Capítulo 16

14.4K 1.5K 225
                                    

Hiccup Haddock

  —Hijo, ¿Preparaste lo que te pedí?—Hablaba mi padre mientras ordenaba unos mapas y libros.

  —Claro, no tengo nada mejor que hacer— suspiré y le deje las anotaciones de los suministros sobre la mesa.

  —Ya paso un mes, pensé que estarías mejor— mi padre dejó de ordenar las cosas para mirarme.

  —Claro, estoy bien—trate de sonar convincente —Iré a pasear con...Chimuelo— indique la salida mientras retrocedía—no me esperes para la cena— agregué antes de salir rápidamente por la puerta. 

______ Haakosson

Desperté con un fuerte dolor en la cabeza, miré para todos lados, estaba en una habitación que no conocía.

Me senté en la cama, pero al hacerlo un fuerte dolor vino al costado de mi estomago. Ya lo recuerdo, la maldita flecha que estaba allí, no estaba.

¿Estoy viva?

Claro, así no es como me imaginaba el valhalla.

  —¿Cuánto tiempo estuve aquí?— me pare de la cama como pude, sosteniéndome de la pared.

Mire mi ropa, era la misma con la que luche y salvé la vida de esa niña, salvo que ahora, la ropa estaba más suelta. No he comido bien, supongo.

Una señora, Gothi, entró en la habitación, al verme abrió sus ojos de par en par y me indico la cama, claramente, quería que me recostara, y así lo hice. Supongo que ella es la que me ha ayudado a sanar la herida.

Al estar recostada, ella levanto mi camiseta y un vendaje que se encontraba debajo de ésta. Al ver la herida ella asintió sonriendo y se fue del lugar.

¿Cuándo podré irme?

Siento que no he comido en siglos.

Al poco tiempo ella llego con un trozo de pan y me lo dejo en una mesita de noche que se encontraba al costado de la cama, yo asentí agradecida.

Comencé a comer el trozo de pan, sabe a gloria.

  —Gracias por todo— le agradecí a Gothi y ella me devolvió la sonrisa —¿Cuándo podre irme?—Ella me sonrió y me señalo la puerta, no sin antes pasarme un trozo de palo, parecido a un bastón.

  —Gracias otra vez— Le sonreí tomando el bastón, así no tendría que afirmarme de las paredes.

Salí del lugar, fuera estaba Moody, al verme se lanzó a lamerme la cara.

  —Amigo, detente—dije entre risas— apenas puedo mantenerme en pie.

Moody miró mi bastón, pero lo boto al suelo y puso su cabeza sobre mi brazo, claramente quería ayudarme y no me negué.

  —Parece que estas emocionado de verme— lo acaricie mientras caminábamos.

Caminamos un poco más por la aldea, no habían rastros de la guerra, supongo que son rápidos limpiando desastres.

Seguimos caminando hasta que llegamos donde estaban los chicos, estaban todos excepto Hiccup, se encontraban de espaldas por lo que no me habían notado.

  —¿Iremos a ver a ____?—Preguntó Brutacio.

  —Fuimos en la mañana, podríamos ir en la tarde o mañana—puntualizo su hermana.

  —No veo la hora que despierte, ya ha pasado un mes desde que esta allí e Hiccup esta insoportable—comentó Astrid.

  —¡¿Un mes?!— lleve mi mano libre a mi cabeza.

Los chicos se voltearon a verme, todos con sus bocas abiertas y los ojos bien abiertos.

  —¿______?— Patán fue el primero que logró hablar.

  —¿Estuve un maldito mes allí?—miré a Moody  —¡Por eso estabas tan emocionado cuando me viste!

  —De hecho, un mes y unos cuantos días— Patapez saco su libreta.

  —¿Te encuentras bien?— Astrid se acercó a mi.

  —Si hubiera podido escoger entre esto y tus golpes en la cabeza, claramente hubiera preferido el golpe, pero, sí, estoy bien— Comenté provocando una risa de Astrid y luego un abrazo.

  —Nos alegramos de que estés bien— Brutacio también fue a abrazarme.

Al poco rato, todos me abrazaron y se separaron al cabo de unos minutos.

  —¿Donde esta Hiccup?— pregunté.

Los chicos se lanzaron miradas incomodas.

  —Verás _____, no lo sabemos— Astrid comenzó a jugar con sus dedos y luego se acomodo su flequillo —Suele ir a volar con Chimuelo y...la verdad no habla mucho con casi nadie, y cuando lo hace, no es muy...agradable.

  —¿Hiccup?— pregunté sin creerlo.

  —Sí— respondieron todos al unisono.

  —...creo que es momento que me pongan al día con todo.— comenté animada y ellos me guiaron hacia el comedor.

[...]

  —Y entonces Patapez cayó encima de mi, no fue bonito, creo que quede con alguna cicatriz— Patán contaba su relato animado y yo soltaba una que otra risa.

  —Dame esa pierna de pollo, monstruo— Brutacio miro a su hermana.

-No- Su hermana como respuesta alejo aún más el plato con la porción de piernas de pollo sonriendo victoriosa.

Miré a mi alrededor y vi a Hiccup a lo lejos, sin embargo, pareciera como si tratara de evitar nuestra mesa. Fue a buscar un plato de comida y luego comenzó a caminar hacía una mesa.

  —¡Hey! ¡Hiccup!— Astrid alzó las manos para llamar su atención.

  —Tal vez si hablaras tú vendría—Brutacio me dio un golpe delicado con su codo y yo negué moviendo mi cabeza.

Hiccup paso cerca de nuestra mesa, sin mirarnos, como si nos ignorara.

  —¿Por qué no te sientas con nosotros?— Astrid se paró de su lugar y alzó más la voz, llamando la atención del castaño.

  —¿Cuántas veces les diré que estoy bien SOLO?— recalcó la última palabra, su voz no era acogedora como yo la recordaba. No le dirigió la mirada al hablarle y tan solo se fue. 

Astrid volvió a sentarse, esta vez de mal humor.

  —Ahora creo que entiendes a lo que nos referíamos— Astrid me miro y luego lanzó una fugaz mirada hacia donde se encontraba Hiccup.


















Desde que te conocí [Hiccup y tú] Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang