, les aseguro que no estaría aquí! —grité otra vez.

  —Ese es el punto, no te dirán para que te quedes —comentó Daven.

Él tenía razón.

¿Por qué Hiccup me hizo ésto?

¿No podremos estar juntos sin que algo realmente malo deba suceder?

¿Por qué los chicos no me dijeron nada?

Sentí como tibias lágrimas salían de mis ojos, estaba enojada, por todo: se habían ido y me habían dejado como jefa de Berk.

Ni una maldita explicación me dieron, nada.

¿Cómo estaré tranquila?

¿Por cuánto tiempo se largaron? ¿Y por qué lo hicieron sin decirme?

Desde que te conocí [Hiccup y tú] Onde histórias criam vida. Descubra agora